Me despierto por el jodido sonido del timbre, miro la hora aún en mi cama. Las 8:00 de la mañana ¿quien llama tan temprano un sábado? Con pereza me levanto de la cama y me pongo una bata, bajo a abrir la puerta ya que siguen llamando.
-A: Ya veo que no estás preparada -dice cuando abro la puerta-.
-Tn: Abraham? Qué haces aquí? -pasa y cierro la puerta-.
-A: Quedamos en ir a correr ya veo que el sueño te afecta.
-Tn: Dios es verdad -me llevo la mano a la cabeza-. Lo siento anoche me acosté tarde rellenando papeles.
-A: No pasa nada. Deberías abrigarte se te transparenta algo que no deberían estar duros -me tapo más con la bata ya que se refiere a mis pezones-. Por cierto bonito y sexy camisón -dice mirándome de arriba a bajo y me pongo roja-.
-Tn: Idiota -le saco la lengua-. Me visto y nos vamos vale?
-A: Vale, te haré algo para desayunar -lo miro raro-. Que? No voy a dejar que corras sin nada en el estómago. Ve a cambiarte -asiento y voy subiendo las escaleras- y ponte algo que tape más que ese camisón si no quieres que haga cosas que no debo -me grita-.
Sé que lo dice en broma pero no puedo evitar sonrojarme. Hago la cama, hago pis y me cambio de ropa. Me pongo esto
junto a unos deportes blancos. Bajo y me como el bol de cereales que me ha preparado Abraham, no sé ni cómo los ha encontrado. Termino y me lavo los dientes, cojo mi teléfono y llaves y vamos caminando hasta un parque.
En el parque empezamos a correr primero flojo y como siempre en medio del camino, me toca hacer unos cuantos ejercicios. En mi teléfono marcan las 12:30, llevamos toda la mañana corriendo así estoy agotada bueno también nos hemos sentado a charlar varias veces.
Nos sentamos en un banco a descansar, bueno más bien descanso yo Abraham está como una puta rosa. Me quedo enortada mirando a Ángel que está al otro lado del parque, junto a la fuente. Tiene su pelo revuelto, la camisa un poco desabrochada se nota que está borracho.-A: Ese es el chico? -se sienta a mi lado y lo miro con cara de WTF?-. Por el que quieres cambiar tu cuerpo -yo asiento-. Y la rubia maciza que acaba de poner a su lado?
-Tn: Su novia la barbie pivón -agacho la cabeza-.
-A: Ei no agaches la cabeza, tú estás mil veces mejor que esa.
-Tn: Lo dices para consolarme.
-A: No lo digo enserio y si ese idiota no sabe verlo es que está ciego. Ya quisiera ese y muchos estar entre tus piernas -me toca el muslo-. Y yo soy uno de los que me encantaría eso y más después de lo sexy que te he visto esta mañana -me susurra al oído y yo bueno aparte de roja mi tanga a volado-.
-Tn: Que quieres Mateo? -le digo con voz seductora y me siento encima suya-.
-A: Arrancarte esas mayas apretadas y follarte como loco detrás de esos arbustos -me dice con voz ronca en mi oído y siento su erección-.
Me levanto de encima suya y me lleva detrás de unos arbustos apartados de la vista de todo el mundo. Me besa con una pasión y un salvajismo que hace que mi humedad crezca. Nos tumbamos en el suelo y me pongo encima suya, le quito la camiseta y madre mía de mi vida menudos abdominales señor. Sube mi top dejando mis pechos libres y no tarda en llevarse uno a la boca. Gimo ante sus besos y mordiscos en cada uno de mis pezones. Le bajó el pantalón junto a sus boxers y la virgen santa ¿eso me cabe? Vuelve a atacar mis labios con su boca y su lengua recorre toda mi boca. Me baja las mayas junto al tanga, se separa un poco saca un condón de su cartera. Cuando se lo coloca me subo encima de su erección haciendo que entre en mi por completo y ambos soltemos un gemido en los labios del otro. Me muevo como una loca encima de él mientras ambos nos callamos los gemidos con besos salvajes. No tardó en correrme pero me da igual, quiero más de su cuerpo, necesito más de él. Exhausta sigo mi moviéndome hasta que estalla en el condón. Me quito de encima suya y me acomodo la ropa, él me imita.
-Tn: Suficiente ejercicio por hoy no crees? -digo soltándome el pelo, mi coleta es un desastre-.
-A: Si creo que sí -me tumba en el césped y me besa con ese salvajismo que dios-.
-Tn: Como no pares de darme esos besos voy a mojarme otra vez -me besa otra vez-. Enserio para no quiero otro asalto, me has dejado echa polvo.
-A: Polvo el que acabamos de echar y los que te echaría cada segundo.
-Tn: Ains para idiota -digo roja y le pegó en el hombro-. Tengo hambre y no me digas que te coma a ti.
-A: Quieres que vayamos a comer por hay? Son casi las 2 de la tarde -nos hemos tirado 1 hora o más follando flipo-.
-Tn: Vale, pero nada de ensaladas quiero una hamburguesa con patatas -digo levantándome y él me imita-.
-A: Soy tu instructor tienes que seguir la dieta -hago un puchero-. Haré la vista gorda hoy y comeremos hamburguesa -sonrio como una niña-.
Nos vamos a un McDonals que hay cerca, diría que comemos entre risas pero no. Yo me devoró la hamburguesa en cuestión de minutos y Abraham me va quitando las patatas. A veces no se ni de que cojones hablamos pero es inevitable no sentirse cómoda a su lado. No soy una chica que se entrega a cualquiera ni mucho menos, tengo que tener una atracción no solo física sino conectar con esa persona. Con Abraham conecto pero no es que me vaya a enamorar como una loca. Un polvo de vez en cuando no viene mal ¿verdad?
Aparte después de hacerlo en el parque no nos sentimos incómodos ni avergonzados, es más seguimos como antes de habernos acostado y eso me gusta.
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EL INSTRUCTOR GYM (finalizada)
Short StoryQuien no se ha apuntado al gimnasio y nunca a ido? Eso le pasaba a Tn Dornan, hasta que un día decidió ir y poder ganar un cuerpazo para tener la atención del chico que le gusta. Abraham Mateo uno de los instructores del gym, el más duro consigo mi...