VERANO INOLVIDABLE

3.-RECUERDA EL BAILE

3.-RECUERDA EL BAILE

ALGUNAS VECES ES CORAZÓN VE LO QUE ES INVISIBLE PARA EL OJO.

—H. JACKSON  BROWN, JR.

--Esto es estúpido.

--Lo sé.

--Esto es realmente estúpido.

--Vas a lograr que te maten.

--Tal vez.

--Podría ser un violador.

--Podría serlo.

--¡Esto es increíblemente estúpido!

--Lo. Sé.

Tuve este debate con Aron por casi media hora mientras Hannah me ayudaba a alistarme para el día de hoy. Él me iba a llevar a la ciudad. Por supuesto que Aron, siendo el sobreprotector mejor amigo que es, piensa que es una horrible idea a media hora de distancia de todos los que conozco con un chico que conocí hace unos días. Sé que sonaba estúpido y peligroso e imprudente, pero no me importaba. Quería pasar tiempo con Evan, y no podía pensar en algo mejor que ir con él a Ocala.

--Entonces explícame porqué estás haciendo esto—resoplo Aron.

Le sonreí y puse mi cabello en una trenza de espiga  cayendo por mi espalda.

--¿Cómo puedo explicar algo que ni yo entiendo?—dije en voz baja, pero con una pequeña sonrisa en mi cara.

--Ella está enamorada—arrulló Hannah, golpeando a Aron en el brazo—déjala.

--No será mi culpa cuando no vuelvas—masculló, levantando las manos en rendición.

--¿Qué dirá Brendon acerca de que vayas?—preguntó Hannah al azar.

Me encogí de hombros y deslice mis zapatillas rosadas en mis pies, revisando la hora.

--Cinco minutos más, deben irse.

--Me iré no quiero estar aquí cuando Brendon pierda los estribos por ti accediendo a esto, no por tú me lo dijiste—masculló Aron, dándonos abrazos espontáneos antes de salir por la puerta de mi cuarto. Pronto escuche su coche afuera encenderse y  alejarse a toda velocidad de la casa.

--Voy a espera hasta que te recoja. Debo ver como luce este chico misterioso—me dijo Hannah.

--Lo viste en la feria—razoné.

--Sí, pero eso no cuenta—me dijo, rodando sus ojos. Ese es el razonamiento de Hannah.

Rodé mis ojos y suspiré.

--Bien, pero nada de hablar.

Ella sonrío y asintió.

--Trato—antes de que dejáramos mi cuarto, me di una última mirada en el espejo de cuerpo en la parte de atrás de mi puesta.

Estaba usando una floreada camiseta sin mangas, ajustada, con unos simples short de jeans, y un grueso cinturón marrón. Mi cabello todavía estaba un poco húmedo por la ducha de la mañana y caía en ondas por mi espalda. Mis zapatillas rosadas combinaban con las flores rosadas en la camiseta sin mangas y mi maquillaje era ligero pero notable.

--Está bien, vamos—Respire, conduciendo a Hannah fuera de mi cuarto y bajando por las escaleras. Desee poder despedirme de Cody, pero él tenía terapia hoy, así que no estaría en casa por unas horas.

Brendon y su mejor amigo, Sam, estaban en el sofá, animando a un equipo de futbol que estaba en la TV.

--Nos vamos—le dije a Brendon mientras el nudo en mi estómago crecía. No por miedo de estar en un carro con Evan, quien es prácticamente un extraño, sino por la anticipación de volver a verlo que me estaba volviendo loca de la emoción, una cantidad de emoción y mariposas que nunca había sentido.