UN NUEVO COMIENZO

Capitulo 37

Capítulo 37

Moscú, Rusia

Los 3 amigos estaban desayunando hablando de sus días universitarios, Lena estaba ausente.

G: Lena sé que Raissa es tu prioridad pero no se vayan, ayer yo platiqué con ella y me dijo que las veía a ustedes muy ilusionadas con la boda de Nastya.
K: creo que Raissa se sentirían peor si faltas a la boda por ella
G: sé que Nastya no se enojara si dejas de ir pero estará muy triste.
K: Mira mañana en la tarde es la boda quizá es lo que Raissa necesita, divertirse para olvidarse de sus propios pensamientos.
L: Pues también lo he pensado, los Krause no estaban así que les deje un mensaje si vienen seguro se la llevaran.
G: no la conozco mucho pero ayer que estuvo platicando conmigo pude darme cuenta que es una mujer que tiene una carga emocional enorme pero cuando está contigo es feliz.
L: yo se que Raissa necesita mucho amor, me consta que sus padres la adoran, yo la amo...
K: pero los problemas que tiene no son exteriores y es algo que nadie más que ella puede resolver.

Después de un rato lena subió a la habitación, veía a Julia dormir, su celular comenzó a sonar.

U: Elena cómo está mi hija?
L: Dr Krause, Raissa está durmiendo, tuvimos que sedarla.
U: vamos para allá en el vuelo de las
10 llegamos en la mañana.
L: Dr como usted sabe Raissa hace terapia con la dra Isaeva, ella estuvo aquí y la logró controlar dice que Raissa está reviviendo algo difícil de su pasado y que debemos dejar que procese su dolor que no debemos intervenir que ella nos dirá cuando esté lista.
U: o sea??
L: no debemos forzarla a que nos cuente que ella lo hará a mi me contó algo que les contará a ustedes cuando regresemos.
U: entonces estás diciendo que no vayamos?
L: Si... mire, yo planeaba enseñarle la cuidad y esas cosas pero solo me quedaré hasta la boda y regresamos entonces no tiene caso que vengan o por lo menos esperen a que Raissa les llame.
U: entiendo lo que me estás diciendo pero mi esposa está muy angustiada y no podemos dejar a nuestra hija en estos momentos, vamos a ir le guste o no.

Pasaron 4 horas y Julia comenzó a despertar vio a Lena empacando.

L: Hola mi amor, como te sientes -acercándose-
J: me duele un poco la cabeza.
L: si tu presión está un poco elevada, ten- dandole una pastilla- esto te ayudará.

Julia se la tomo y volvió a dejarse caer.

L: Raissa has comido algo hoy?
J: no y muero de hambre.
L: voy a pedir servicio al cuarto-tomando del teléfono pero Julia la detuvo.
J: acércate.

En cuanto la tuvo enfrente comenzó a besarla, era un beso lento estuvieron así por unos instantes.

J: Perdóname por salirme así, es que escuche las campanadas y tuve la necesidad de ir a la iglesia. 
L: perdóname tú a mí por gritarte.
J: Lena hay cosas que quiero contarte pero hoy no, ya no quiero pensar en eso.
L: amor le llame a tus padres vienen para acá mañana.
J: No! De seguro están muy preocupados! Es su aniversario de bodas y papá se llevaría a mamá a los Alpes! -molesta-
L: perdóname amor, te vi mal y pensé que los necesitarías.

El estomago de Julia gruñía.

L: hasta tu estómago se enojo-ambas comenzaron a reír-
J: Quiero salir, necesito aire fresco.
L: bien, vamos.
J: pero debo llamar a mis papás.

Habían pasado 10 minutos lena solo estaba en el balcón de repente volteaba a ver a Julia que solo asentía 

J:... Por favor papá, yo sé que pusiste mucho esfuerzo en planear este fin de semana..... yo sé, créeme que lo sé, te prometo que el lunes estoy de vuelta, mañana es sábado, estare ocupada con la boda.... el domingo por la noche regreso y el lunes temprano hablaremos de todo, quiero despejar mi mente, es solo que me sentí como aquella vez que descubrí el nombre de mi mamá.
Adiós, los amo a los dos.