El principe NO ideal. [1# Arco Del Libro]

[PNI] Capítulo 24: Puedo ser...

Puedo ser...

¿Cómo había pasado de estar a punto de irse a su habitación a ser invitada a una cita entre mujeres? Había pretendido meditar hasta el cansancio la nueva información que su cabeza estaba reteniendo, pero de pronto la acorralaron dos chicas aparentemente de clase alta para invitarla a una fiesta en conmemoración a un cumpleaños de ya no sabía quien. ¿Qué hacía allí? Simplemente no se había podido negar, y pronto se dió cuenta que todo pintaba muy sospechoso.

Escuchaba a su alredor risas altas embriagadas, las señoritas parecían estar en momentos en los que sus tacones eran sus enemigos. ¿Por qué todas aquéllas chicas lucían tan... raras? Escuchaba murmullos preguntando a las dos chicas que la habían invitado el porqué de su sorpresiva presencia. Se nota que la celebración era muy privada.

-Tranquilas, ésta nos servirá muy bien para averiguar algo.

Eran pocas chicas, parecían cercanas, cómo amigas casi. Ella sonrió, no comprendía bien lo que sucedía, es más, su cuerpo tampoco parecía entender lo que ella quería hacer. El sabor dulce del jugo todavia impregnaba su lengua.

-Cariño~

Su aliento apestaba a alcohol. ¿Pero por qué sentía que actuaba peor incluso qué esas chicas cuándo no había probado ni una gota de alcohol?

-¿Te has acostado con Luka?

Notaba que una de esas chicas estaba lúcida juzgando con pesadez las palabras de su amiga.

-¿Acostar?

Preguntó.

》Acostar... Acostar... Acostar...《

Recordó al chico acompañadola toda una noche cuándo sus cuerdas vocales se quebraron.

-¿Sylver?

Otra preguntó con una risa en sus labios. No llevaba aquélla piedreria que generalmente se le veía, éstas estaban dispersadas por el suelo tratadas igual a basura inservible. Suspiró débilmente.

-Nos van a matar, nuestra familia se enterará, nos arruinarán y seremos desterradas.

Murmuraba la misma chica bebiendo de su copa de vino. Eran cinco chicas, dos eran las que le estaba interrogando insistentemente, qué a su vez también la habían invitado, luego estaba la chica que se mantenía en pie lamentándose y otras dos reían mirandolas.

-¿Sylver?

Insistió de nuevo la chica tomando sus hombros. Ella solamente sonrió. Claro, había dormido con él cuándo Nalem la encerró para luego Sylver ir a buscarla. Aunque se olvidó de eso con rapidez.

-Me gusta tu pelo, eres hermosa.

Rió como una niña antes de tocar su cabello y ponerlo atrás de su oreja. La dama tenia un rubor en sus mejillas, los ojos le brillaban.

-También me gusta lo arreglada que están todas, son realmente elegantes.

Sonreía, parecía una infante apreciando a sus muñequitas de juguete. La chica bufón antes de tomar una copa de vino.

--Quería regalarte sus secretos para conquistar a tu príncipe ¡Pero de nada sirvió meter en su jugo lo que nos entregó Bass!

Se quejó la chica prácticamente llorando mientras tomaba sin parar la bebida. Se veía realmente ebria, pero seguía completa dentro de todo, a comparación de...

-Oh, los tienes a todos, a veces quisiera matarte.

La chica reía a su lado despeinando su cabello y acostandose en sus piernas. Caroline formó un puchero.