Juro encontrarte.

-Diecinueve-

Noah

Me levante un poco agitado, tenía un leve dolor de cabeza.
Note demasiado silenció, cosa que me extraño. Decidi ir a la sala por un vaso de agua y ahí fue cuándo me di cuenta.

No había nadie más que yo aqui.

¿Donde habrá ido esa loca?

Intente recordar, quizás había ido a buscar a su amigo raro del instituto otra vez.

Pero luego recordé, me pidió dinero para ir a comprar mandado, pff con lo fácil que es pedir comida y más rápido.
Decidi ir a buscarla puesto que ya había tardado demasiado, quizás se emocionó y compró el supermercado entero.
Fui caminando, entre a varias tiendas pero tampoco la vi, ¿Si habrá venido a comprar mandado o sólo me robo?, seguí buscándola hasta que me tope con una floreria.

Y por alguna parte senti que ya había visto y estado en aquel lugar, sólo que no recordaba haberlo hecho.

Observe las flores a través del vidrio, nunca me habían gustado tanto, y menos los girasoles, pensé mientras observaba como habían unos al fondo.
Suspire, me di la vuelta para marcharme cuando un recuerdo llegó a mi mente:

Estábamos Draco y yo dentro de aquella floreria.

Vamonos de aqui, no voy a comprar nada de esto—. Le confese, el parecia estar divertido ante mi reaccion, mas no se veia con intencion de marcharse.

—Oh, si que lo haras, ¿por el pacto?, ¿no?.—. Siguio burlandose de mi.

—No es necesario. Hablare con ella.

—¿Ah si?—. Sonrie divertido.—¿porque te preocupa tanto?. Hazlo por el pacto amigo...

Seguí hundido en aquel pequeño recuerdo, ¿porque vinimos aquí?, ¿y sobre quien estaba hablando? ¿Un pacto?

Imposible.

A Draco lo conocí hace poco, o al menos mis recuerdos con el.

Frunci el ceño, ¿que estaba pasandome?.

Seguía en aquel estado de sorpresa, mientras me quedaba ahí parado intentando recordar.

—¿Esta usted bien?.

Me preguntó por detrás alguien. Reconocí que era la voz de un hombre.

—Am, si estoy bien.—Respondi sin siquiera mirarlo. Retome mi posición, ya que anteriormente parecía que estaba paralizado.

—¿Esta seguro?.

Me giro para observarlo y responderle que si estoy bien pero...

Su rostro me parece tan familiar..

Otra vez esta maldita sensación de que lo conozco.

—¿Ocurre algo?—Me cuestiona pero debido a que me quedó analizándolo el se comienza a poner demasiado nervioso.

—No, sólo que...—Iba a decirle que me resultaba conocido pero mejor me calle.—No es nada.

Me di la vuelta otra vez con la intención de marcharme.

—Eres...¿Ian? ¿No es asi?—Vuelve a hablarme haciendo que me detenga en seco.

¿Entonces, me conoce?

—Perdona, ¿Nos conocemos de algún lugar?.

El sonríe al notar mi confusión.

—Te he visto pelear, has sido muy reconocido en Bernet.