A Esto Se Le Llama Mala Suerte [Cancelada]

Capítulo 14: Festival

Algo que me encantaba y admiraba de mi mejor amiga es su forma de ser, siempre trata de hacer lo mejor que puede para todos, y no porque esa sea su obligación cómo delegada de todo segundo año, si no que ella misma fue la que se postuló para hacerlo, le gusta mucho. Tiene 6 cursos bajo su responsabilidad, de la A a la F son los grados que ella debe controlar y si recibe alguna queja de parte de los alumnos, ella tiene que solucionar el problema. Generalmente los delegados tienen un asistente que los ayuda en todo, claro, con tanto trabajo es entendible que necesiten ayuda.  Summer ha maltratado a los últimos asistentes que se ofrecieron a ayudarla, no porque  ellos quieran hacerlo si no porque quieren estar cerca de lla A Summer le gusta estar a la mira de los chicos pero a veces es una desventaja porque lo único que hacen es hacerle cumplidos en vez de ayudarla. Es por eso que ella ha decidido explotarlos para que se rindan y porfin se vallan.  Cosas como limarse las uñas mientras ellos llevan las cajas, o mientras ella se maquillaba los dejaba a ellos ocuparse del trabajo que originalmente ella debería hacer, ella trató de explotarlos así las renuncias se hacían cada vez más frecuentes y ella podía dejar lugar para mí o Jason, nosotros no queríamos pero ella insistió que no nos tratarían como a los demás, ya que ella sabe cual serían nuestras verdaderas intenciones y no le coquetearíamos.

— Me alegra que hallas aceptado ser mi asistente —dijo Summer caminando rápidamente con dos cajas que le tapaban la vista y tenía que caminar un poco de costado para ver el camino— Necesitaba un asistente.

— No he aceptado Summer —dije en la misma condición que ella, pero en vez de dos caja, yo llevaba una y arriba unos papeles y carteles que teníamos que presentar en el Consejo Estudiantil— Es sólo por esta vez, te lo debía por no estar contigo estos últimos cinco días —dije, y era cierto, no he estado con ella la última semana por ayuda a preparar las cosas para el festival y Summer y yo, casi no hemos pasado tiempo juntas.

— No me debes nada —murmuró— Si tú no hubieras estado ocupada, sería yo la que no podría estar contigo o Jason.

— Dios —me quejé— No sabía que los delegados hacían tantas cosas.

— Agradece que te estoy ayudando y no estás llevando las cosas tú sola mientras yo me miro las uñas —rió ligeramente cuando se detuvo de repente. Supe que estábamos frente a la puerta del Consejo, jamás había entrado allí adentro. Casi nadie lo ha estado, sólo profesores, directores, delegado y asistentes. Me da un poco de nervios de pensar que entraré a ese salón lleno de delegados y yo, ni si quiera soy asistente— Annie —Summer me miró a los ojos— Recuerda que las personas de allí adentro son muy difíciles de convencer. Recuerda no hablar mucho y por favor —hizo una pausa— No lo arruines.

— ¿De verdad piensas que puedo arruinarlo? —pregunté indignada pero luego rodé los ojos cuando Summer me miraba fijamente,  confirmando que yo sí podía arruinarlo.

Summer abrió la puerta cómo pudo y entramos. Adentro era hermoso, mucho más hermoso de lo que Summer me contó. Era un salón casi común, nada más que cómo solo había 12 pupitres parecía más grande. Los pupitres estaban puestos en un círculo, de modo a que cada integrante pudiera verse a la cara, y todas esas caras se posaron en nosotras cuando entramos.

— Lo siento —se disculpó Summer— No encontraba las cajas —dijo dejando las cosas en el escritorio del profesor que estaba vacío y se sentó en uno de los pupitres dejando uno sólo libre.

Me quedé parada a un lado del escritorio con los nervios en mi cuerpo, no sabía si tenía que sentarme o irme, o simplemente quedarme allí parada. Todos me estaban mirando hasta que Summer me hizo una seña para que me sentara. Me senté con un poco de lentitud ya que no quería hacer ningún movimiento brusco ante todas esas miradas interrogantes.