𝐕𝐞𝐧𝐝𝐨 𝐫𝐞𝐜𝐮𝐞𝐫𝐝𝐨𝐬 - 𝐆𝐫𝐚𝐲𝐋𝐮

Capítulo 12

29 de Marzo de 2006

.

- Hola preciosa -susurró aquella voz en su oído mientras recolocaba el correo.

- ¿Qué quieres Zeref? - preguntó Lucy entre dientes.

- Solo hablar contigo - dijo él apartando el cabello de su hombro y hablando contra la piel expuesta de su hombro.

Lucy se retiró y lo miró a los ojos.

- ¿Quieres dejarme tranquila? - preguntó mirándolo fijamente.

- Caerás... - susurró Zeref con una sonrisa arrogante.

.

5 de abril de 2006

.

- ¿Vienes conmigo al cine esta noche? -preguntó apoyándose en la mesa de recepción.

Lucy rodó los ojos antes de levantar la mirada.

Zeref era atractivo, alto, fuerte, con el cabello negro. Su piel blanca brillaba con el sol, sus ojos negros eran profundos y enigmáticos y su enorme y blanca sonrisa te deslumbraba. Pero Lucy estaba en un punto en su vida en lo que lo único que le preocupaba era su hijo.

- ¿Si te he dicho que no cientos de veces, que te hace creer que ahora aceptaré?

- Soy irresistible... - contestó él encogiéndose de hombros.

- Y tu ego también es irresistible...Zeref...

- Llámame Zef - la interrumpió - o mejor, grita mi nombre...yo puedo ayudarte a hacerlo...

Lucy comenzó a reírse a carcajadas, ese chico era tan insistente...

.

7 de abril de 2006

.

- ¿Qué es lo que tienes para que Natsu me prohíba estar contigo? - le preguntó un día más.

Lucy suspiró antes de girarse y fingir una sonrisa cordial, después de todo era el hijo de su jefe.

- Tengo de lo que carecen las demás chicas con las que sales - susurró mirándolo.

- ¿Y qué es eso? - preguntó descargando todo el poder de su mirada en ella.

Lucy tragó saliva y sonrió dulcemente.

- Cerebro - contestó.

- ¿Ya la estás molestando otra vez? -preguntó Natsu que apareció de repente.

- Sí, sí...tu chica es intocable - dijo Natsu alejándose y rodando los ojos.

.

Presente

.

- Jefe Jude...¿está Lucy en casa? - preguntó Gray con voz cortés.

Jude lo miró de arriba abajo con una mueca de desagrado y estuvo a punto de mentirle y decirle que su hija no estaba, pero pensó que después ella se enfadaría y prefirió decir la verdad.

- Ahora le aviso - masculló entre dientes.

Se dio media vuelta y azotó la puerta dejando a Gray con un palmo de narices y preguntándose qué diablos había pasado. Un par de minutos después Lucy salió al porche de su casa y miró a Gray con una sonrisa de disculpa.