윤민; [Follow your heart...] → y.m

제 [O8] 장 | 나사 절삭

Y ahí estaba Jimin, mirando con aquellos ojos tristes, totalmente destrozado de haber dejado su puesto en la empresa para que lo trasladen a otra que era igual de cercana a la anterior. Derramó lágrimas porque el otro paso era dejar de pasar tiempo con Yoongi, reducir sus encuentros al mínimo, eso incluía su trabajo para bien de su salud mental.

Min no ha parado de llamarlo y él no quería escuchar los mensajes de voz que le haya dejado, pero luego de tomar valentía y por voluntad propia, cedió ante sus impulsos y comenzó a escuchar los mensajes de voz. Su labio interior temblaba de solo escuchar la voz de Min Yoongi como si estuviera presente en su departamento.

-¿¡Por qué no me dijiste que te ibas!? -Parecía furioso y era comprensivo, no le había hablado y ni siquiera se dignó a comentarle sobre el tema, era obvio que se enfadaría.

Otro mensaje de voz.

»-¿¡Puedes al menos contestar mis llamadas!? Mierda, Park, contesta, hablo en serio, me estoy enojando y quiero respuestas.

Comenzó a llorar de nuevo en ese día, queriendo que todo vuelva a ser como era antes de que se enamore de Yoongi, volver al pasado donde no sufría y podía mirar a Min sin sentir su corazón latir desbocado. Ya quería parar toda esta mierda. Yoongi era afortunado... Él tiene personas quien lo escuche, en su caso, sus padres estaban en Busán sin querer saber nada de él y oh vaya, ser hijo único no es tan genial.

Entonces una llamada entrante lo descolocó, esta vez Min llamaba a su celular y no al teléfono. Se mordió el labio inferior que ya estaba bastante lastimado víctima de sus dientes. Tenía que enfrentarlo, no podía seguir evitando sus llamadas.

Contestó.

-Al fin contestas... -Jimin sintió un escalofrío ante lo duro y frío que sonó la voz de Yoongi en ese momento, estaba enojado, joder, él estaba malditamente furioso por su culpa.

-Ya contesté, ¿qué querías? -respondió bruscamente para opacar el sentimiento que estaba consumiéndolo de a poco al solo escuchar la voz del mayor.

-¿Por qué te fuiste así sin más? Desde hace semanas me evitas y desde hace meses estás raro ¿Qué demonios sucede contigo? Si hice algo malo dejámelo saber, odio que me estén dando rodeos y tú más que nadie sabes eso, odio esta mierda así que empieza hablar -Fuerte y claro, autoritario y superior, entonces sin querer dejó escapar un sollozo que logró llegar a la otra línea.

»-¿Estás llorando? -Silencio- Lo siento, no quise hacerte llorar, es que... ¿Sabes lo estresante y doloroso es que me evites y ni siquiera me des una razón? Duele... -Se quebró al igual que el corazón de Jimin, más de lo que ya estaba, apenas quedaban unos pequeños trozos que sobrevivieron al derrumbe.

-Sólo... Quiero dormir, quiero descansar y dejar de pensar en todo y en nada a la vez -soltó, ese ardor que abrasaba con su cuerpo al saber el dolor que causaba con sus palabras a la persona que ama... A la persona que se supone que debe amar, no dañar.

-Park... ¿Qué es lo que te tiene así? -interrogó, parecía cansado de la situación y perdiendo la paciencia, Jimin ni siquiera le daba un indicio de lo que podría ser.

-Quiero dormir Yoongi, ya te lo dije, buenas noches -cortó para tirarse sobre su cama nuevamente, dejando escapar su dolor mediante un llanto silencioso...

Estaba jodido.

Más que jodido.

[...]

El timbre de su departamento fue tocado al día siguiente, era pasada el mediodía y su garganta estaba seca como el hielo al no beber nada durante horas, sus ojeras eran notorias y maldijo a todo y a todos al pensar que quizás un enojado Yoongi lo esperaba del otro lado de la puerta. Preparó su boca para alejar al azabache que tanto insistía en verlo, pero se sorprendió al ver a alguien totalmente diferente esperándolo allí, pasando su peso corporal de un pie a otro y detallando con sus ojos las decoraciones externas de los departamentos, silbando para quemar el tiempo y sonriendo al ver al dulce chico.

-Hayun...

La nombrada le sonrió en grande, mostrándole la bolsa con comida que había preparado y Jimin sintió una opresión en su pecho, se hizo a un lado y dejó pasar a la mujer.

-Con permiso -murmuró la chica dejando la bolsa sobre la isla de la cocina, yendo directamente a las ventanas y abrir las cortinas; el lugar pequeño estaba ahogado en penumbras, cegando a Jimin por segundos quien tapó sus ojos-. Buenas tardes, Jimin-ah...

Hayun sonrió, caminando hacia él y tomar sus manos entre las suyas.

-H-hola... No quiero ser irrespetuoso pero... ¿Qué hace aquí? -Tragó saliva, sin poder mirarla a los ojos porque la envidia y celos hacían presencia en su roto corazón, pero dominaba sobre todo la culpa... Culpa de sentir algo tan egoísta y la mujer sea ajena a esos pensamientos suyos- ¿Te envió Yoongi?

Hayun lo observó indignada, llevando su mano a su pecho.

-¡Claro que no! Vine por mi cuenta -Caminó hacia una silla y se sentó pidiendo permiso con su mirada antes de hacerlo, Jimin la siguió, repitiendo su acción y sentándose delante de ella del otro lado de la mesa-. Vine a hablar contigo...

-¿Sobre Yoongi? -Dedujo rápidamente llamando la atención de Hayun quien negó con su cabeza.

-Claro que no... Más bien sobre ti, ni siquiera nombremos a Yoongi ¿si? -Estiró sus manos para tomar las de Jimin, dándole leves caricias que cargaban cariño al igual que sus dulces orbes, el menor se estaba por romper ante sus ojos pero se resistió.

-¿E-entonces...?

-¿Qué sucede Jiminnie-ah?

Del silencio subyacía la culpa, su labio temblando por el tono que usó la muchacha, desbordándose, ya ni siquiera teniendo fuerzas para mantener su fachada de chico autosuficiente, siendo atrapado por los cálidos brazos de la mujer que no entendía la verdad detrás de esas lágrimas. Susurrando leves frases de motivación, ninguna que en serio sirvan para unir los fragmentos de su corazón ya destruido.

»-Un pajarito me ha contado que tu corazón fue roto por un chico ¿Es cierto? -Tomó de las mejillas del menor para observarlo a los ojos y sorprendiéndose de que desvíe su vista a otro lugar.

-Es cierto... -susurró revelando la verdad a medias, no logrando enfrentar a Hayun... Porque siempre fue tan cobarde.

-Oh... -La chica lo soltó y se quedó pensativa- Debe ser feo... ¡Pero aún así! Nos tienes a nosotros, puedes superarlo Jiminnie-ah, tienes a Kookie, Seokjin, Yoongi y a mí, puedes olvidarlo porque eres unas de las personas más fuerte que conocí...

Si sólo supieras...

-Gracias Hayun noona, ya me encuentro mejor...

Deberías dejar de engañar a la gente.

Niconitty©