VERANO INOLVIDABLE

2.-RECUERDA CUANDO LLAMÉ

2.-RECUERDA CUANDO LLAMÉ

ESTO VA A PARECER UNA LOCURA, PERO… DESDE EL PRIMER MOMENTO EN QUE  PUSE LOS OJOS EN TI NO HE SIDO CAPAZ DE DEJAR DE PENSAR EN TI.

                        --CARRIER OF THE MARK. LEIGH FALLON.

--¡Maggie! ¡Maggie! ¡Maggie! –Me despertó la voz penetrante de Hannah que saltaba en la parte inferior de mi cama.

--¿Qué? –murmure en mi almohada. Ella es mi vecina, así que puede llegar aquí temprano con facilidad, que no siempre es una cosa buena. Como ahora mismo.

--Levántate, vieja perezosa—chilló.

Sabiendo que si me sentaba, su voz bajaría unos decibeles, me empuje lejos de la almohada y me senté, mirando perezosamente como los risos rubios de Hannah rebotaban mientras ella daba vueltas en mi silla de escritorio.

--¿Qué te tiene de tan buen humor? –murmure a través de un espeso bostezo.

--Conoces a Jake Porter, ¿verdad?—preguntó con una gran sonrisa, mientras se movia para sentarse al borde de mi cama.

--Eh, alto, pelo marrón, del equipo de béisbol, ¿ese Jake Porter?—le pregunte mientras me pasaba los dedos por algunos de los grandes nudos de mi pelo.

Ante la mención de su nombre, la sonrisa de Hannah se ensanchó y sus felices ojos azulados brillaron de emoción.

--Estas bien, ¿Qué pasa con él?—pregunté, levantándome de la cama, agarrando el cepillo de mi tocador y pasándolo por mi cabello rizado color marrón dorado claro, antes de encender mi plancha.

--¡Me pidió que fuera a la hoguera con él el mes que viene!—chilló emocionada.

Al instante me di la vuelta con la boca abierta.

--De ninguna manera.—Me quede sin aliento.

--¡Por supuesto! Me encontrare ahí con él—gritó, saltando en mis brazos.

Saltamos arriba y abajo con emoción, con nuestros pelos alborotados por todas partes.

--¡Estoy feliz por ti!

--Gracias. Así que…--Me arrastro por la muñeca para sentarme en la cama mientras ella me enfrentaba—.Suelta todo lo que paso anoche. Marissa me dijo que te fuiste a casa con un chico.

--Bueno, no “fui a casa” con él. Él solo se ofreció a llevarme. Pero luego terminamos yendo a una cafetería y cenamos—dije como si no fuera la gran cosa, tratando de ocultar mi emoción.

--Bueno, ¡cuéntame!—dijo, con su propia emoción danzando en sus ojo mientras me miraba con expectación.

--Su nombre es Evan—dije con una sonrisa estúpida—.Me dio su sudadera. Y bailamos. Y comimos.

Su boca se abrió muy grande.

--¿Él… él te dio su sudadera?—gritó.

Me mordí el labio y asintió.

--Y huele a menta.

--¡Aww, eso es tan lindo!—aspecto—.Y un poco raro y escalofriante, ya que solo se conocieron ayer por la noche, ¡pero es muy lindo!

--Gracias –dije con una sonrisa.

--Maggie—dijo con severidad, mirándome a los ojos—.Soy tu mejor amiga. Vamos. Suéltalo.

Y así lo hice. Deje escapar un profundo suspiro antes de desembocar en un profundo ataque de risa.

--Oh. Mi Señor, Hannah, este chico no se parece a nada que haya visto antes. Su pelo está perfectamente despeinado y se mueve sobre sus ojos cuando ríe, pero es un poco más fibroso cuando esta mojado y se ve más sexy. Sus ojos tan verdes como, como un prado.  Y cuando sonríe, se ilumina la habitación. Como, si sonríe no puedo evitar sonreír. Y cuando ríe, no puedes evitar reír. Y cuando lo hacía reír sentía una sensación cálida y difusa aquí.—Señale directamente en mi corazón a través de mi camisa—.Y es solo una sensación increíble. Su sudadera, oh, su sudadera estaba tan caliente que sentía que podía vivir en ella. Y olía a menta. Él olía a menta. Abrió las puertas para mí y pagó por mi comida. Él se ofreció acompañarme hasta la puerta. Es un caballero. Hannah, nos quedamos en el restaurante durante 7 horas, solo hablando. No llegue a casa hasta las 5.—Y entonces había terminado.