Para mi suerte, Frank permaneció a mi lado durante los siguientes meses.
El año 1998 nos encontró algo descolocados; había tenido que vender el escarabajo para pagar las deudas.
Tuve que salir a buscar un trabajo a tiempo completo, y por consiguiente, dejé de estudiar de manera definitiva.
Frank, por su parte, comenzó a vender los discos que menos le gustaban -aunque claramente le dolía hacerlo-, y dejó de invertir en sus productos naturistas.
Comenzamos a hacer economía en todos los sentido; ya no salíamos a comer, ni al cine. Fueron meses sin duda duros, pero así, logramos salir a flote nuevamente.
Para mediados de ese mismo año, ya nos encontrábamos económicamente bien. Comenzamos a salir a eventos y al cine como antes, y de vez en cuándo nos permitíamos comer fuera.
Y el hecho de que Frank hubiera permanecido junto a mí a pesar de todo, había causado que me enamorara aún más de él, si eso era posible.
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Tormenta. // Frerard.
NouvellesPorque él era lluvia... Pero eso lo entendería más tarde. // Historia corta. 10 capítulos.