𝐕𝐞𝐧𝐝𝐨 𝐫𝐞𝐜𝐮𝐞𝐫𝐝𝐨𝐬 - 𝐆𝐫𝐚𝐲𝐋𝐮

Capítulo 3

Presente

- Mami... ¿de verda que eso vuela? -preguntó Dais en un susurro mirando al avión con los ojos muy abiertos.

El hombre que estaba sentado frente a ellos en el autobús que lo llevaba desde la puerta de embarque al avión miró al niño con una sonrisa y le guiñó un ojo.

- Sí que vuela... ¿no recuerdas lo que te contó el tío Natsu? - preguntó Lucy con dulzura.

- Sí pero... es mu gande - Dais abrió los abrazos y los movió hacia arriba a la vez que hablaba.

Lucy revolvió su rebelde cabello y lo besó en la coronilla.

- Volará...no te preocupes - lo tranquilizó.

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24 de julio de 2004 - Forks, Washington

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- ¿Lucy? - Grito Jude entrado por la puerta de su casa.

Lucy estaba tirada en el sofá leyendo "Orgullo y prejuicio" una vez más.

- Estoy aquí papá - dijo asomando la cabeza por un lateral del sofá.

Jude sonrió al verla, como cada vez que lo hacía, cada día agradecía que su hija después del divorcio con su madre quisiese quedarse con él y no viajar a Jacksonville con Layla.

- Estabas buscando trabajo...¿cierto? -preguntó Jude tornándose serio de repente.

- Sí - contestó Lucy con cautela.

- He hablado con Mika Fullbuster, la mujer del doctor... ya sabes - hizo un gesto con la mano restándole importancia pero las mejillas de Lucy se colorearon cuando supuso que debería conocer al doctor después de tantas y tantas visitas al servicio de urgencias - me ha dicho que su hijo llegó a la ciudad hace unos días y busca a alguien que cuide a su bebé mientras su mujer está ocupada.

- ¿Bebé? - preguntó ella alzando una ceja.

- Creo que tiene dos años...no es tan bebé... -dijo Jude algo confundido.

- Está bien...iré a hablar con él...¿Dónde vive? - preguntó Lucy.

- Al lado de río, quiere que empieces cuanto antes, así que ve ahora mismo.

Lucy dejó el libro en la estantería y con un resoplido cansado avanzó por las calles casi desiertas de Forks hasta que poco a poco comenzó a oír el sonido del agua del río. Sonrió cuando vio como un pequeño gorrión se bañaba con miedo en una de las orillas y con cuidado para no asustarlo avanzó lentamente hasta colocarse a su lado.

Después de ese pequeño alto en el camino, divisó a lo lejos una gran casa blanca con un camión de mudanzas en la puerta, no le costó adivinar que el hijo del doctor Fullbuster vivía allí. Así que apuró el paso y se apresuró a subir las dos escaleras del porche y a llamar suavemente a la puerta.

Una mujer de pelo azul y tremendamente hermosa la abrió al otro lado, después de darle un repaso de arriba a abajo arrugó el ceño y se cruzó de brazos.

- Soy Lucy Heartfilia - dijo ella con timidez - mi padre ha hablado con la señora Mika y me ha dicho que estáis buscando una chica para cuidar a un bebé.

- ¿Quién es? - se oyó una voz aterciopelada, y a los pocos segundos un chico de unos veintiocho años apareció tras la mujer y miró a Lucy con curiosidad.