CUARENTA Y NUEVE

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Al llegar a la mansión Sakamaki, Ayato dejó en el sillón a Mizuki, no se despegó en ningún momento, excepto cuando debía cuidar a Hikari.

Raito-...Miku...-Entró a la cocina, dónde se encontraba la mujer-

Miku se dio vuelta al escuchar esa voz, y con un nudo en la garganta, el cuál estaba dispuesta a deshacer con las lágrimas, se lanzó a los brazos de aquel hombre...

Raito-...No sabes, lo mucho que te necesité -Habló contra el cuello de la peli-negra- Me hiciste mucha falta...

Miku-...Raito, yo... Yo quería venir pero... Estaba en un lugar en el que me ayudaron a mejorar mi estado físico, y... Tampoco me dejó salir... Aunque de todas formas... Yo...Lo que quiero decir... Aah... Raito...-Ya no podía seguir, el nudo se estaba desatando- Te amo mucho... -No aguantó más, y dejó salir a la Miku sensible-

Raito-. También te amo mucho...

Luego de estar un momento abrazados, se separaron y limpiaron sus lagrimas. Salieron tomados de la mano, donde estaban los demás

Subaru-. Me alegro que estén bien... Ayato me dijo quien te había ayudado... Y, la verdad es que me alegra más que estén aquí...A quién te ayuda a estar aquí -Terminó de hablar, y le dio un abrazó a la chica-

Miku-. Él me ayudó... Es pasado... Se lo agradezco mucho, pero lamentablemente, me quería para algo, en o que yo me opuse -Habló una vez que se separó del abrazo-

Kazuki-...Yo también estoy feliz de que estés aquí... Aunque, creo que alguien no lo estará tanto... -Se dio vuelta para dejar ver a Satsuki, apoyada en la pared, mientras jugaba con uno de los dorados mechones de su novio-

Miku-. Ja... Yo tampoco estoy muy feliz de tener que compartir con ella otra vez...-Se cruzó de brazos al verla-

Ayato-.¡¡Mizuki!!¡Mi amor, mirame! -Gritó emocionado, y los demás fueron junto a él, y en efecto, Mizuki estaba empezando a mover de a poco sus músculos-

Mizuki-...Ho-Hola...Ayato...

Ayato la abrazó muy, muy fuerte, pero se separó al recordar que estaba adolorida, y pidió perdón. Besó sus labios con ternura, y fueron separados por su propio hijo, quien hacía una especia de puchero, pidiendo un beso... Los demás rieron por la acción del bebé, Kanato tomó a Hideki y dejó que jugara con Daiki en el suelo, para que Mizuki pudiera siquiera levantarse del sofá

Nozomi-.¿Cómo te sientes?¿Estás mejor? -La tomó de las manos ayudándole a ponerse en pie-

Mizuki-...Si... Estoy bien -Sonrió-

Reiji-. Denle algo de espacio...-Ordenó y los demás retrocedieron un poco-

Miku-...Me alegro mucho de que estés bien...-Sonrió, y Mizuki devolvió su acción. Mientras que fue rápidamente hacía ella y la abrazó-

Mizuki-. ¡Te extrañe mucho! -Dijo mientras abrazaba a su amiga-

Miku-. Si... Yo tambien te extrañe... A todos de hecho -Rompieron el abrazo-...

Satsuki-. Raito... Estuvo muy triste ¿Sabes?¿Dónde estuviste escondiéndote, Miku? El pobre la paso tan mal... Que tuvo pesadillas, en dónde tu eras la víctima...-La rubia dejó un mechón detrás de su oreja-

Miku-...¿Ah?¿Enserio, Raito?

Raito-...Si... Pero eso ya, quedó en el pasado, ahora estás aquí... Y te quedarás conmigo ¿Cierto? -Preguntó esperanzado-

Miku-. Si Raito... Bueno lo de las pesadillas, no lo sabía...

Raito-. Miku, ¿Dónde estuviste todo este tiempo ?-Fue interrumpido y Miku no puso contestar, porque habló Mai-

Mai-. Ahora que me acuerdo...¡Debes ir a ver a tus Padres! ¡Ellos piensan que estar muerta!...

Miku-...Tienes razón...Los voy a ir a visitar... En un segundo vuelvo -Empezó a caminar hacia la puerta, pero fue detenida por una mano en su hombro-

Raito-. Yo puedo teletransportarme -Sonrió-

...

Ayato-. Mizuki... Cuando estabas peleando con Cordelia...Estabas diferente, no era nada físico pero... En ti se veía algo raro, no se como explicarte

Mizuki-. La verdad es que si, me sentí diferente... Sentí calor, mucho calor. Era otra persona... De hecho, ni eso me sentía...

Kazuki-. Quiero preguntar ¿Cómo es posible que lograras matar a Cordelia? Ella es vampiresa y tu una simple humana... ¿No es así? -Dijo desde uno de los sofás-

Mizuki-...La verdad no tengo idea... Solo se que me enojé mucho cuando amenazó con matar a mi hijo... Y eso fue demasiado y solo la golpee -Decía mientras observaba como su hijo jugaba con el de Mai y Kanato-

Kazuki-...Pues me parece muy extraño...

Subaru-. Kazuki, mejor nos dejamos de preocupar por esas cosas... Y empezamos a disfrutar... Que por fin...Estamos todos juntos otra vez, y esta vez en paz... ¿Que les parece?

Shu-...Tiene razón... Debemos dejar de preocuparnos por esas cosas... Y disfrutar... Ya bastante hemos pasado...-Abrazó por al espalda a su novia-

Satsuki-. ¿Que hora es? -Dijo mientras que Shu la abrazaba-

Reiji-. Ya debemos ir a dormir... Es de día ya...

...

Raito-. ¿Cómo se lo tomaron tus Padres? -Preguntó después de que Miku saliera del castillo-

Miku-. Pues...Se asustaron mucho, pero después de que les explicara, me creyeron...Además, mi Padre está algo enfermo... ¿Crees que... Pueda quedarme aquí, en vez de la mansión?

Raito-.¿¡Qué!? Pero Miku... Por fin estamos juntos... No me quiero volver a separar...-Suplicó, el de ojos verdes-

Miku-...No nos vamos a separar... Pero, ¡Raito! Te puedes quedar aquí... Además, falta poco para que mis Padres dejen la corona... Y ahora que estoy viva otra vez... Me convertiré en Reina -Trató de convencer a su novio-

Raito-.¿Y?...

Miku-...Que... El castillo va a ser mio... Y creo que vas a ser mi Rey... Solo si quieres...-Se acercó lentamente al chico, y lo abrazo por el cuello, mientras, él puso sus manos en su cintura-

Raito-. Mmm...¿Cómo dijiste?

Miku-. Bueno, solo si quieres...

Raito-. ¡Claro que quiero ser tu Rey! -Dijo emocionado y levantó a la chica por el aire mientras dio tres vueltas, la dejó en el suelo, y le regaló un beso-

...

Miku-. Mamá... Papá, me voy a quedar aquí... Pero, Raito se quedará aquí también...-Les dijo a los Reyes, una vez que estuvieron dentro del castillo-

Elizabeth-. Claro que si, hija...¿Él es tu novio? -Pregunto la Reina con una sonrisa, mientras que el Rey se mostraba neutro y algo molesto-

Lucas-. No digas tonterías mujer... ¿Cómo va a ser su novio?

Raito-. De hecho señor... Déjeme presentarme... -Raito hizo una leve reverencia ante el Rey- Yo me llamo Raito Sakamaki... Príncipe -Finalizó-

Lucas-...Así que eres un Príncipe...No sabia... Bueno te puedes quedar con mi hija. Pero ¿Eres su novio?

Miku-. Papá...

Raito-. Si... Soy su novio, y pienso casarme con ella... Si usted lo permite...

...

AMOR; SIGNO DE SERENDIPIA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora