Todo por aquella estupidez

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Habíamos decidido ir a un puesto de postres, yo acepte ya que note como al nombrarlo Diane sonría de una manera tan hermosa que no me podía negar a nada, en este lugar ella solicito un pastel de vainilla con chocolate, mientras que yo ordene uno de chocolate blanco con galleta, pasaron los minutos y nos entregaron aquellos pasteles, a lo cual comenzamos a comer, pero algo paso, Diane de un momento a otro tenia mi trozo de mi pastel en su boca, estaba confundido, pero no me importaba ya que verla disfrutar me alegraba, y más verla con sus mejillas casi llenas sonriéndome, al verla a si sentí algo calientes mis mejillas.

Una vez terminados los pasteles queríamos ir al cine, aquí escogimos una película de comedia, el cual es mi género favorito, yo estaba ilusionado, no de ver la película, si no de escuchar la carcajada de Diane, ya que sus dulces risas no deberían compararse en nada a su carcajada; durante la película note que Diane aguantaba la risa, no sabía porque lo hacia, pero esta duda termina cuando la escuche, era una carcajada tan fuerte que note como todos los presentes la miraban con disgusto, algo que me molesto, ¿Cómo podía no gustarles tan preciosa risa como su portadora?, yo ante todo la mire con una sonrisa, realmente me estaba encantando esta chica, todo lo que hacia me parecía perfecto, ella era perfecta ante mis ojos.

Paso el tiempo, nosotros nos estábamos divirtiendo bastante, yo no paraba de sonreír, Realmente esta chica me a cambiado bastante en todo este tiempo, no se que sería de mi si nunca la hubiera conocido.
Todo estaba tranquilo, hasta que Diane me llamo.

-King... Aún no me has dicho algunas cosas de ti- dijo mirándome con una sonrisa, yo no sabía si preocuparme o estar feliz, al final escogí lo segundo.

-Supongo que tienes razón, pero eso no importa, siempre y cuando tu sonrías- respondí sonriendole.

-Vamos King, solo respondeme algunas preguntas-dijo eso en un tono de suplica tan tierno y hermoso.

yo solamente solté un suspiro de resignación -Esta bien Diane, te doy la oportunidad de hacerme tres preguntas las cuales responderé con toda la honestidad- respondí con un tono de resignación, ante eso note una sonrisa mayor en ella.

-Muchas gracias- dijo dándome un pequeño beso en la mejilla, yo estaba casi gritando dentro mio, pero no podía hacer nada para que no sospechase de mis sentimientos -Bien,mi primera pregunta es, ¿Tienes algún objetivo?- pregunto sin más, no se porque esto se me hizo algo extraño, pero no me importaba.

-¿Un objetivo?... Ah, si tengo uno, el cual es hacer felices a todas las personas, aunque tenga que arriesgar mi propia felicidad- al decir eso note como Diane me miraba con dulzura, no sabia como reaccionar, ¿Qué dije? Si solamente dije la verdad.

-Que lindo objetivo King, Me pregunto el porque, pero no quiero desperdiciar mis preguntas-soltó una pequeña sonrisa sincera, algo que me resulto simplemente tierno.

-Bueno, tal vez eso te lo responda sin la necesidad de que gastes tus preguntas, pero eso será después- ante eso le devolví una sonrisa.

-Ya tengo mi siguiente pregunta- dijo emocionada, verla así me cautivaba, ver sus preciosos ojos, sus pequeños saltitos, su sonrisa, entre más -Mi pregunta es...- justo iba a decir cuando paro, no sabía que le pasaba, pero después de un rato siguió -King... ¿Acaso alguien te gusta?... Y de ser un si, dime quien es...-.

Al decir eso me sorprendí bastante, se que no podía mentirle, pero tampoco quería perderla, pero supongo que mi honestidad era bastante más grande, además, no podía mentirle a la chica que más quiero -Si Diane, si me gusta alguien... Y esa persona responde al nombre de... Diane... Perdóname... No era mi intención ese sentimiento... Además... No puedo mentirte...- después de decir eso note una pequeña sonrisa en ella, pero yo estaba aun asustado por su respuesta, sabía que este era el final de todo.

Pero justo después note como alguien me tomo y me giro, era Merlín la que me miraba con molestia, sabía que estaba más que muerto -¡KING, TE DIJE QUE OLVIDASES ESE HORRENDO SENTIMIENTO!- me grito con enojo.

-Lo se... Se que me lo dijiste eso, y se que no esta bien que me enamore, y antes de que digas algo más, se que soy un idiota por creer esto...- así fue como me solté y salí corriendo, era lo único que podía hacer ahora.

Yo corrí y corrí a más no poder, lo había arruinado todo por este estúpido sentimiento, había echado a la basura toda esta amistad, hasta cierto punto llegue a un área verde para tirarme al suelo rendido y empezar a llorar, después de un rato me acomode de una mejor manera, colocando así mi cabeza entre mis piernas para no ser molestado, necesitaba estar solo, y todo por creer que era buena idea decir la verdad. Pero en un momento sentí como si alguien me abrazó y me apretó contra si mismo.

-Tranquilo King... Todo esta bien...- dijo acariciando con delicadeza mi cabello, esa persona tenía la voz de Diane.

-¿Diane?...- dije eso levantando mi cabeza para ver a aquella persona que efectivamente era Diane y volver a esconder mi cabeza -No esta bien... Se que no debo sentir esto, se que esta mal, pero por mas que lo intento no puedo...- dije volviendo a llorar.

-King... Esta bien... No diré nada, estaré de acuerdo contigo... Pero aun me hace falta una pregunta...- ante lo dicho me sentí aun peor, realmente lo había arruinado todo por aquella estúpida respuesta.

-Hazla... Es mas... No puedo arruinar más todo este día...- dije sin moverme.

-Gracias... ¿Quisieras tener una pequeña cita?- al terminar de decir eso sentí un cosquilleo en mis mejillas, ¿Ella hablaba enserio?.

Al decir eso levante mi cabeza con sorpresa para luego mirarle fijamente -¿Hablas enserio Diane?- ella simplemente asintió, realmente no estaba soñando, todo esto si estaba pasando, pero y si no era porque ella quisiese -Si quisiera Diane, pero ahora yo te tengo una pregunta...- yo asintió preocupada -¿Realmente lo haces porqué quieres o es solo lastima?-.

 -¿Cómo puede ser lastima?, si yo realmente quiero estar contigo, no puede ser más que cariño... Incluso algo más- respondió mirándome - King... ¿Entonces que respondes? ¿quisieras tener una pequeña cita en vacaciones?- pregunto tomándome una mano.

-Diane...- yo solamente la mire atentamente -Claro que quiero, lo mejor es que ya solo es el día de mañana de clases y podrá ser ese día- dije con una gran sonrisa, a lo cuál justo después me abrazó, eso me encanto tanto.

Yo correspondí, pero estaba tembloroso y asustado, ¿realmente tenía permitido hacerlo?, al final la abrace. El resto del día paso con tranquilidad, alguna que otra vez nos lanzábamos pequeñas miradas que demostraban poco pero a la vez mucho, pero solo se que ya estaba ansioso. Lleve a Diane a casa, pero ella se despidió de mi con una abrazó y un beso en la mejilla, yo sentí un cosquilleo en el área del beso, la cual frote levemente, ella me traía loco, Para finalizar el día corrí a casa para dormir lo antes posible y esperar a que el tiempo pasase rápidamente.

Ahora solo me queda recaudar valor para pedirle ser alfo más.

Continuará...

¿Y si te dijera que te amo? ~King~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora