Me has manipulado

Capítulo 8. Juegos.

En la agencia.

- Nakahara necesito que acompañes a Yosano a realizar unas compras -ordenó el rubio de lentes.
- Está bien -respondió sin quejarse el mafioso.
- Vamos Chuuya-kun -dijo la doctora con una tierna sonrisa mientas jalaba de su mano.

Ambos se van.

- Dazai, tenemos que hablar -dijo su compañero
- ¿Qué? -Respondió de manera indiferente y sin querer prestar atención.
- ¿Vas en serio con Nakahara? -Serio.
- ¿Por qué quieres saber? -Dazai estaba algo curioso a tal pregunta.
- Él en verdad te ama Dazai, a pesar de todas tus tonterías quiere estar a tu lado, no sé si es lo suficientemente idiota como para amarte.
- ¿Te gusta Chuuya? -Preguntó en tono molesto.
- No, solo que hace unos días hablamos de ello y no supe que responderle -respondió algo confundido por la pregunta pero con mucha seguridad en sus palabras.
- Sí, lo amo, Kunikida-kun estoy consciente de que hace años lo lastimé, creo que al punto de casi matarlo.
- ¿Por qué? -Preguntó curioso.
- Era muy sádico, Chuuya solo era un juego para mí, no me importaba para nada su salud o su bienestar, solo quería tener un juguete con que divertirme y tal vez en algún momento verlo muerto -ríe-, bueno solo eran mis bromas de mal gusto, al estar confundido por lo que en verdad sentía hacia Chuuya.
- Vaya, realmente eres un maldito idiota Dazai -dio un suspiro.
- Espero que consigas a la mujer que vas a amar Kunikida-kun -dijo con una sonrisa pervertida.
- Si, yo igual -dijo sin mirar a Dazai y notar la expresión que tenía.
- ¿Acaso tu... eres gay? -dijo en tono burlón.
-Kunikida lo miró inmediatamente muy sorprendido y confundido ante la pregunta del suicida-. Claro que no, mis ideales no incluyen enamorarme de un hombre, debo seguir la guía de mi vida y esperar unos años para conocer a la mujer que va a ser mi esposa.
- De acuerdo -le sonríe.

Así los agentes siguieron su trabajo mientras que Chuuya y Yosano hacían las compras.

Mientras tanto. En la Port Mafia.

- Chuuya parece de cierto modo mas alegre que antes -dijo la pelirroja
- Está a salvo con Dazai -respondió su jefe mientras veía a su Elise
- Chuuya no podría ser el nuevo jefe de la mafia ahora -suspira.
- No, Dazai-kun no aceptaría si se lo pido de nuevo pero aún tengo tiempo de decidir quien será mi sucesor
- Si -sonríe levemente- si llega a ocurrir algo espero que Chuuya esté a salvo en la agencia, él es una buena persona.
- ¿Para alguien que lo torturaba por placer? -Pregunta Mori, era demasiado malo enamorarte de quien te maltrata pero... al menos ya cambió... tal vez.

Mori sonríe.

En la estación de trenes.

- Chuuya-kun ¿cómo te has sentido estos días? -Preguntó la doctora algo curiosa hacia el mafioso.
- ¿A qué se refiere?, si es mi salud estoy de maravilla -dijo algo asustado porque no quería un nuevo tratamiento de parte de ella.
- No, me refiero a estar en la agencia y con Dazai -respondió algo ofendida.
- Disculpa... me gusta estar en la agencia, no creí que pasaría pero aquí estoy, trabajando junto a ustedes... con respecto a Dazai, estoy bien, Dazai es un gran hombre, me trató muy mal antes pero no puedo odiarlo, soy un idiota por eso, lo amo demasiado, no puedo pensar estar lejos de él nuevamente.
- Todos nos damos cuenta, al principio todos creímos que no ibas encajar en la agencia, pero eres muy buen trabajador, al menos mucho mejor que Dazai; Ranpo no estaba confiado en sus habilidades al darse cuenta de que te gustaba estar con nosotros.
-Chuuya suelta una risa leve-. Tampoco lo hubiera creído.
- Al menos Dazai se ha vuelto un poco más trabajador gracias a ti.
- Porque se lo pido -respondió.
- Si, porque eres tu Chuuya-kun; él no obedece a nadie.

En otra parte.

- Atsushi -llamó un pelinegro.
- ¿Si? -respondió el albino mirando hacia su pareja.
- Quédate conmigo esta noche -soltó sin vergüenza alguna.
-Atsushi se sonroja ante tal atrevimiento de su acompañante-. Pero Akutagawa, yo vivo junto a Kyouka, no quisiera dejarla sola, es una niña de 14 años y...
- ¿La quieres más que a mí? -Lo dijo en un tono molesto... Akutagawa estaba celoso de Kyouka por pasar más tiempo con su Jinko.
- No pero... -suspira derrotado- está bien, me quedaré contigo esta noche Akutagawa -lo abraza fuertemente- no te molestes conmigo por favor.
- Eres una molestia -corresponde al abrazo- pero lo suficiente como para que yo te soporte.
-Atsushi sonríe tiernamente-. Lo sé.

