"Si no nadas, te ahogas. Pero no te muevas, cariño"
−Así que... −le doy un sorbo a mi cerveza y se ve bastante ansioso de lo que vaya a decir, ya que juega con la lata de la cerveza. − ¿Te agrada que me quede? −Alzo una ceja engreída y a el se la sale una sonrisa como orgulloso de mi egocentrismo.
−Digamos que no me quiero quedar solo. −se muerde el labio justo en donde esta ese aro tan provocador que tiene y bebe de su cerveza, mientras me mira detenidamente. −Oye pensaba que por lo menos algunos de mis amigos se quedarían.
−Si claro. −me burlo de su inútil excusa, pero el me sonríe con esa seguridad que él tiene y sus ojos azules parecen brillar.
−Además de que tengo una muy buena vista, todas las mañanas preparándome desayuno. −trato de controlar mi expresión para no sonrojarme o molestarme, pero aun así me sonríe divertido y me guiña un ojo. −Dime algo ¿usaras short cada vez que me cocines?
−Idiota. −se me sale con bastante molestia y él suelta una carcajada bastante divertido. − ¿Y porque no has ido a tu casa? Con tu familia. −trato de cambiar el tema, ya que podía hacer la noche conmigo, haciéndome molestar, iniciando con sus bromas y chistes de mal gusto.
−Mis padres están de viaje y tengo una exnovia loca, que se las ingenia para encontrarse conmigo cada vez que vuelvo a casa, no me hace grato ningún viaje. −se encoje de hombros. −Cuando me aseguro de que no estará, voy a casa y la paso excelente.
−No vuelves a casa, porque escapas de tu exnovia. −lo miro sorprendida y él se carcajea, mientras asiente.
−Mis padres no estarán tampoco, quieren otra luna de miel, por lo que no me apetecía acompañarlos a ese viaje a arruinarselos, además no quiero traumarme, así estoy muy bien. −sonrió divertida ya que es muy tierno cuando hace expresiones de asco, es increíble como a veces se ve tan sexy y otras tan tierno, es extraño la combinación. −Lo único que haría en casa seria estar cerca de esa loca, no tiene sentido. −toma un trozo de pizza y sigue analizándome con la mirada, de arriba abajo como un escáner, me pone nerviosa, esos ojos azules y esa mordida de vez en cuando en su.
−Tienes razón. −le digo y miro un poco incomoda hacia otro lado.
− ¿Por que tu no has decidido ir a tu casa? −me repite la pregunta que yo le hice a el y al parecer se dio cuenta que me incomodé, ya que su mirada se queda en mi cara.
−Porque se supone que la pasaría con las chicas, pero en vista de las cosas que me han pasado, obviamente no la pasare con ella, sino contigo viéndome en short. −el suelta una carcajada, muy divertido y yo le doy un buen trago de mi cerveza tratando de bajar la rabia, al recordar lo que sucedió con mis supuestas amigas.
−Entiendo. −suspira sintiéndose ahora él incomodo por la situación, lo sé porque despega su mirada de la mía. −Pediré más pizza y cerveza, ¿Te unes? −le sonrió agradecida por cambiar el tema y asiento. − ¿Que tal si buscas justo debajo de la tv, en el primer cajón hay algunas películas que compre y no he visto?
− ¿Veremos una película? −el asiente.
− ¿Tienes algo mejor que hacer? −me pregunta con su móvil en su oreja.
−No, suena perfecto. −él me sonríe y se aleja para poder hacer el pedido.
Hago lo que me pide y encuentro una que me ha llamado la atención, se la muestro mientras corta la llamada.
− ¿Ya la has visto? -le pregunto y el niega con la cabeza.
−La compre hace poco, ¿Quieres verla? −asiento y me mira con una sonrisa. −No es el tipo de película que pensé que te gustaran.
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She Looks So Perfect
Ficção AdolescenteElla es una maldita testaruda, tiene un temperamento de mierda, no sabe tomarse las bromas solo como bromas y es la mejor en la única clase que compartimos jamás, jamás puedo alcanzarla en cuanto se requiere a rendimiento académico. Él es maldito en...