Prólogo

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El funeral había sido demasiado duro para Harry. A pesar de que se dio todos los ánimos posibles para ponerse de pie y decir las palabras que tenía escritas en aquel papel arrugado y a poco de deshacerse por las lágrimas que tantas veces había derramado en el leyéndolo, se quebró por completo en el momento que soltó el aire que había estado conteniendo segundos antes de ponerse de pie.

A pesar del silencio sepulcral que se había instalado él sentía sus oídos zumbar, como si una bomba acabara de explotar muy cerca dejándolo aturdido, pellizcaba levemente el puente de su nariz con los ojos cerrados mientras dejaba salir fuertes sollozos desde el fondo de su alma, su madre, ante tal escena, no pudo contenerse más y se puso de pie al reaccionar segundos después para tomar del brazo a su hijo y abrazarlo con fuerza uniéndose a sus sollozos mientras Harry se aferraba fuertemente a los hombros de Anne.

—Harry... cariño... no debes hacerlo si no puedes —  susurraba la mujer en su oído con una mezcla de compasión y preocupación en su tono mientras acariciaba la parte baja de la nuca de su hijo, ahora más a la vista por su pelo corto.

—... po-podre, debo hacerlo mamá — sorbió su nariz abriendo los ojos encontrándose con una mirada rota pero comprensible frente a él detrás de su madre.

— ¿Estás seguro? - preguntó su madre separándose un poco para poder mirarlo a los ojos.

—Si... — asintió Harry más calmado volviendo a sorber la nariz y esbozando una leve sonrisa triste — puedo. Gracias mamá — le dio un beso en la mejilla y se separó por completo para encaminarse al pequeño atril de madera que se encontraba frente a la tumba ya cubierta de tierra. Recibió un ligero apretón en el brazo por parte del que había oficiado el funeral en signo de apoyo cuando le cedía el lugar. 

Sus manos temblaban, sentía que sus piernas iban a fallarle en cualquier momento y no quería elevar la vista porque sabía que se encontraría con el montón de tierra que le recordaba como un golpe con un martillo en el cráneo que no volvería a tocarlo ni verlo mas. Otra vez contenía la respiración mientras alisaba el papel, sus ojos se cristalizaron al leer las primeras letras en su mente, los presentes lo observaban con pena, se oían sollozos suaves y algunos se limitaban a mirar sus propios zapatos porque la imagen de Harry parado frente a cada uno de ellos a punto de romperse, mas pálido de lo normal y con el ceño levemente fruncido, era muy dura para cualquiera que lo había visto antes irradiando felicidad absoluta. Soltó un suspiro largo y pesado mientras limpiaba las lágrimas que se desesperaban por salir con el dorso de la mano, se aclaró la garganta y se irguió para empezar a dar sus palabras.

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Gran parte de los asistentes ya estaba embarcándose en los autos para dirigirse a la casa de la madre de Harry, otros todavía caminaban por el jardín del cementerio, los encargados del lugar empezaron a levantar las sillas y las únicas dos personas que seguían frente a la tumba eran Anne y Harry, la mujer observaba a su hijo apoyando su mano ligeramente en el hombro derecho de éste mientras él estaba sentado en el césped con las piernas cruzadas derramando lagrimas sin emitir sonido alguno. 

— Ya es hora... — susurró su madre dándole una pequeña caricia en la nuca y empezó a alejarse hacia donde los demás iban. Harry la miro de reojo, se puso de pie y acercándose un poco más, se inclinó y estiró la mano para remover un poco la tierra haciendo un hueco no tan profundo y metió en éste la bola de papel donde había escrito las mas agridulces palabras que hicieron llorar a casi todos al pronunciarlas.

—Te quiero... como a nada ni nadie — su voz se quebró al final seguida de un sollozo — voy a extrañarte mucho — movió nuevamente la tierra hasta tapar el pequeño hoyo y limpiando las lágrimas de sus mejillas con la manga del saco por enésima vez, camino a paso rápido hasta alcanzar a su madre. Ella lo sostuvo del brazo y besó su hombro mientras seguían el camino hacia la salida del lugar.

S L E E P   O N   T H E   F L O O R   //  Z A R R YDonde viven las historias. Descúbrelo ahora