¡Buenos días! No crean que tengo olvidado este fic, es sólo que no he tenido tiempo para subir actualización. Sigo sin computadora y sólo puedo escribir en el celular y pues no es cómodo. Esa cosa se calienta y de seguro un día va a explotar. Pero bueno, disfruten de este capítulo y ojalá nos veamos prontito.
Aquello que nos motiva a seguir adelante
Él era demasiado joven para que le importaran los exquisitos decorados de cada recoveco de lo que debía ser considerado como un palacio imperial. También era lo suficiente desentendido de las formalidades que allí tenían que no saludó a ningún trabajador que tan amablemente le obsequiaba una sonrisa.
Subieron al tercer piso. Dicha planta fue alquilada exclusivamente para ellos para no ser molestados por el resto de los huéspedes. Y los cuartos se repartieron para que pudieran instalarse y disfrutar de aquel paraíso terrenal.
—¿Acaso me odias tanto? —Abuto miraba con zozobra a quien armó los integrantes de cada cuarto.
—Te dejé la mejor habitación con la vista más espectacular hacia el jardín de lirios morados.
—¡Me importan un carajo las flores! —Rápidamente sus gestos faciales se contrajeron en armonía con su mosqueo.
—Ojalá las camas de la tripulación fueran así de suaves. —Kamui disfrutaba del lecho individual que había tomado como suyo. Se le veía tan a gusto.
—Pues duérmete y no despiertes nunca más.
—No seas un majadero. —La rubia le acomodó un hermoso gancho al hígado. Fue tan bueno que el pelirrojo le dio un diez de calificación—. Tienes que aprender a lidiar mejor con tu síndrome de abstinencia.
—Eres una maldita sádica. —Yacía de rodillas contra el suelo, retorciéndose del dolor.
—¿Síndrome de abstinencia? ¿Acaso es alcohólico? —Miraba con intriga al adulto responsable con el que compartiría habitación.
—Diría que él es adicto a otra clase de vicio. —Shina dibujó un gesto divertido en sus labios. ¿Se estaba burlando en su cara? ¿Qué clase de pensamientos le estaría dirigiendo en la privacidad de su mente? —. Los de su edad son muy propensos a ello. Especialmente cuando tienen una novia joven y con buen cuerpo.
—¿A qué eres adicto? —Cuando la curiosidad le picaba era muy malo.
—Lo descubrirás por ti mismo cuando te salgan pelos allá abajo. —Abuto al fin se recompuso como para ponerse de pie—. Bueno, siempre y cuando no salgas raro.
—Idiota, deja de decirle esa clase de cosas o harás que se confunda y empiece a pensar cosas que no. —Lo regañó—. Además, no creo que él llegue a tener ni la mitad de tu apetito. —No permitiría que encasillara al pelirrojo en la misma categoría que él—. Y si continúas así terminarás trabajando horas extras para cubrir los gastos de tu pequeña bendición.
—Oye, yo soy un hombre cuidadoso. Jamás dejaría hijos desperdigados por allí. —Se sentía mucho más ofendido que antes—. Y verlo a él es el método más efectivo para no transitar por ese camino.
—¡Ey, ¿de qué están hablando?! ¿Por qué me dejan fuera? —objetaba el menor.
—¿Cómo puedes decir eso? —Tomó al infante y lo sujetó por debajo de sus brazos para mostrárselo—. Míralo. Es un niño adorable.
Abuto no negaba que Kamui fue bendecido por genes excepcionales que le facilitarían la vida amorosa cuando se volviera un adulto. Sin embargo, también sabía cómo era en realidad y eso lo arruinaba todo.
![](https://img.wattpad.com/cover/107304672-288-k152688.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Once upon a time there was You and Me [Precuela de Blood and Roses]
FanfictionTras despedirse de su planeta natal, Kamui dejó atrás a las personas a las que alguna vez denominó como familia para ir en busca de aquello conocido como "fuerza". Sin embargo, él no era el único que intentaba sepultar en lo más hondo su pasado e in...