Happier 🌹 [JJK] COMPLETA

Capítulo 5 🌹

 — ¿Creíste que yo...? —preguntó cuando leyó la nota y negó con la cabeza—Mia, nunca haría algo así, no sólo tú sigues recordándolo aún, yo también lo hago, era mi hermano después de todo, ¿Cómo...? —Jin todavía seguía impresionado del parecido de ese robot.

— Por favor, Jin, comencé creyendo que había sido NamJoon, pero no lo fue, tú eres el único que podría hacer esto—señaló—Si dices que fuiste tú no voy a enojarme...

— ¿Quieres que admita algo de lo que no soy culpable?

— Queremos saber quién le envió este robot...—NamJoon se corrigió casi al instante—este chico a Mia, ¿Conoces a alguien más que pueda estar metido en esto?

SeokJin dejó la nota en la pequeña mesa de café intentando analizar y recordar, era imposible que sus amigos estuvieran involucrados, lo que decía NamJoon era cierto, un robot así costaba millones de dólares, ¿Por qué alguien se molestaría en pagar algo así y hacerle una broma pesada a Mia?

Y, además, ¿Quién se atrevería a usar la imagen de su hermano fallecido?

— No, nadie más—respondió— ¿Dices que su objetivo es hacerte feliz?

— Es lo que suele decir, no puede decirme quien lo creó, el hombre que me lo entregó dijo que era de un ser muy cercano a mí—recordó pensativa pero no llegaba a ningún lado—Jin, necesito que me ayudes con esto.

— De acuerdo, intentaré colocarme en ello—asintió—Esta misma noche investigaré sobre ello—se levantó del sofá— ¿Antes de que te vayas puedo hablar contigo?

— Claro—Mia suponía de lo que iba a hablarle. Miró a NamJoon y JK—Ustedes... ¿Podrían esperarme afuera?

Y por primera vez aquel robot no le puso excusas, colocó de nuevo el cubrebocas en su rostro saliendo seguido de NamJoon. En la oficina ambos chicos quedaron solos, Mia respiró profundo mirando a su ex cuñado.

— Supongo que enloqueciste cuando lo viste llegar a casa.

— No sabes cuánto—asintió con una débil sonrisa— ¿De qué querías hablar?

— Primero que nada, me alegra que hayas salido de casa al fin.

— No estoy muy alegre de ello, pero...necesitaba venir aquí—explicó. Jin miró detalladamente a la chica, la última vez que la vio su cabello era corto por sus hombros, ahora iba largo cayendo hasta la mitad de su espalda, era de un color café oscuro, sus ojos lucían cansados además de tristes, debajo de ellos se apreciaban unas pequeñas ojeras, se notaba también que Mia había aumentado un poco de peso, pero seguía siendo ella— ¿Qué sucede?

— Quiero aprovechar que estás aquí para entregarte algo.

Mia le miró acercarse a la parte trasera de su escritorio, entre aquella biblioteca sacó una caja mediana y algo pesada, la dejó frente a la chica metiendo sus manos en los bolsillos de su pantalón, Mia evaluó la caja temiendo abrirla, sabía que había allí.

— Son sus cosas, ¿Cierto?

— Sí—asintió con un suspiro—Cuando tomé la oficina...creí que vendrías a buscar lo que le pertenecía—comentó mirándola. Aquella caja era blanca y azul—No tuve el valor de echarlo a la basura, probablemente haya algunos papeles que le correspondían, puedes botarlos si quieres, puedes botar esa caja, al fin y al cabo, fuiste su esposa, puedes tomar esa decisión.

— Entonces... ¿Guardaste esto pensando en cuando viniera? —o miró.

— Sabía que en cualquier momento podrías venir—fue lo que dijo—Vuelvo y repito, tienes todo el derecho de arrojar la caja a la basura al salir de aquí.