1° L I B R O | | S A G A S E A S O N S
"Con ella aprendí que hay amores eternos que duran solo un corto invierno."
Él la conoció en invierno. Jamás pensó que se enamoraría de ella.
Ella se fue en primavera. Siempre supo que no se enamoraría de él...
—¡Es tan bonito! —exclamó Miyuki con un gato blanco y ojos azules en sus brazos—. ¿Nos lo podemos quedar? —Suigetsu y Sasuke se miraron entre sí, cansados.
—Miyu... no podemos tener gatos en la guarida —dijo Sasuke mientras la peliblanca fruncía el ceño.
—Porque tú lo digas. No tenemos un libro de normas, además, ya tenía un nombre para ella. —Sasuke negó y cogió al gato, más bien gata.
—Miyuki, no seas una malcriada —habló esta vez Suigetsu.
—Y tú no tengas cara de rancio, ¿ves? Ambas cosas son imposibles —exclamó la peliblanca.
—Igual de imposibles como el hecho de quedarnos este gato, vámonos —dijo el Uchiha, Miyuki sonrió de lado. Quería al gato y lo conseguiría.
—Lo entiendo, Sasuke, no quiero ser una molestia para ti. —Sasuke tragó en seco. Otra vez no. Odiaba esa palabra a muerte.
—Si estás intentando chantajearme con eso, vas mal —dijo el Uchiha, Miyuki inclinó su cabeza fingiendo inocencia.
—Sasuke... —Miyuki puso la cara más tierna que alguien podía haber imaginado. —¿Por qué no me dejas tener al gatito?
—¡Oh, por Dios! ¡Sasuke, detén esto! Es tan adorable que me hace daño a la vista —exclamó Suigetsu.
—He dicho que no, vámonos. —Miyuki negó.
—No, sin el gato no camino. —El Uchiha bufó, soltó al gato de su agarre y cogió a Miyuki a estilo princesa.
—Mira, no hace falta ni que andes.
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No puedes hacer olvidar a alguien que solo quiere recordar.
