Males De Vida-Aiteda

5-Leire

-¿familia de Aitana Ocaña?
-¡aquí!- contesta Luis levantándose, y seguidamente Ana
-vengan conmigo

Ana y Cepeda siguen a a la doctora, hasta el despacho donde anteriormente entró Cepeda solo

-Aitana está mejorando, es impresionante, hemos visto que cuando usted, señor Cepeda, cuando le cogió la mano, empezó a mejorar, poco a poco mejora mucho, ya no necesita la máscara respiratoria, pensábamos que iba a tardar más, pero ya vemos que no, que a sido como- busca la palabra perfecta- ¡magia! Pensamos que despertará en 2 o 3 dias, tiene un brazo roto, nada más, a tenido mucha suerte, dentro de un rato os llamaremos y podréis entrar a verla, estamos muy contentos
-gracias, no nos esperábamos esto- responde Ana
-les acompañó

-¡está loca por ti!
-Ana, cuando despierte querra dejarme, y si, ¿no crees que la vamos a hacer pasar vergüenza?- pre
-yo también lo he pensado, será como obligarla a desnudar sus sentimientos
-¿no crees que será mejor no decírselo?
-¿y arriesgar a dejarte para siempre? ¿estas dispuesto?
-me parece lo mejor, para ella
-lo hablaremos
-no hay nada que hablar
-¡Cepeda! ¿quieres que se enfade aún más por no decirle eso?
-no saldrá nunca
-toda su familia lo sabe, ¡todos lo sabemos Luis!
-¡déjame tranquilo Ana por favor!- empezando a llorar- esto es difícil ¿vale?

Ana acaricia en modo de ánimo la espalda de Cepeda

-no te preocupes Cepeda, pero hay que hablarlo con todos, ¿ya lo saben Miriam y mimi?
-no, ¿podrías llamar tu a mimi y yo llamo a Miriam?
-se van a enfadar por no habérselo dicho antes, Cepeda
-ya lo se, pero no estaba preparado
-lo entenderán, seguro
-eso espero

Cepeda marca el número de Miriam. Sabe perfectamente de la regañina que se va a llevar. Pero no podia, no podia asegurarlo tan pronto a tanta gente.

No quería que todo se hiciera tan realidad.

Tan pronto.

-¡hombre Cepeda! ¡si parece hace un siglo que no me llamas! ¿qué tal todo?-animada
-Miriam- apagado- Aitana a tendió un accidente de coche, anoche
-¿y cómo no me lo dices antes Luis?
-no podía Miriam, lo siento, no quería que se hiciera tan realidad, tan pronto, espero que me entiendas Miriam
-estoy allí en cinco minutos
-gracias

Ana va con Cepeda

-¿y?
-se a enfadado un poco, pero lo a entendido
-Te lo dije Cepeda
-¿y mimi?
-lo a entendido, viene ahora
-Miriam también
-¿preguntamos si podemos entrar? Tu el último que me descontrolas a la niña y luego no nos dejan verla- bromenado con lo último
-¡anda calla!

Ana y Cepeda van a la recepción

-Hola, nos dijieron que en un tiempo podríamos entrar a ver a un familiar, ¿nos podría decir si podemos verla Ya?
-ahora os lo miro

La señora teclea en el ordenador

-todavía No, en unos cinco minutos vendrá la doctora y os llevará, creo que será de uno en uno, pero ya os lo dirá la doctora
-vale muchas gracias
-no hay de qué-le dedica una sonrisa algo cansada

Cepeda mueve su pierna nervioso

-¿te quieres quedar quieto Ya?
-¡No Ana, No!
-No hay quien te entienda Cepeda, necesitas fumar, toma- dándole un cigarro- te vendrá bien
-ya sabes Ana, la falle una vez, pero no pienso hacerlo dos veces
-¿quieres irte a dar una vuelta y yo espero?
-No, quiero estar aquí
-te vas a volver loco Cepeda
- Ya estoy loco, loco por ella

Y si lo Esta. Se muere por cada cachito de Ella, por cada centímetro de piel, y cada segundo de conversación, No discusión. La ama, está loco por Ella, y quiere estar loco por ella toda la vida, y está seguro que será así, quiere que sea así, desea que sea así

-¿qué eres? ¿poeta?
-que tonta eres Ana

Siguen esperando. Cepeda nervioso. Ana con paciencia que no suele tener, y ahora mucho menos. Su "hermanita" está malita, debería estar en su casa con Marcos y Leire, Pero Marcos lo a entendido a la primera, y a Leire le cuesta

-¿mirar quien está aquí?- dice alguien entrando por la puerta
-¡Marcos!
-¡y Yo!- bufa una niña pequeñita
-¡mi niña!- cojiendola- ¿qué tal en el cole mi vida?
-bien
-¿ y con papá? ¿has merendando?
-bien, hemos venido para que meriendes con nosotros- explica Marcos sentándose junto a Ana y Leire
-¿qué le pasa a el Tito?- susurra Leire al odio de Ana
-La tita Aitana está malita, y el está triste por eso- susurrandole y Al final darle un beso
-¿la tita se pondrá bien?-susurrando
-si cariño- no susurrando tanto
-¡Tito!

Consigue llamar la atención de Cepeda

-la tita se va a poner bien y va a poder seguir jugando con nosotros a las muñecas
-muchas gracias Leire
-¿quieres un abrazo?

Cepeda abre los brazos y la pequeña abraza a Cepeda

-¿mejor?
-si, no te preocupes el tito Luis está bien
-¿y la tita amaia? ¿y el tito Roi? ¿vendrá con una de sus novias?

Cepeda intenta no reír con lo último, se le ve venir que se iba a traer a una tipa totalmente desconocido para los amigos, y iba a ir de buenas como si fuera totalmente normal que traiga a una chica diferente por día. Es demasiado típico como para ser real, pero todos tienes esperanzas de que su amigo cambiará y podrá encontrar a su alma gemela, en vez de utilizar a las pobres chicas

-no pueden venir ahora amor, pero mañana si
-Leire cariño, mamá no puede venir, pero luego venimos y vamos a cenar, despidete
-¡adiós mama! ¡te quiero!

La pequeña se levanta y se pone delante de su tito

-la tita sólo tiene un constipado- dice Leire con el dedo incide el la cara- se va a poner bien

Cepeda le sonríe y la coje para abrazarla

-Aitana te quiere mucho Leire
-¡y yo! ¡a ti y a la tita!
-y no sabes como me alegro, ve con papá pequeña
-¡adiós!- despidiéndose con la mano

La pequeña se va, le a mejorado el ánimo a Luis

-¿familia de Aitana Ocaña?
-aquí- contesta Ana levantándose y continuación, levantarse Cepeda
-acompañarme

Llegan, una vez más, a el despacho de la doctora

-tenemos que decirle algo importante
-adelante- dice un Luis muy serio
-Aitana está embarazada