Siempre hay una primera vez para todo

11. Buenas señales

Jade's pov

–Gracias por arruinarme la noche – dije resentida mientras salíamos del club

–Oye, no fue intencional – se quejó Marcia

–Si, claro, como no – dije rodando los ojos

–Ay Jade – arrastró ella – Tienes tiempo y yo quiero conservar mi entrada. Es primera fila y hay pases para backstage

–Por eso lo hago, Mars – siseé

–Ay ya pues, no te enojes – siguió caminando detrás de mí

–Nos vemos luego – dije haciendo un ademan para despedirme

–Jade – arrastró de nuevo – Mañana – dijo

–No, la próxima semana – dije parando un taxi

–Pero...

–Adiós Marcia – dije agitando mi mano y entrando al auto sin esperar respuesta

(...)

Me despertaron los toques de mi puerta. Soñolienta me dirigí a ella. Seguro era Marcia

Pasé mi mano a penas por mi cabello y bostecé. Abrí la puerta

–Marcia no...

Me callé al encontrar a Luke ahí parado. Llevaba unos pantalones cortos y una camiseta holgada. Unas zapatillas reebook negras completaban su atuendo de deporte

–Hola – sonrió

Su frente estaba cubierta ligeramente por una capa de sudor. Sus mejillas sonrosadas y sus labios... su labios finos habían pasado del rosa pálido a un rosa más fuerte. Más intenso. Tenía una gorra guinda hacia atrás y en uno de sus brazos descubiertos... mierda, en uno de sus brazos descubiertos, llevaba una banda elástica y su iphone

Tragué intentando controlarme

Sentí su mirada recorrerme y dios sabe que debería ganar el premio nobel de autocontrol

–Pasa – pude decir haciéndome a un lado

Luke asintió y entró. Cerré la puerta y recé mentalmente para no tirarme encima de él

–¿Quieres algo de tomar? – pregunté al notar su respiración agitada

Luke negó y tomó una respiración – Yo solo venía a...

Calló centrando su mirada debajo de mi cuello

Mierda, llevaba solo una fina camiseta y no llevaba brasier

Me crucé de brazos rápidamente y él desvió la mirada

Mierda, me sentía como una mojigata

–¿Si? – pregunté intentando de que prosiguiera

Luke tragó saliva y volvió a tomar una respiración – Quería... quería saber si podrías ir, es que, mi banda y yo tocaremos en un bar que está a unas cuantas cuadras de acá y quería saber si te gustaría ir, no sé – encogió sus hombros tratando de sonar despreocupado pero sabía que por dentro estaba nervioso. Oh joder y se veía tan sexy justo así

Quería besarlo tanto que dolía

–¿Dónde es? ¿Hoy en la noche? – pregunté