Unas horas más tarde.

- Chuuya, vamos a comer afuera -dijo Dazai mientras lo abrazaba.
- ¿No te gusta la comida que preparo? -Pregunta en tono molesto.
- Has mejorado bastante, eres digno de una ama de casa perfecta pero de cualquier manera quiero comer y beber fuera.
- Pues vete si quieres ir.
- No me iré sin mi hermoso novio.
- Yo me quedaré, la comidq ya está lista -dijo bastante molesto.
- Entonces tendrá que ser por la fuerza -dio como respuesta para después levantar a Chuuya y dirigirse hacia la puerta.
- Maldito idiota bájame -decía Chuuya mientras golpeaba la espalda de su novio.
- Te bajaré cuando lleguemos al restaurante, te gustará -sonrió-, vamos ponte los zapatos y agarra tu saco, tenemos prisa.

Chuuya se calmó y Dazai lo bajó, ambos fueron tomados de la mano y el pelinaranja fue callado en el transcurso del camino.

- ¿Estás molesto?
- No pero, la comida se va a enfriar y puse mucho esfuerzo en ella -dijo Chuuya decaído.
- Debí decirte antes que quería salir.
- A la próxima dime -lo besa.
- Lo lamento, no lo pensé.
-Chuuya sonríe-. vamos a probar la comida que tanto quieres.
- ¡Si! -Dijo Dazai emocionado.
- Si no me avisas a la próxima voy a golpearte donde mas te va a doler -amenazó Chuuya.

Dazai no dijo nada, tenía miedo.

Ambos fueron a un restaurante y se sentaron a comer, lo estaban disfrutando y Dazai ordenó un vino que sabía que le gustaría a Chuuya; no se equivocó él bebió lo que pudo hasta quedar borracho y casi inconsciente, no dejaba de decir estupideces a lo que Dazai solo se burlaba un poco. Él plan de Dazai había funcionado, Chuuya estaba totalmente desorientado e indispuesto a defenderse, Dazai iba a abusar de Chuuya.

Dazai era tan imbécil, no cambiaba, solo decía mentiras y falsas promesas.

Llegando a casa Dazai esposa a Chuuya a la cama mientras le quita levemente la ropa y le cubre los ojos. Espera un poco para que Chuuya esté más consiente y pueda iniciar su "juego".

1 hora después.

- ¿Dazai? -Se preguntaba un Chuuya muy mareado.
- Que bien que despiertas Chuuya -dijo mientras ingresaba un vibrador en la entrada de Chuuya.
- ¡Idiota me duele!
- Ya te había preparado hace un momento, no debe doler tanto -activa el aparato-, debes sentirte bien.

Chuuya comienza a retorcerse ante las vibraciones del juguete en su interior, era demasiado estimulante.

- ¿Se siente bien?
- ¡Es raro! -Decía Chuuya entre gemidos y gritos.

Dazai siguió probando los juguetes que tenía pero se molestó luego de un poco, no le gustaba que Chuuya gimiera con algo que no era su pene, parecía que ya lo estaba disfrutando.

- Suficiente, me aburrí -le quita las esposas y la venda.
- ¿Dazai?
- Solo debes sentir mi pene Chuuya, no me gusta que gimas con otra cosa, no debes disfrutar otra cosa que no sea mi pene -dijo un poco "celoso"
- Entonces dámelo -lo decía en un tono erótico-, fue culpa tuya usar estas cosas.
- ¿Me intentas provocar? -Dazai sonríe pervertidamente.
- Sí, así que date prisa y metelo aquí -Chuuya se dio la vuelta mientras que sus manos habrían su trasero dejando ver su ano ya perfectamente mojado.

Dazai se excitó de inmediato y no dudó en meter su pene dentro de Chuuya.

- Ahh~ Dazai.
- Te amo Chuuya.
- Yo a ti ahh~ sigue, no pares.
- Como ordenes "Mon petit" -respondió Dazai mientras hacía sus embestidas más fuertes y profundas.
- ¡AH DA-ZAI... AHÍ! -Gritaba Chuuya lleno de placer.
- No trates de contener tus gemidos, me encantan -dijo mientras aumentaba más y más sus embestidas por órdenes de su amado, no quería que la noche acabara.

Ambos estaban muy agotados pero no estaban dispuestos a dejar de hacerlo; lo hicieron muchas veces sin descanso hasta que al final no pudieron más y se quedaron dormidos, llenos de sudor y tratando de recuperar la respiración.

- Te amo Chuuya - susurró Dazai

Mientras tanto Atsushi y Akutagawa habían pasado por la misma situación pero aquí Atsushi se desmayó por tanta acción de parte de su novio Akutagawa.

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¡Volví! Al fin he publicado, me quedé sin ideas y lo lamento, trataré de publicar pronto. Espero y el capitulo no tenga demasiadas tonterías...
Perdonen pero dejo en claro que esta relación es tóxica. ¿Quién se enamoraría de la persona que te maltrata?, solo es una historia, no lo tomen tan literal.