AMOR; SIGNO DE SERENDIPIA

VEINTE

Raito, quedó helado ante esa respuesta... Porque no podía ser que Miku, cayera tan bajo como para estar con ese...

Él no dijo nada y solo se quedo tieso un buen momento analisando lo que él rubio dijo

Kou-. ¡¡Jajaha!! ¡¡Jajahahaha!!!!

Raito-. ¿De que te ríes tanto?

Kou-. De ti... Jaha... aaaay... Dios mio, hubieras visto tu reacción jaha

Raito-... Ehhhh

Kou-. Tranquilo Jajaja... Ella no es mi novia, solo se quedo a alojar en mi casa pero nada más que eso... Te la traje porque no quería que viniera sola

Raito-. Ahhh... Voy a bajarla

Él se acercó a la limusina, y Miku volvió para ver quien se acercaba, y al ver a Raito se bajo de esta

Raito-. Ah, Miku yo pensé que no ibas a volver... Que bueno que volviste

Miku-. Mhm... Vamos a adentro...

Se acercaron a la mansión, y ese Mukami seguía ahí en la puerta sin decir nada, ellos iban a pasar de largo por enfrente de él

Kou-. Y ¿No me dicen nada?

Miku-... Que te vaya bien...

Raito-... Oye... Enserio, gracias por traerla

Kou-. No entiendo como alguien como tu puede tener una novia así

Raito-. ¿Cómo "así"?

Kou-. Ella es linda, tu no... Ella es agresiva, se sabe defender y se hace respetar hasta por lo mas mínimo... ¿Cómo piensas convencerla para uno de tus juegos sucios?

Raito-. No me importa si no me crees... Pero Miku no es igual a las demás

Kou-. Si, eso lo tengo más que claro... El problema eres tu, eres tu el que debe cambiar... Son muy diferentes Raito

Raito-...

Kou-. Bueno... Que te vaya bien, con tu novia...

Kou se fue en la limusina y Raito entro a la casa, se fue a la habitación a buscar a Miku

Raito-. Miku...

Miku-. Dime

Raito-. ¿Te puedo preguntar?¿Por qué te fuiste?... Debe haber un motivo, y... No te preocupes por contarme tu pasado... El "Por qué eres tan reservada"

Miku-. ¿Qué quieres que te diga entonces?

Raito-. ¿Qué te molesto, como para que te fueras tan rápido y molesta?

Miku-. ¿Por qué voy a confiar mi secreto a ti?

Raito-. Bueno... Con o sin amor, nos vamos acasar, todo gracias a mi padre

Miku-... Bueno, te voy a contar... Soy, diferente... -No podía decir nada, las palabras no le salian, en su cabeza trataba de arreglar las palabras, pero nada se le ocurria-

Raito-. ¿Diferente?

Miku-. Si... Mira, siéntate y te contare mejor

Él obedeció, y se sentó a los pies de la cama... Ella estaba parada mirando a Raito, y tratando de formular las palabras que no querían salir...

Pero, ¿Quién creería que, hay vida en otro planeta? Y que son similares a las personas, pero con la capacidad de cambiar tu rostro al que se te antoje

Era realmente un problema pues no le iba a creer... Nadie creería su secreto

Miku-. Mira, yo... Mi familia... Aaahhhh....