Seiya probablemente se merecía algunos nombres que ella murmuró en voz baja mientras caminaba detrás de él. El atuendo que llevaba, era la única prenda femenina que pudo encontrar a bordo y casi terminó destrozada al ver como delineaba su cuerpo. En vez de cubrir sus no tan generosas curvas, las mejoraba, menos mal que la capa la cubría lo suficiente para poder llevarla de tiendas y adquirir ropa nueva. Era eso o luchar contra todos los varones que la miraran.
La correa, bueno, sólo le dijo una parte de la verdad sobre su propósito. Sí, los esclavos con collar tendían a no ser acosados - y mucho más-sin embargo, su objetivo estaba más en asegurarse de que no se le escapaba -eso y que perversamente disfrutaba con la idea de tenerla bajo su control. Pero en cuanto lo sacó, supo que no conseguiría cerrarlo alrededor de su cuello sin luchar. Todo esto para conseguir gustarle.
La seducción y las floridas palabras, que sus primos utilizaban, no era fácil para él. Las hembras generalmente veían sus proezas y se arrojaban a sus pies. Bueno, más bien sobre su polla.
Fácil. Nunca antes había tenido la necesidad de gustarle a una. Ni siquiera estaba seguro de que era posible. Soy el que soy; un guerrero, un mercenario, y, si es necesario, un asesino. No sé cómo pasar al papel de amante. Y cuanto más tiempo pasaba con Mina, más deseaba gustarle. Quizás debería preguntar a Darien. Hace mucho tiempo, solía ser tan tosco como yo, sin embargo, él consiguió que su hembra le amara. ¿Quizás su hermano encontró una poción mágica que le hacia ignorar todos sus defectos?. Pagaría una gran suma de créditos por poner sus manos sobre esa cura.
Aunque, si ella lo amara y no pusiera a prueba constantemente su paciencia, él no sentiría la imperiosa necesidad de poseerla. ¿Podía el reto que planteaba ser la raíz de su natural atracción por ella?. ¿ Si ella dejaba de luchar, perdería el interés?
Al mirar por encima del hombro su rostro ceñudo-adorable, aunque sus ojos le disparaban dagas-de algún modo lo dudaba. Su ardiente princesa Zonian se había infiltrado de alguna manera en el corazón que creía perdido y nada menos que una traición de proporciones épicas conseguiría expulsarla. O una lobotomía, porque seguramente estoy loco por querer cuidar de otra mujer.
Al acercarse al mercado, la multitud de cuerpos de alienigenas creció densamente y enrolló la correa alrededor de su puño, acercándola protectoramente contra su costado. Rubia irritante o no, ella no poseía el tamaño para protegerse de algunos brutos en este lugar. Para su sorpresa, ella le permitió acurrucarla contra él, incluso enganchó su brazo alrededor de su cintura y descansó su mano sobre su cadera. Por un momento, él disfrutó de la sensación de caminar como una pareja, estrechamente entrelazados.
Claro que, él se había olvidado temporalmente de con quien trataba, y antes de que pudiese sacar totalmente el cuchillo de la funda, le agarró la muñeca y se echó a reír tras su gruñido de fastidio.-" ¿Y qué es lo que piensas hacer con eso? "
" Destriparte. "
-" Me has herido ", respondió en tono burlón.
-" No tanto como me gustaría ", murmuró mientras él los desviaba hacia un callejón. El hedor de la basura arrojada al suelo era bastante desagradable, pero al menos los sacaba de la multitud y les daba un poco de privacidad.
A ella no le gustaba la postura sumisa del todo y se resistió en su apretón, retorciendo su cuerpo mientras le infligía certeros golpes con las rodillas. Pero los había sufrido peores, así que ignoró su intento de escapar mientras engullía ambas muñecas en una de sus manos, después enrolló la correa alrededor de ellas, uniéndolas.
Sostuvo sus manos atadas sobre su cabeza, utilizó la otra mano para extender su capa y reveló su estómago parcialmente desnudo. Deslizo los dedos por su piel y contuvo el impulso de sonreír cuando ella contuvo la respiración. Pese a sus intentos de hacerle daño, ella no era capaz de resistirse a sus caricias. Tendría que aprovechar esa debilidad-y disfrutaría haciéndolo.
-"Qué haces?" le preguntó, con los labios enfurruñados, probablemente porque había frustrado su intento de ensartarle.
-"Simplemente no puedo dejar que tu intento de destriparme quede impune"
Ella se preparó, todo su cuerpo se tensó y sus labios se apretaron, probablemente esperando represalias, pero en vez de dolor, pretendía emplear a una mejor solución a su transgresión. Sus labios encontraron los de ella para besarla con hambre, algo que deseaba hacer desde que la había visto vestida con esa tentadora ropa.
Mientras su boca se aferraba a la suya -mordisqueando y persuasiendola a abrirse- curvó la mano alrededor de su cintura. El calor de su piel casi lo quemó. Él se presionó contra ella, las correas de cuero que entrecruzaban su pecho no obstaculizaban su necesidad de sentirla contra él, piel contra piel. Se frotó contra la tela sedosa que abrazaba sus pechos, la fricción de su movimiento endureció sus pezones.
Ella arqueó su espalda, su necesidad hablaba sin palabras. Llevó su mano libre hasta la taza de su pesado pecho, cepilló el pulgar sobre el pico duro y ella gimió.
-"Para ", jadeó contra su boca.
-" ¿Por qué? ", le preguntó distraídamente, demasiado intrigado por sentir su pesado pecho descansando en su mano como para darle un segundo pensamiento a su orden. Agachó la cabeza y cedió a la tentación, chupando el pico en su boca, con tela y todo.
Ella gimió de placer antes de girar su cuerpo y murmurar.- " No. No. No es correcto. "
-"Se siente bien para mí ", bromeó mientras tiraba de la punta con sus labios, agarrando el piercing para tirar y girar, provocando un jadeo en ella.
" Cualquiera puede vernos. " Su respuesta le hizo darse cuenta de que ella permanecía inmóvil por miedo a tener público escondido.
-"Entonces los mataré. " Y él pensaba cumplirlo. Al parecer había descubierto algo que merecía la pena complacer y proteger. Pero tal vez, podría usar su súplica para que ella aceptara una tregua. -" Pararé, pero sólo si juras que has aprendido la lección. ¿Lo harás? ¿Vas a dejar de intentar matarme? "
-" Una Zonian nunca se rinde ", fue su respuesta, como se esperaba y maldita fuera si sus ojos no tenían un desafío en ellos, como si lo desafiara a seguir.
-"A veces hay mérito en la retirada y en el reconocimiento de una fuerza superior", se burló.
-"Piensas demasiado bien de ti mismo. Nunca cederé ante ti " .
No, pero gritaras. Desafiado por una mujer que ni siquiera le llegaba a la barbilla, era el momento de demostrarle que ceder podía tener sus beneficios. Sus dedos tejieron su camino debajo de la tela que cubría su hendidura y la acarició. Ella retuvo el suficiente ingenio para intentar empujarlo, ondulando su cuerpo contra el suyo y mordisqueando su labio. Sin embargo, él sabía era capaz de mucho más. Impuso una farsa lucha, su orgullo no lo permitía ceder sin una resistencia simbólica. Por las estrellas, eso le hizo quererla aún más, maldita sea.
Empujó contra ella, inmovilizándola contra la pared y con un dedo empezó a frotar su pezón. La lucha la abandonó cuando el placer que él podía invocar se hizo cargo, dejándola jadeante y retorciéndose, luchando por esa cumbre dichosa. Él enterró la cara en el hueco de su hombro, con la respiración entrecortada mientras bombeaba sus dedos dentro de ella. La forma en que respondía a él lo excitaba más allá de lo que jamás había conocido. Por una vez en su vida, dar placer a una mujer y no a cualquier mujer, pero si a Mina, era lo único que quería. Ver y oírla llegar a su clímax, era el objetivo más digno por el que alguna vez se había esforzado. Él chupó la piel de su cuello, dejando la marca temporal de pasión, luchó contra el impulso de dejar una permanente con sus dientes, una antigua costumbre de su pueblo, que unía a una pareja. No estaba listo para este tipo de compromiso, incluso si su ser entero le gritaba que lo hiciera.
Seiya se concentró en otras cosas, como en su lloriqueo, cómo en que a pesar de haber desenrollado las manos de la correa, estrechaba su cabeza contra ella, en cómo sus dedos se aferraban a su pelo. Una y otra vez, metió sus dedos en ella, su pulgar presionaba y frotaba su clítoris hinchado. La humedad apretada de su canal hacia que su polla palpitara tras el taparrabos de tela que llevaba y él no quería nada más que hundirse dentro de ella, dejarla cabalgar su vara hasta que se viniera con ese grito lujurioso. Pero había empezado esto como una lección por su mal comportamiento y necesitaba mantenerlo así. Además, se perdería en el placer si llegaba a meterse ybdejaría que su polla se hiciera cargo. En este peligroso lugar, necesitaba al menos una parte de su ingenio, aunque la mayor parte le había dejado.
Claro que, cuanto más su dulce carne exprimía sus dedos y su lloriqueo se volvía más frenético, menos le importaba. Todo un escuadrón de soldados podría haberlo rodeado y él no se habría dado cuenta, por lo absorto que estaba en llevarla a su orgasmo.
Apartó el rostro de la suave curva de su cuello-ya que la tentación de marcarla con los dientes era demasiado fuerte - y observó su clímax. Ella abrió los ojos, sus claras profundidades verdes estaban nubladas por la pasión y un gemido estrangulado escapó de sus labios. Él continuó bombeando sus dedos en ella, las paredes de su sexo se estremecían contra ellos y sus caderas empujaban al ritmo de sus ondulaciones. El momento resultó tan erótico, que casi se corrió. Lo más sorprendente era, que no quería que terminara.
La acercó a él, mientras yacía agitada en sus brazos, con los suyos abrazando su cintura y decidió que no la dejaría ir, nunca podría dejarla ir. Y realmente, me importa una mierda si no es el camino Zonian.
*****
Su cuerpo tardó unos minutos en dejar de temblar y cuando ella se calmó, su razonamiento volvió. Abrir los ojos le costó un gran esfuerzo, pero no tuvo ningún problema para darle un puñetazo en la cara.
-" ¿Cómo te atreves! " gritó furiosa por su acción, sin embargo, aún estaba más enfadada consigo misma por permitirlo y disfrutarlo.
-" ¿Atreverme a qué? ¿A hacerte venir con mis dedos?. Perdóname entonces por darte tan inmenso placer ". Él no parecía para nada arrepentido. De hecho, parecía engreído.
-"Estamos en público. Esto cruzó la línea ",dijo entre dientes.
-"Entonces no debiste intentar agarrar mi arma", le indico,con las piernas separadas y los brazos cruzados sobre el pecho. Sin embargo, fue la arrogante sonrisa lo que le hizo perder el control lo suficiente como para abalanzarse sobre él, confiando en lastimarlo con sus uñas.
Seiya rechazó su ataque con facilidad. Siempre lo hacía, para su vergüenza. Su maestra le habría golpeado por tanta debilidad.
-" Compórtate o te desnudare y tomaré a la vista de todos. "
-" No te atreverías. "
Sus ojos brillaron, con el brillo que siempre señalaba su excitación. Él la tiró con fuerza contra él, molió su abultada entrepierna en su contra. -" Ponme a prueba ".
Antes de que ella pudiese responder, él se llevó una mano al cuello y se volvió con un rugido. -" Malditos bastardos. Os matare a todos " .
Sin comprender, lo vio caer de rodillas frente a ella, -"Corre", jadeó, incluso mientras se desplomaba, hecho un ovillo, en el suelo, con los ojos en blanco.
¿Correr?. Nunca haría algo tan cobarde. Sin embargo, desarmada y sola contra el par de asesinos de burdel acercándose- reconocibles por sus atuendos tan similares al que llevaba Seiya pero de color azul -junto a la media docena de guardias armados, comprendió que no tenía ninguna oportunidad.
Ella dudó un momento antes de salir corriendo, todo el tiempo, maldiciendo su falta de armas. Esto nunca habría pasado si él me hubiese dado, al menos, una daga o una pistola para defenderme.
Las finas zapatillas que llevaba hacían que cada bofetada de sus pies sobre el suelo vibrara por su pantorrilla, pero no vaciló. Siguió corriendo y cuando llegó a la final del callejón, miró por encima de su hombro para ver que nadie le perseguía.
Entonces, yo no era su objetivo. Desaceleró sus pasos, meditó sobre su próximo movimiento y cerró la capa mas firmemente a su alrededor para ocultarse.
Pensó durante un breve momento que podría aprovechar la oportunidad para escapar, pero aplastó la idea porque ya podía oír las burlas de su maestra. " No escapaste, alguien te rescató -por accidente. Debilucha ". Entonces, ¿qué haría una guerrera Zonian con demasiado orgullo?.
Recuperar a su generador de semilla, por supuesto.
Aunque primero tenía que armarse y tal vez encontrar refuerzos. Por suerte para ella, conocía a los dos idiotas que podrían ayudarla con eso. Encontrar la nave resultó ser fácil, lo más difícil fue llegar hasta allí sin ser descubierta o permanecer intacta. Aunque, los pocos malhechores que intentaron apropiarse de ella aprendieron, para su consternación, que ser pequeña- y extremadamente molesta-no era lo mismo que indefensa. Los encuentros indeseables por lo menos tuvieron el beneficio de armarla, si, con armas de la mala calidad.
Caminó por el tubo de acoplamiento que llevaba a la nave, alternado la irritación consigo misma por no utilizar la oportunidad para escapar, el miedo porque Seiya podría estar muerto y la ira porque incluso le importara.
El panel de control de la nave no la reconoció y le dio entrada, por lo que ella empezó a golpear el sólido portal con la culata de la pistola que había adquirido.
Cuando el golpear no funcionó, gritó. -" Dejadme entrar, par de idiotas púrpura. "
Se abrió la puerta y el guerrero con el pelo blanco evitó por poco su próximo intento de llamar.
-" Hey, ¿qué mierda haces aquí?. ¿Sola? "
Su hermano lo empujó a un lado, frunciendo el ceño. -"¿Dónde está Seiya? "
-" Secuestrado. Posiblemente muerto. No estoy muy segura. Había demasiados asesinos de burdel y guardianes como para quedarme a averiguarlo" .
-" Le dije que no fuera solo", murmuró el de pelo Oscuro.
-" Oh, por favor, Taiki. ¿Desde cuándo Seiya necesita que le lleven de la mano? Apuesto a que alguien lo distrajo con otra cosa, porque ambos sabemos que nadie habría conseguido derribarlo. "
Dos pares de ojos claros se fiaron en ella con la acusación.
Mina no pudo evitar sonrojarse.-" No importa cómo sucedió. Tenemos que recuperarlo" .
-" Bueno, obviamente, sí, pero ¿desde cuándo te preocupas por nuestro primo? "
-" No lo hago, pero me parece justo salvaguardar su lamentable cuerpo púrpura, en caso de que no lleve a su hija,. Todavía podría necesitar su semilla. " .
-" Caliente cometa en llamas, están hechos el uno para el otro, " el llamado Taiki resopló.
-"Hey Yaten, ¿estás tramando una pequeña misión de rescate, seguida de algunos fuegos artificiales.? "
-" ¿Fuegos qué? " Preguntó ella con el ceño fruncido.
-" Explosiones ", respondió Yaten-" Es lo que sucederá probablemente cuando intentemos salvar a Seiya que se enorgullece de no necesitar ser salvado y podría matarnos cuando vea que te dejamos ayudar. "
-" Ahora veo por qué siente el impulso de golpearte " gruñó ella
-" Porque él nos ama, " Yaten sonrió, mostrando sus dientes puntiagudos.
Taiki logró abofetear a su hermano antes que ella, borrando esa sonrisa idiota.
-" Basta de juegos. Necesito armas, una forma de localizar Seiya y un par idiotas que actúen como distracción mientras lo extraigo, si él aún está vivo. Ah y algo de ropa oscura para ocultar la sangre. "
-" Como he dicho, uno para el otro ", Taiki resopló con una sonrisa.
Por extraño que pareciese, en vez de herirla su declaración, Mina sintió un calor extraño. Mebpregunto cómo sería quedarme a su lado en vez de volver a casa cuando esté embarazada. Una parte de ella quería ignorar su educación Zonian para averiguarlo.
Se dio una bofetada mental.
ESTÁS LEYENDO
EL MEJOR SECUESTRO (FINALIZADA)
Science FictionElla deliberadamente lo secuestró por su destreza, por lo que cuando se presentó la oportunidad, él la secuestró por venganza -y para apaciguar su lujuria. Mina está en la misión de quedarse embarazada y según la antigua tradición de su pueblo, t...