Quien no se ha apuntado al gimnasio y nunca a ido?
Eso le pasaba a Tn Dornan, hasta que un día decidió ir y poder ganar un cuerpazo para tener la atención del chico que le gusta.
Abraham Mateo uno de los instructores del gym, el más duro consigo mi...
La puta alarma me despierta para ir a trabajar. Me levanto de la cama con pereza y bajo a desayunar mis cereales de colorines. Lavo los cubiertos y subo, me ducho y lavo mis dientes. Al salir hago la cama y me visto con esta ropa.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Cojo mi móvil, monedero y llaves de casa y salgo de casa. Por suerte el trabajo me pilla cerca de casa así que no tengo que coger el coche.
-Tn: Buenos días -digo entrando a la oficina-.
Como siempre la gente no saluda, esta revista puede ser muy famosa pero los trabajadores son espantosos en cuanto modales. Me siento en mi escritorio y empiezo a rellenar papeles y atender llamadas. Se me ha olvidado comentaros que tengo agujetas por todas partes después de lo de ayer. Solo de pensar que voy esta tarde de nuevo al gym me da pereza. Mi jefa me llama diciendo que vaya a su oficina con las fotos impresas de ayer.
-Tn: Se puede? -digo asomándome por la puerta después de haber llamado-.
-Ss (Señora Scart): Pasa y siéntate -me siento en la silla enfrente de su escritorio-. Ha traído las fotos?
-Tn: Claro señora Scart -le doy la carpeta con las fotos y las mira por encima de sus gafas-.
-Ss: Como van los textos?
-Tn: Estoy recibiendo ya algunos textos de los compañeros. En cuanto los tenga todos se lo mando saber -asiente-.
-Ss: Puedes irte, es hora de tu descanso.
-Tn: Con su permiso señora Scart -salgo de su oficina-.
Salgo del trabajo y como siempre me voy a la cafetería más cercana y pido lo de siempre, un café con leche y un cupcake de oreo. Al rato me lo llevan a la mesa, reviso mi móvil en busca de mensajes nuevos y no tengo nada importante.
-A: No debes comer eso Tn -me dice cuando estoy apunto de pegar un bocado al cupcake-.
-Tn: Joder ni desayunar me dejas -hago un puchero-. Siéntate anda -lo hace-.
-A: Vale puedes comerte el cupcake, pero esta tarde harás más cosas que ayer.
-Tn: Estás bromeando verdad Abraham? -me limpio la boca con la servilleta y el niega-. Vamos hombre si tengo agujetas en todo el cuerpo -ruedo los ojos-. Qué haces aquí?
-A: Desayunando es obvio -dice bebiendo de su café para llevar-.
-Tn: Está cafetería está lejos de tu trabajo.
-A: Cierto pero es donde mejor está el café.
-Tn: Eso no lo niego. Oh mierda -miro el reloj de mi muñeca-, llego tarde al trabajo -recojo mis cosas y dejó el dinero en la mesa-. Nos vemos esta tarde Abraham.
Salgo de la cafetería corriendo e intento no matarme con los tacones. Llegó a la oficina y por suerte mi jefa no está. Hago mis papeles y de vez en cuando veo a Ángel, aunque el pasa olímpicamente de mi. Aún no salen de mi mente esas palabras que me dijo. No lo conozco mucho pero ayer engañó a su novia con la modelo, si pueden estar peleados pero aún es su novia. No sé qué le veo aparte de su sonrisa perfecta, sus ojos perfectos, su cara perfecta y su jodido cuerpo. Si lo vi desnudo y joder que buenas vistas, lo malo que estaba tirándose a la Barbie modelo. Mi hora de salida llega y como siempre me despido con un 'hasta mañana' que nadie contesta. Voy a mi casa y me preparo un poco de pasta. Termino de comer y lavar los platos y veo un poco Netflix ya que tengo series a medias. Cuando la serie acaba me pongo ropa deportiva con una chaqueta blanca de chándal encima.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Cojo mi móvil, mi monedero y mis llaves y salgo rumbo al gimnasio.
-A: Vaya que temprano vienes Tn.
-Tn: Está esto muy vacío no? -no hay apenas gente-.
-A: Por la tarde no suele venir mucha gente. Ven acompáñame -me lleva a la sala de las pesas-.
-Tn: No pienso hacer pesas -me niego-.
-A: Quien es el instructor tú o yo? Por eso a hacer pesas, venga a tumbarse y cuidado con la cabeza.
-Tn: Agg está bien -me quito la chaqueta y me tumbo-. No voy a poder levantarla son 10kg en cada lado, si se me cae y muero aplastada mi fantasma te torturará.
-A: No digas tonterías -coge mis manos y las pone en la barra de metal-. Yo te ayudo señorita quejica.
Empiezo a levantar la dichosa pesa, aunque me ayuda Abraham esto pesa un huevo aunque me sorprende a el parece no pesarle. La levantó unas cuantas veces y voy a la bicicleta. Como el día anterior Abraham sube la dureza de los pedales cada vez que quiere. Me siento en un banco ya que no puedo más y bebo bastante agua.
-A: Estás bien?
-Tn: Solo necesito un puto tanque de oxígeno.
-A: Eres muy exagerada, relájate y respira -intento respirar despacio-. Oye con el chico ese el culpable que estés aquí.
-Tn: Si que pasa?
-A: A pasado algo entre el y tú?
-Tn: No te importa.
-A: Vamos que no, solo haces esto porque quieres que pase algo.
-Tn: No te interesa eso -bebo de la botella-. Me duele la cabeza.
-A: Tengo pastillas en mi despacho ven -lo sigo y me siento en un sofa-. Ten -me da pastillas para la cabeza-.
-Tn: Desde cuando un instructor tiene despacho propio en un gimnasio? -me tomo las pastillas-.
-A: Desde que soy el dueño del gym. Oye mañana ya es fin de semana por lo cual no abrimos.
-Tn: Bien puedo estar en mi casa inflandome a ganchitos.
-A: De eso nada, saldremos a correr -abro la boca-. Paso por tu casa a las 8 tengo tu dirección en la ficha.
-Tn: Eres una clase de asesino que le gusta torturar a las víctimas verdad? -se rie-.
-A: Si claro, luego de matar me los como asados a la plancha -rueda los ojos-.
