Presente
Afuera había comenzado a nevar, era la primera nevada del mes, afuera la temperatura era baja, pero adentro de aquella casa estaba calentita, Mia solía limpiar todos los fines de semana, le gustaba hacerlo porque era el único modo de mantener su mente despejada, el único modo de calmar el dolor unos minutos.
Aquella casa de dos pisos, tres habitaciones, dos baños, un jardín trasero y un garaje incluido había pensado venderla hace dos años, ¿Por qué no lo hizo? Simple, aquella casa contenía muchos recuerdos y los recuerdos seguían siendo parte de ella.
Mejor dicho, era Mia que no quería soltarlos.
Cuando acabó de pasar el trapeador por el suelo de cerámica y dejarlo reluciente, suspiró mirando aquella sala espaciosa, las paredes en su mayoría eran blancas con detalles de algún otro color, por lo menos los de la sala eran de colores naranjas, el sofá era blanco como los sillones, pero los cojines eran verdes y naranja, en aquella mesa de café solían estar algunas fotos que...habían sido guardadas por la misma Mia.
Escuchó su celular sonar y rodeó los ojos, sabía que era NamJoon, su hermano siempre la llamaba, sus amigos también, pero Mia se había aislado por completo de todos desde el momento que su esposo había fallecido.
Nunca olvidaría esa noche.
No olvidaría nada.
Pero cada noche soñaba con JungKook, él estaba allí a su lado diciéndole que estaba bien, que ella estaría bien y que todo estaría bien, Mia siempre le pedía que le llevara consigo, pero él nunca respondía.
— Y sigo extrañándote—susurró respirando profundo tomando una bocanada de aire, cuando pretendía dirigirse a la mesa para tomar su celular, la llamada finalizó y el timbre de la casa se hizo escuchar.
Confusa y extrañada miró a la puerta, ella no estaba esperando a nadie, de por sí, nunca recibía visitas porque se rehusaba a abrirles, no quería la lástima de nadie ni necesitaba tenerla tampoco, miró por el ojo de su puerta encontrando un hombre de gorra con una caja de madera un poco más alta que él mismo.
De seguro se había equivocado con la entrega.
— Buenos días, señorita, yo...—el hombre habló en cuanto Mia abrió la puerta, pero ésta la interrumpió.
— Se ha equivocado, largo de mi casa.
— ¿Oh? —frunció el ceño revisando los papeles de entrega que tenía— ¿Usted es la señorita Jeon Mia?
"¿Qué demonios?"
— Debe haber un error, no he ordenado nada...
— Señorita, esto es un regalo de un ser cercano a usted—sonrió un poco—Necesito que firme aquí—le entregó los papeles. Mia aún confusa le miró meter aquella gran caja a la casa en un carrito especial para ello, la chica intentó leer lo más posible aquellos papeles, no decía quien lo enviaba sólo decía para quien iba.
— ¿Quién le dijo que trajera esto?
— Ya se lo dije, es una persona cercana a usted.
Mia tomó el lapicero del hombre firmando al fin, no lograría sacarle mucha información a ese idiota, cuando quedó a solas con la caja misteriosa se cruzó de brazos ladeando su cabeza.
— Una persona cercana—repitió y rodeó los ojos ante lo primero que vino en su mente—NamJoon, este chico realmente no se da por vencido—negó con la cabeza. Miró las cerraduras que tenía la caja al borde derecho, tenía uno arriba y uno abajo, sin problema, Mia retiró el seguro disponiéndose a abrirla—Voy a enviarle un mensaje y...
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Happier 🌹 [JJK] COMPLETA
Fanfiction» Mi deber es hacerla feliz, señora Jeon. » Es impresionante. » ¿Qué cosa? » Esto, que un robot sea exactamente igual a mi esposo. • 1ER LUGAR EN EL CONCURSO GORIAN AWARDS ♥ ORDEN DE HISTORIAS: [1. Happier] [2. Make It Right] ...