Capitulo 19. Las pruebas

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Mérida se dió cuenta que sus amigos estaban desesperados y se movían cada vez más y las plantas los empezaban a ahorcar y las plantas carnívoras a abrir su boca, con esos afilados dientes.

— ¡Lumus Solem! .— conjuró Mérida en dirección a la maleza negra. Se encendió una luz tan potente que parecía que había entrado la luz del Sol.

Al momento de que los rayos rozaron el lazo del diablo, esta se contrajo, alejándose de la luz. Los chicos de inmediato cayeron al vacío pero Mérida fue rápida y hechizó unas pequeñas almohadas, en donde cayeron los tres.

— ¡Mérida! .— gritó Rapunzel al ver a su amiga sonriendo, la abrazó con fuerza y la pelirroja sólo correspondió

— Nos asustaste .— dijo Jack con una expresión aliviada

— ¿Te preocupaste por mí? Que tierno .— se burló Mérida

— Claro que no, no ves que te odio zanahoria .— se sonrojó Jack, se cruzó de brazos y le dió la espalda a ella.

— Wooo, ¿Cómo sabías que hacer en la situación? .— se asombró Hiccup

— Me gusta la herbologia, leí algunos libros .— contestó Mérida

— Eres impresionante .— le sonrió Hiccup de manera sincera

— Gra... Gracias .— empezó a jugar con sus manos.

— ¿Dónde estamos? .— Rapunzel giraba su cabeza en su eje

— Hay que seguir avanzando y buscar una salida, la noche no dura para siempre .— encendió su varita Mérida

— Algo caminó por mis pies .— se sobresaltó Rapunzel

— Hay pequeñas libélulas .— agitaba su brazo Jack, tratando de espantar algún animal

— Sentí unos pequeños pies .— empezó a caminar Hiccup viendo al piso

— Este lugar es escalofriante .— empezó a caminar Rapunzel hacia atrás pero se topó con una roca gigante, en forma de óvalo, esta estaba cubierta de musgo.

— Está roca tiene una cara tierna .— Rapunzel ladeó su cabeza en forma!a de ternura. Se sobresaltó ya que está roca se ponía de pie y cambiaba su expresión alegre a una de enojo

—¡Ahhh! .— gritaron los cuatro pero se iluminó el lugar y observaron que no estaba sólo, había más rocas de esa forma.

El lugar tenía flores y muchos árboles, habían flores blancas que a veces lanzaban pintura en polvo pero lo que más les sorprendió es que había huevos blancos caminando por doquier.

— Parece que estoy en la festividad de Pascua .— susurró Rapunzel

— Y esas cosas no son libélulas, son pájaros de colores .— empezó a temblar Jack

Las rocas gigantes se abalanzaban hacia ellos, los pájaros de colores los picaban y los pequeños huevos con pies se les subían y hacían que el caminar se les dificultaba.

—Hay que buscar la salida .— dijo Hiccup buscando una puerta pero no encontró ninguna. Ellos se colocaron los brazos arriba de la cabeza, tratando de que no los siguieran picando.

Esquivaban los golpes de las rocas y de aquellos huevos pero eran demasiados para ellos cuatro, tanta era la presión que no pudieron conjurar nada.

Jack sintió algo suave en su hombro y se percató que tenía una de las pequeñas aves, pero se sorprendió que no era una ave, si no un ser diminuto lleno de plumas de colores y un pico color púrpura, esto hizo que la tomara con las manos para verla detenidamente.

HOGWARTS: Una Aventura Peculiar [En emisión]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora