II. Solo fue un cambio de celda.

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<<No dejo de ser el prisionero al que todos manejan a su antojo. Basta ya con tanta tortura>>


Leía plácidamente sentado en mi silla favorita, otro tomo de mis libros de magia y hechicería antigua. Uno de estos guardias en los que Odín confiaba tanto, llegó a mi celda para tirarme un par de esposas. Las miré por encima de mi libro, luego miré al guardia.

"Ah, lo siento. No son mi tipo", y le sonreí sarcástico.

"Loki Lauffeyson, Odín solicita tu presencia", dijo secamente con un volumen francamente molesto.

Suspiré y volví la vista a las esposas. ESAS esposas. Aquél objeto que inhibe todo mi poder, odiaba ponermelas. Me hacían sentir...vulnerable.

Con desgane las puse sobre mis muñecas, que me apretaron bastante. "Listo, llévame con tu rey", me encogí de hombros. Puse una mueca de desagrado mientras el guardia me jaloneó para también ponerme las cadenas del cuello a los pies. "¿Esto es necesario? Creí que nos habíamos hecho amigos todo este tiempo", le dije. Aparentemente no entendió la gracia porque me empujó por el pasillo sin decir ni una sola palabra.

Me llevaron al salón del trono (y claro, a Odín le encanta estar sentado ahí). Estaba acompañado de Frigga...y obviamente del bestia de Thor. Tan alzado, casi inalcanzable. Me miró desde que entré, no me quitaba la vista de encima. Otra vez tenía la sonrisa idiota en la cara.

"Padre...madre, hermano. Aquí me tienen. Es bonito salir por un poco de aire fresco para variar"

"Me alegra saber que no haz perdido el sentido del humor a pesar de todo.", la voz de Odín resonó en todo el salón. "Me ha informado Thor que tienes conocimiento sobre tu castigo final."...AH, es verdad...Castigo final.

"Querrás decir sobre mi EJECUCIÓN", fruncí el ceño. "Sí, lo sé. Y no tengo nada qué decir. No era necesario traerme hasta aquí para algo tan mundano"

La cara de Frigga entristeció notablemente. Casi me rompe el corazón.

"Sin embargo, Loki...", se paró de su trono. "Después de mucho deliberar, tenemos una resolución para ti. Yo estaba en totalmente seguro sobre lo que había decidido para tus pecados. Porque lo que haz hecho es grave. En cambio, Thor ha hablado en tu nombre, dándote una segunda oportunidad. Me ha solicitado ser tu guardián, hasta que pruebes ser digno de mi confianza de nuevo.", por supuesto que me reí en su cara. Contento como siempre de sí mismo, Thor el salvador.

"Perdón, pero...nadie le pidió tal cosa. Estaba bien con la decisión anterior." Claro que no estaba bien...pero ellos no tenían que saberlo. Estaba por perfeccionar la técnica para poder escapar, aunque se me acababa el tiempo. Miré a Frigga y vi la decepción en sus ojos.

"Oh, Loki...no seas TAN orgulloso y acéptalo.", irrumpió Thor. "Eres mi hermano, me preocupas."

"No, Thor. Eso me parece absurdo, deja ya ese teatro del hermanote protector.", comenzaba a irritarme el cuento ese.

Él lanzó una risa baja, colmada de confianza, y se acercó a mi. Nos miramos a los ojos, fijamente. Él no hacía ni una microexpresión salvo su falsa sonrisota, en cambio, a mi me temblaba una ceja.

"Estarás conmigo hasta yo decida que puedes recuperar tu libertad.", dijo finalmente y me dió una palmada en el pecho. Volteó a Odín y solicitó retirarse.

"Oh, por favor. Llévatelo de aquí antes que sienta remordimiento.", le contestó el auto proclamado Padre de Todo.

Thor me tomó por un brazo y me jaló con él. Antes de abandonar la sala, pude oír la voz de Odín resonando sus palabras para mí. "Espero, hijo mío, que encuentres el camino a la redención"

Slave. [Thorki lemon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora