1° L I B R O | | S A G A S E A S O N S
"Con ella aprendí que hay amores eternos que duran solo un corto invierno."
Él la conoció en invierno. Jamás pensó que se enamoraría de ella.
Ella se fue en primavera. Siempre supo que no se enamoraría de él...
—Sasuke... —susurró Miyuki cogiendo su mano—. Siento haberte preocupado, solo salí a ver si llovía, perdóname —se disculpó Miyuki.
—Eres demasiado despreocupada —dijo Sasuke alborotando el pelo de Miyuki con su otra mano.
—¿Estás bien? —preguntó la de ojos azules observando los arañazos en el brazo de Sasuke—. Soy la única presente, Karin, Suigetsu y Jūgo no están... ¡puedo intentar curarte! —exclamó la chica emocionada.
—No hace falta, solo son unos rasguños, Miyu —aclaró Sasuke pero la chica ya se estaba haciendo una coleta alta y había cogido desinfectante y algodón.
—Siéntate —ordenó la chica señalando el sofá—. Si te duele, solo debes decírmelo. —La peliblanca acercó con cautela el algodón empapado de desinfectante al brazo del Uchiha. Al tocar su piel, el vello de Sasuke se erizó. —Debes aguantar, por favor.
—Esta chiquillez no va ha hacer que llore —habló Sasuke frívolamente, Miyuki apretó el algodón y él se quejó.
—Si no vas a llorar, no te quejes —dijo burlescamente la chica.
Al cabo de un rato, cuando hubo desinfectado las heridas, se sentó en el sofá y Sasuke hizo lo mismo a su lado.
—Voy a dormir un rato, despiértame cuando lleguen los demás —ordenó Miyuki y, al cabo de pocos segundos, se quedó dormida, apoyando su cabeza en el hombro de Sasuke, quien la miraba sonriendo de lado.
—Gracias, Miyu —agradeció el Uchiha jugando con un mechón de pelo de la peliblanca.
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