-Veintisiete-

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Laila

—¿Tu...eres una bruja?.

Depronto el silencio reino. Todos nos quedábamos inmóviles, como aquel juego donde te dicen que si te mueves perderás. Pero esto no era un juego, era real.

—¿Que-que...dices?—Cuestione.

—¿Acaso escuchaste lo que hablábamos...

—¡Julieta!—Exclame.

—¿Pero...es que el no lo sabe?

—¿Saber que?—Pregunto este sintiéndose desorientado.

—Nada.—Observe mal a Julieta, siempre metiéndome en apuros.—Lo que pasa es que, jugábamos, sobre que nos disfrazaríamos en halloween.

—Aun falta mucho. —Expreso el.

Mierda, sabía que no estaba creyendoselo, y además yo era pésima mintiendo.

—Yo mejor me voy...

Quise tomar del brazo a Julieta para que no se marchara pero no la alcancé ya que corrió lentamente a las escaleras. Y desapareció, dejándome a solas con Noah.

—Odias que te mientan, odias no poder saber y recordar nada.—Se acerca hacia mi.—Y aún así, ocultas cosas como estas.

—¿En realidad lo recuerdas todo?

—¿Es todo lo que te preocupa? ¿Si recuerdo o no?

—¿Estas molesto?

Sus ojos me observan duramente.

—¿Se supone que estaría feliz? Estuviste en peligro, y yo nisiquiera sabía acerca de ello. Mucho menos que me relacione con esas personas.

—¿Cuales personas? ¿Las que secuestraron a Max? ¿Las conoces, o mejor dicho...lo conoces?

El tomó un poco de aire.

—Y no pretendiste decirme nada...

—¡Dime!—Me levante de la silla y me coloque enfrente de el.—¿Lo conoces a el?.

El me mira extrañado, pareciera que en cierta parte no me entiende.

—¿Tu si quieres que te diga todo? ¿Crees que lo mereces?

—¡Noah, no se trata de eso, es importante.!

—Y explicarme las cosas no es importante, sabes cuanto estuve tratando de recordar. No me molesta saber que ya te conocía, me molesta que supieras todas esa cosas..,—Se frota el cabello frustrado.—Si te pasaba algo, yo nisiquiera lo sabría.

—Lo único importante aquí, eres tu Noah.

El negó rotundamente.

—Eres tu.—Hace una pausa.—Si yo desaparezco ahora, pero logró quitar de en medio a aquellas personas que buscan destruirte, entonces me iría en paz y feliz, te desearía que tengas una excelente vida, con alguien que sea normal.

Suspire, aún así, no podría hacerlo, incluso en este momento agradezco que tengamos el pacto uniéndonos.

—No podría hacer eso, Jamás. Además...hay un pacto que debo cumplir, si no te tengo en esta vida sería en la otra, ¿Lo recuerdas?—Utilizo sus propias palabras.

Acaricia mi cabeza entre sus manos. Como si estuviera apuntó de decirme algo pero no lo hace.

Nuestras miradas se cruzan, quisiera detener el tiempo y deleitarme con aquel color tan intenso de sus ojos.

Depronto la puerta se abrió bruscamente.

Un aire profundo entro, mucho más profundo que antes. No es cuando sentí esa presencia en casa de Noah. Esto es más bien la presencia que sentía con Dylan.
Como si alguien te observará desde los lugares más oscuros.

Juro encontrarte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora