-Tododeku- El demonio y el ángel. (Estado Haitus)

2do pecado: No querer apartarme de ti

Katsuki Bakugo, antes de fallecer su nombre fue "Caín", el 1er hijo de Adán y Eva, el 1er humano que causó la 1er muerte de una persona, su hermano menor; por haber hecho algo tan terrible fue desterrado del lugar y su único amor fue Bárbara al ser enviado a las lejanías, pero eso no fue su único castigo, él fue castigado en no poder volver a nacer nunca más.

A pesar de todo esto, de tan dura penitencia por lo que ocasionó, Katsuki, por alguna razón en un trabajo que un Arcángel le encomendó, de pura casualidad tal vez, un Kaio Uvácamo [Kaio/Demonio solo mientras paga sus pecados] que iba en camino al portal Aborpaza [Portal que convierte a un Kaio Uvácamo en Karitio/Ángel], terminó profundamente enamorado de él y, la belleza del Kaio rubio originó, quizá, que ese inocente decidiera quedarse por el amor que sintió y que ahora además de ser su mejor amigo y haber hecho el amor con él después de 400 años de amistad, sabía lo que sentía por ese compañero, Eijiro Kirishima, y lo que sentía aún por Bárbara, pero estaba dispuesto a encontrarla y saber que le sucedió en realidad antes de decidir quien de ellos dos es realmente la persona que ama.

Con las manos en su frente ese Kaio, que despertó en la cama de su mejor amigo, decidió no poner la excusa que ebrio pensaba decir al despertar el día siguiente, y musitó.

-Sabía que esto pasaría desde la 1ra vez que quería que... él me tocara... -, y haciendo su susurro más difícil de escuchar decidió, -Maldita sea mi idiota alma. Pero ya es hora de decirle... la estúpida verdad...

Lentamente quitó sus manos de su rostro, se retiró la cobija, y como pensó, se encontraba desnudo.

<<O por el bastardo Karitio Numan, ¿Tan pendejo me dejó tanto maldito alcohol?>>, pensó.

Se puso su pantalón y lo dobló hasta sus rodillas, y sin colocarse sus tirantes como siempre suele ser rápidamente bajó los escalones. Mientras bajaba con su mano derecha en la nuca de lo nervioso que se encontraba, logró ver al Gita [Kaio/Demonio con mando] Kirishima tomando una sencilla taza de café en su sillón, sentado de una forma que se notaba a simple vista su preocupación por lo que diría Bakugo. El Gita sintió la mirada de quien amaba y sin poder evitarlo, su vista que estaba guiada al suelo se dirigió a quien se encontraba contemplándolo.

-¡Bakugo! -, dijo mientras rápidamente dejaba su taza en la pequeña mesa frente a él.

Los pies del Rubio llegaron hasta el suelo dejando detrás las escaleras, este comenzó a aproximarse hacia Kirishima con cada paso cada vez más y más cerca de él. Eijiro estaba preocupándose, por su mejilla salió un ligero sudor y tan cerca se hacía el Kaio que dio unos pequeños pasos hacia atrás por el miedo hasta que Bakugo tomó con sus manos la mejilla y la nuca de su amigo, y sin previo aviso lo besó en los labios.
Sus ojos se encontraban ya cerrados, pero el pelirrojo de la sorpresa que no esperó los tenía totalmente abiertos de sorpresa. Los labios comenzaron a separarse, pero nuevamente se acercaron cuando Eijiro lo aproximó más a él tomándolo de la cadera y le robó el 2do beso de ese día. Después de 2 minutos, largos para ellos, se separaron un poco para tomar algo de aire.

-Eijiro tengo que decirte la verdad, y necesito tu ayuda.

-... Claro, te escucho-, dijo con una tenue sonrisa por el hecho de que lo llamara así por primera vez a pesar de que después de muchos años en que se lo pidió nunca lo había hecho.

-Yo... -, al iniciar sus palabras se colocó en el sillón, y en seguida Eijiro al lado, a pesar de seguir con algo de terror en él, -Yo tengo que contarte una larga historia, así que te advierto, no te quejes si me tardo demasiado o habrán serias consecuencias.

-E... Está bien.

-¿Sabes lo de Bárbara?

-Sí y no, solo sé que fue tú 1er amor y que como castigo por algo, que no sé lo que es, la convirtieron de nuevo en Lyopher. De ahí en fuera solo que por miles de años has estado recordándola y buscándola tanto como puedas a pesar de que sabes lo que le hicieron.