AMOR UNIVERSITARIO.

Lara- parte 2

Literal llevaba dos meses sin superar lo de Dana y encima la loca de Bela estaba siempre acosándome, primero con la aparición de ella en mi casa la cual he cambiado la cerradura, después una alta cantidad de mensajes cada día y tras contarme Taylor el acontecimiento con las drogas y María PFF...¡esto es insoportable!

Por suerte Taylor es un gran soporte en mi vida y una hermosa persona. Mi teléfono empezó a vibrar y temerosa por que fuera Bela, cogí el móvil con cierto temor.

GRUPO DE WHATSAPP:(Japutas al horno).

Abby: Tías hoy toca fiestukiii.

Jason: Ya te digo, necesito menear mis caderas YASS.

Taylor: Siiiiiii

Abby: PERFECT, quedamos en el gato negro a las 20:00? ( Lara ni se te ocurra escaquearte hoy S-A-L-E-S )

Taylor: ESOOO, por mi sí perrys.

Jason: Cool, nos vemos entonces, no faltes Lara!!

Leí resignada todos los mensajes, no sabía que responder en mi mente se libraba una batalla que ni la de SANQUINTÍN, al final opté por acceder a pasar un buen rato con ellas, es más me vendría hasta bien. Finalmente decidí ponerme un top negro con una falda vaquera y unas botas negras. Llegué como siempre puntual a la discoteca junto a Taylor, pero como siempre tendríamos que esperar a Abby y a Jason, estos siempre llegaban tarde.

Los vimos aparecer por la calle y entramos juntxs a la dicoteca, nos pedimos unas cervezas y empezamos a bailar alocadamente en la pista, al cabo de unas horas perdimos de vista a Abby, esta seguramente estaba liándose con alguien en algún remoto lugar de la discoteca. Después empezé a perrear junto a Jason mientras que Taylor nos miraba con una cara de absoluta vergüenza.

- Tío me duelen los pies y voy mazo pedo, creo que es hora de irme a casa. - Dije alzando la voz de manera exagerada por culpa de la música.

- Vale, yo voy a buscar a Abby y nos vamos. -Respondió Jason en mi oído mientras que lo veía desaparecer entre la multitud. Al cabo de unos diez minutos apareció con Abby cogida del brazo y con su pintalabios corrido.

- ¡PERO BUENO DONDE ESTABAS! - Exclamé, ella me ignoró al principio e intentaba excusarse pero no podía, de repente divisé una cabellera rubia que conocía bastante bien, era Dana y para mi sorpresa estaba liándose encima de ¡María! Pero será cabrona, además de ser una drogadicta se lía con mi ex, en ese mismo momento fui decidida hacia la barra del bar perdiendo a mis amigos de vista durante toda la noche y bebiendo chupito tras chupito para olvidar esa imagen que perturbaba mi cabeza.

Al cabo de las horas alguien que no lograba ver correctamente por culpa del ciego que llevaba, me cogió y a partir de ahí me desmayé, no sé que ocurrió a partir de ese momento.

Me levanté con un fuerte dolor de cabeza, miré a mi alrededor y nada me parecía familiar, todas las paredes estaban repletas de posters de un grupo que a mí me encanta de kpop llamado BTS, pero yo nunca he llenado tanto mi habitación de tantos posters fans. Con calma me incorporé de la cama, aparté la sábana de mi cuerpo y me percaté que estaba totalmente desnuda, con lo cual me dio por mirar hacia mi lado y vi a Bela dormida a mi lado, ¡JODERR! Pensé para mis adentros, ¿ cómo he podido acabar con esta puta loca en la cama? No me acordaba de nada y encima tenía un horrible dolor de cabeza, pero lo principal era salir de allí sin que Bela se diese cuenta de mi huida. Deslicé con mucha cautela la sábana de todo mi cuerpo, salí rápidamente de la cama y me puse el sujetador, el cual encontré encima de el flexo de su escritorio, lo tenía todo en mis manos pero me faltaban las puñeteras bragas, decidí restarle importancia y me puse los vaqueros solos, salí lo más rápido posible de este odioso piso y me encaminé hacia mi piso que compartía junto a Taylor, por el camino eché un vistazo a mi móvil y vi más de treinta llamadas perdidas de Taylor y Jason, así que decidí llamar a la primera.

La tranquilicé y le dije que me encontraba perfectamente, que dentro de nada llegaba a casa pero que antes para compensarla por el susto le traería un café de su cafetería favorita llamada Medina's, guardé mi móvil en la parte trasera de mi pantalón que cada vez era más incómodo ya que os recuerdo no llevaba bragas. Un amable señor me entregó los cafés y puse rumbo a mi piso, nunca antes había tenido tantas ganas de llegar a casa, entonces mi móvil empezó a vibrar y vi que tenía dos mensajes nuevos, en ese momento me quería morir, eran de Bela, eran una foto de mis bragas y una pequeña frase que decía; " Creo que te has dejado algo princesa".

Un frío extremo atravesó mi columna vertebral y un leve sudor apareció en mi frente, no sabía que responderle así que decidí ignorarla y llevar estos preciados cafés a su destino, para evitar la tentación de ver el móvil opté por apagarlo, finalmente llegué a mi piso y recibí a Taylor con un abrazo y millones de malas palabras por su parte por no haber aparecido en toda la noche, al cabo del rato apareció Perry el gato de Taylor ,que, al fin y al cabo es como si también fuese mío, el cual llegó ronroneando a mis piernas.

- Eyy Perry ¿cómo estas pequeñín? - Dije acariciando suavemente su cabeza.

- ¿Me vas a decir donde coño has estado o esperabas callarme con estos cafés? - Dijo Taylor con una mirada seria y penetrante hacia mi persona.

- Vale... pero quiero que sepas que no te contaré mucho ya que no me acuerdo ni de la mitad. - Expuse de manera sumisa para alargar ese mal trago.

- ¡Qué si! No me cuentes tonterías y desembucha... - Dijo Taylor con los brazos cruzados y moviendo enérgicamente su pie derecho.

- Pues verás... resulta que ayer vi a Dana liándose junto a la puta drogadicta de María... y... - Intentaba que mis palabras saliesen, pero me resultaba muy complicado.

- Tranquila Lara, no me lo cuentes todo aún si no te ves preparada. - Dijo Taylor arropándome con sus brazos en un cálido abrazo.

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