Pídeme lo que quieras VegetaxBulma

Proposición...

CAPITULO 4

Advertencia: Contenido Fuerte!

Espero lo disfruten...

Por fin puedo liberar el aire de mis pulmones, pero no puedo dejar la manía de morderme el labio inferior producto de los nervios, estoy nuevamente vestida frente al espejo con el corazón en la boca al saber que dentro de poco tendré que salir por aquella puerta... mi mente me da dos opciones... o salgo por la puerta del pasadizo sin nada más que un sinfín de nervios comprimidos en mi estómago por ir a clase... o salgo por aquel salón donde sé que esta él....y una vez más muestro mi anhelado estado de verlo...

....

-Vegeta, este es extraordinario, este trabajo me gusta ya que parece una fotografía... mira esos detalles...-

-Este me gusta más, más allá del retrato, la expresión de las emociones me convence... las ha podido manifestar correctamente...-argumento Vegeta

Ambos estaban analizando cada trabajo de los 5 finalistas hasta que sorpresivamente la puerta del vestidor se abrió... llamando su atención...

-Lo siento no quería interrumpir- Miento y me quedo mirándolos con una sonrisa algo tímida... la expresión desencajada de él me da a entender que no esperaba mi presencia, aun así, me atrevo a caminar hacia la salida sin dejar de mover mi cabello y sin dejar de verlo...

-Bulma! ¡Espera! ¡Qué bueno que aún no te hayas ido! ven acércate! –La llamo el profesor de arte efusivamente ante la atenta vista de Vegeta...

Ahora somos solo los tres en esta sala, si bien no lo estoy viendo directamente ya que le sonrió al profesor de arte como cortesía, puedo sentir su fuerte mirada sobre mí... acepto su mano y la sostengo mientras me coloco a su costado evitando hasta el momento a Vegeta...

-Bulma te presento a Vegeta Ouji, hombre exitoso de negocios y...-

-Ya nos conocemos- lo interrumpió Vegeta colocando sus manos en su bolsillo mientras la mirada perpleja del profesor se ponía sobre ella...

-Así es Profesor Otake, el Sr. Ouji es mi profesor de análisis organizacional- Respondí con una sonrisa, pero cierto calor empecé a sentir al verlo directamente, sus ojos negros estaban sobre mí con una expresión seria... pero intensa...

-Como estas Brief? ¿Nerviosa? -

Sus ojos negros me llenaron por completo, esa pregunta era adrede... lo podía notar en el tono de su voz y en la expresión sarcástica de su mirada...

-Oh! Vaya!- comento el profesor de arte, pero al ver a la peliazul sonrió con gracia -Con razón estas avergonzada! Tranquila el profesor Ouji es todo un profesional-

-No-no, No es eso!- respondió Bulma presa de los nervios... -Simplemente, siento calor...- Esto no estaba planeado... mis escrúpulos empiezan a hacer acto de presencia y siento cierto pudor gobernarme, sobre todo al verlo sonreír discretamente por mi comportamiento...

-Bulma, has inspirado de tal forma a mis alumnos que está complicado escoger el mejor, verdad Ouji?...- comento el profesor Otake sacándome de mis pensamientos, yo solo sonreí en respuesta sin entender su comentario, mi mente estaba distraída, ya que solo ponía atención a los movimientos de él, a sus expresiones y aunque este estaba serio e indiferente a mi presencia, no dejaba de verlo, por otro lado me interesaba sus apreciaciones, pero pasados unos minutos me di cuenta que solo serían enfocadas al trabajo del dibujante... no iban dirigidas a mí...

-Bulma, por favor dame unos minutos, aun no te vayas...- Esa petición del profesor de arte fue mi excusa perfecta para quedarme a seguir observándolos, era muy probable que me quería para una segunda puesta, pero jamás volvería, esto a sido una locura y no dejo de pensar las consecuencias que traería si alguno de mis padres se entera... mientras ellos están concentrados en su decisión yo no dejo de observar a Vegeta, tiene un porte tan distinguido, un perfil tan atractivo y una mirada que mata... si bien trato de disimular... el sabe que lo estoy mirando y en un momento más de distracción del profesor, me mira... mi pecho se acelera y una sonrisa como respuesta le llega... me siento en las nubes... me encanta que me observe cuando no lo están viendo, su intensa mirada me llena de calor y yo solo muerdo mi labio inferior producto de los nervios...