"Cherik"

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"Soy la persona más fría y al mismo tiempo más sensible del mundo, no se como explicarlo."

4 meses, eso era lo que Charles había estado viviendo con Erik, los mejores 4 meses; el rubio era un sueño de pareja, lo ayudaba en todo, lo escuchaba, consolaba y aconsejaba, era claro que Charles había encontrado al amor de su vida.

Charles siempre se caracterizaba como una persona enamorada del romance, aunque Erik era un poco más serio que cualquier amigo, sabía que era el único que lo entendía, podía entenderlo con una mirada, sabía que había sido un buen o mal día con solo un vistazo.

Charles podía distinguir si Erik había tenido un mal día, no con su rostro, ya que feliz o molesto las facciones de su cara no cambiaban, lo sabía  por su forma de respirar, cuando estaba molesto o feliz su respiración era diferente, Erik se sentaba a leer el periódico o ver las noticias, Charles podía escuchar la respiración agitada de Erik, cargada de furia, ya que  siempre cargaba la misma cara de culo, según Charles. "Pero te mueres por esa cara de culo" por que Erik  lo traía colgando de un ala.

Charles se esforzaba para que su relación fuera en perfectas condiciones, le preparaba la comida de Alemania, incluso investigó sobre la religión de Erik, y aunque Erik decía que tal y como era Charles, era feliz, Charles se esforzaba el doble.

Habían decidido que en unos meses más, ellos empezarían a vivir juntos, pero Erik se la pasaba más tiempo en el departamento de Charles.  Para Charles era un alivio verlo dormir, comer, pasar tiempo con él, empezar el día temprano y Erik lo llevaba a su trabajo, cuando era la hora de almuerzo de Erik o no tenía trabajo a esa hora, Charles iba saliendo de la escuela y almorzaban juntos, para Charles era como vivir en un sueño.

—Hoy no creo que podamos almorzar juntos, iré a reparar la tubería de una casa del norte, así que te veo en tu departamento. — Erik lo beso en los labios, para poder despedirse.

—Esta bien amor, preparé tu platillo favorito, Saumagen. — sonrió Charles, Erik acarició su barbilla y Charles deposito varios besos fugaces en los labios de Erik.

—No tienes que hacer todo eso amor. — Erik sonrió, Charles alegraba sus días.

—Lo hago porque quiero que te sientas como en casa, para que no extrañes nada de Alemania y quieras regresar ahí. —  Charles lo abrazo, Erik sonrió, Charles le causaba tanta ternura.

—Si algún día me voy, será porque estás yendo conmigo y por fin conocerás a mi familia. — Charles chilló feliz, Erik amaba hacer feliz a Charles.


~*~

El transcurso del día de Charles fue tranquilo, sus alumnos eran apenas unos niños de cuarto de primaria, casi siempre se portaban bien y le obedecían.

Tomó el metro para poder llegar a casa, ya que casi siempre Erik lo pasaba a buscar para almorzar, lo dejaba en la puerta del edificio y se iba a continuar con su trabajo. Para Charles todo iba a la perfección.

Revisó su teléfono y miro que Erik, no le había enviado ningún mensaje, se le hizo extraño, ya que el rubio siempre le enviaba un texto para decirle que estaba bien o que iba a llegar tarde.

Limpio la cocina, se dio una larga ducha dejando que las burbujas de su tina jugarán con su piel, dejó las velas aromáticas aromatizar todo su baño y miro su teléfono por milésima vez en el día; nada, Erik no había enviado ningún mensaje, así que Charles solo podía ver el chat que compartía con Erik, había enviado un mensaje de WhatsApp, Erik no se había conectado desde la mañana que le envió un mensaje "Te hablo apenas termine" y había sido a las 8:05 am

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⏰ Última actualización: Apr 01, 2019 ⏰

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