ʜᴀɴᴀʜᴀᴋɪ 🌷 || ᴘᴏᴘᴋᴇᴅᴀ [editando]

5. Parque

Empezó a toser, cerró los ojos con fuerza deseando parar con los pétalos. Los cuales caían al piso en una cantidad preocupante. Al notar eso rápidamente fue al baño y poco le importó toser en la bañera, poco a poco está se llenaba de pétalos de distintas tonalidades de rojo. Kedamono vio estoy con gran preocupación, y tapó su boca tratando de parar, lo único que logro es que empezará a dar arcadas. 

Estaba cansado de despertar, ser insultado por Popee, toser y dormir, para que a la mañana siguiente haga lo mismo y lo mismo. Estaba harto, cansado, adolorido... Estaba sufriendo sin más.

Bajo las escaleras pálido y los ojos perdidos, para ir a la cocina, y agarrar un poco de jugo. Vertió la bebida en un vaso cualquiera, con lentitud, para luego tomarlo de un trago. - Quizá... Salir me haga bien... 

A paso lento, se acerco a la puerta para para abrirla con lentitud. No se molesto en cambiarse, ya tenia una chaqueta que seria suficiente para el frio que hacia afuera, que era poco.  El viento le dio en la cara, apartando mechones de cabello que tapaban su rostro, y dándole cierta tranquilidad. Además de que adentro de su hogar estaba sofocado, se sentía encerrado y depresivo el lugar, sin mencionar que ahí mismo, en el lugar que debería considerar su hogar y el lugar donde puede relajarse, era donde mas sufría a causa de Hanahaki y Popee.

En fin, se sintió aliviado de poder respirar el fresco aire de afuera, y tenia un poco de suerte, estaba cansado, y justo había un parque pequeño en frente de su hogar, eso le gustaba de vivir ahí, era lo único. Ya que era agradable despejarse un poco e ir ahí. Claro, eso lo hacia antes, antes de descubrir que tenia Hanahaki. No se estresaba tanto antes de eso. 

Se sentó en una banca cualquiera, acomodándose para sentirse bien. Empezó a mirar alrededor, ya que  no tenia otra manera de entretenerse en ese lugar, sin embargo le gustaba admirar lo que pasaba alrededor de el. Poso sus ojos en unas pequeñas coletas rubias, haciendo que su corazón sintiera una punzada.

Estaba con alguien mas, una chica. Lo estaban atontando, y no porque le gustara. Sin duda aquella chica era su novia, Popee la apegaba a el, tomándola de la cintura y unir sus labios. Keda sintió su vista nublarse al ver como sus labios de movían al compás. Parecían el uno para el otro. Al separarse, se miraron con una sonrisa reluciente, la chica se fue, con una sonrisa de oreja a oreja, y Popee, todo lo contrario, borro su sonrisa en cuanto la chica se fue, remplazándola con un semblante serio.

"¿Acaso solo finge? ... ¿solo es un entretenimiento para el?,  pobre chica"  pensó, tratando de ignorar que el mismo se sentía del asco, no pudo evitar que lagrimas cayeran, sus mejillas y nariz se volvieron poco a poco rojas. Subió sus piernas a la banca, abrazándolas y escondiendo su cabeza entre ellas, para llorar con mas libertad, ya no tenia el peligro de que Popee lo atrapara.

¿Qué tenia de malo el? ¿no es lo suficiente para Popee?

Fue mala idea ir al parque.

Confirmó la idea de no sentirse bien en ningún lugar.