COMPROMETIDOS

CAPÍTULO 15

Seis meses después.

—Voy a salir,cualquier cosa me llamas ¿okay?—el azabache le sonrió.

—Ya vete—lo empujó hasta la puerta,el chico de bonitos rulos reía.

—Solo no le abras la puerta a nadie—el menor rodo los ojos.

—Sí mamá—el chico besó su mejilla y salió por la puerta en cuanto un auto gris se estacionó frente a ellos.

Harry era un chico muy dulce,en cuanto llegó le dió luz a la vida del menor,sus chistes y su loca manera de ser era simplemente perfecta,al contrario de los chistes de Erick,con los de él si podías reír. El novio de su compañero era un castaño realmente pequeño con unos ojos azules que te hacían perder del mundo.

Ellos dos iluminaban su aburrida vida,no se arrepentía de haber puesto el cartel de "busco compañero de cuarto" Pues gracias a su soledad el chico de rulos había tocado su puerta,antes de Harry llegaron un par de personas más pero no convencian al pequeño.

Erick seguía con su vida como si el castaño nunca hubiera dejando huella en ella,había desaparecido en cuanto pisó Londres. La ciudad era realmente una joya,todos eran muy amables y alegres sentía que en cualquier momento al caminar por las calles las personas se pondrían a bailar como en las películas.

El teléfono de la sala comenzó a  sonar y Erick corrió hasta este,atendió con alegría.

—¡Mamá!—se sentó en el sofá a un lado de la mesa del teléfono fijo y con una sonrisa inició la conversación con Daysi.

—¿Como estas hijo?—preguntó la mujer escuchando atenta la suave risita de su pequeño.

—Muy bien má,en este lugar hay personas realmente agradables—la mujer dejó ir una suave carcajada.

—Erick,eso me lo dices cada vez que llamo—el menor arregló su cabello y sonrió.

—Es que desde que llegué este lugar no deja de sorprenderme—su madre se llenaba de paz al escuchar a su hijo tan tranquilo y felíz.

—Cariño—Erick escuchó la voz de su padre al Fondo.—¿Estas hablando con Erick? ¿Vendra para Navidad?—se sentó al lado de su esposa esperando una respuesta.

—Te esperamos la semana que  viene cariño—Erick suspiro.

-Ahí estaré—susurro,Debía de admitir que se encontraba algo asustado con la idea de volver.

Se despidió de sus padres y caminó a su habitación,se acostó sobre la cama fijando su vista en el blanco techo,La misma pregunta pasaba por su cabeza una y otra vez.

—¿Volvere a verlo?—dejó ir un suspiro.

Era la primera vez desde que llegó que dejaba salir un suspiro como ese por el castaño, ¿Aún dolía?... Si y mucho.

Su mente comenzó a imaginar cómo sería el estar casados y su corazón latía con fuerza en su pecho. El imaginarse despertando junto a Christopher todas las mañanas,en desayunar juntos tomándose de las manos, imaginaba sus discusiones tontas que los hacían terminar en una  reconciliación en la cama.