→Capitulo 1←

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Sonó la alarma avisándome que otro día más había comenzado. Me estiré tirando un bostezo teniendo cuidado al quien tenía a mi lado durmiendo, me levanté dirigiéndome al baño.

Una vez allí comencé hacer mis necesidades, lavé mis dientes y mi cara.
En mi armario busqué ropa cómoda para andar en la casa ya que era fin de semana y no tenía trabajo.

Me dirigí a la cocina para preparar el desayuno, que era café y unas tostadas.

Al ya tener todo listo sobre la mesa, escuché pasos por el pasillo, Jungkook apareció con el pelo alborotado mientras bostezaba y estiraba sus brazos, aunque tenga treinta años aún seguía teniendo ese aporte tierno y juvenil cuando éramos jóvenes.

—Buenos días, mi amor—Jungkook se acercó rodeándome con sus brazos y me dio un pequeño beso en la boca.

—Buenos días, cariño—sonreí, Jungkook se sentó mientras tomaba un sorbo de su café.

—¿Porque te levantaste tan temprano?, podríamos haber dormido un poco más— habló mientras revisaba su celular.

—Quería prepararles el desayuno— respondí sentándome al lado de él.

Dejó de mirar su celular para sonreírme y darme otro beso, pero esta vez duró más;  nuestras lenguas abrieron paso, Jungkook me atrajo más él para profundizar el beso pero una tos desde las escaleras hizo que nos separemos rápidamente.

Con nuestras respiraciones un poco agitadas miramos a SaRa que estaba mirándonos con cara de asco o algo parecido.

—Haré de cuenta que no ví eso—habló acercándose hacia la mesa, sentándose.

Apreté mis labios para retener una risa, mientras que Jungkook se puso un poco rojo de la vergüenza ya que SaRa nunca nos encontró en una situación así o eso creo.

—¿Como dormiste?— le pregunté a SaRa que estaba en silencio tomando café.

—Bien— susurró un poco con la mirada perdida.

—¿Sucede algo?—preguntó ahora Jungkook.

Negó tomando otro sorbo de café. Pero sabía que algo le pasaba, ella normalmente no es así de callada a las mañanas.

Un silencio incómodo se apoderó del lugar, así que encendí la radio para aliviar el momento.

Las lluvias seguirán por las ciudades de New York, a si que lleve un paraguas si saldrá a algún lado este fin de semana...

De repente el celular de Jungkook comenzó a sonar, este al ver el número pude ver que se tensó y con algo de duda respondió.

—¿Hola? —su rostro mostraba miedo pero trataba de no hacerlo notar, pero ya lo conocía perfectamente. Tanto SaRa como yo mirábamos a Jungkook atentas.

—¿Que?— Jungkook se levantó alarmado con el ceño fruncido.

Me levanté también viendo a Jungkook, este  solamente prestaba atención a la persona que la estaba hablando. Suspiró, un bulto en la mejilla se notó, claramente está molesto.

—Esta bien, mañana a la noche estaré allí—Después de decir aquello colgó, su mirada estaba perdida en su celular, me acerqué a él y toqué su hombro para que me mire.

—¿Sucedió algo?— pregunté preocupada. Él me miraba con sumo miedo y en su cuerpo notaba lo nervioso que estaba.

—Tenemos—hizo una pausa para respirar y soltar un suspiro, en eso desvío su mirada de mí aún así no aparté la mía y seguí mirándolo fijamente—tenemos que volver a Corea.

—¡¿Que?! —SaRa se levantó de repente mirando a Jungkook con expresión de confusión y sorpresa.

En ese momento mis labios temblaron levemente mientras miraba a Jungkook esperando que fuera una broma lo que dijo. Pero al verlo igual que yo supe que no era así.

Si bien, le pedí a Jungkook vivir a otro país para poder despejarme de la muerte de Yoongi. Después de casarnos decidimos irnos a vivir a EE.UU, donde hicimos una preciosa vida junto a SaRa, Yoongi quedó como un recuerdo lejano de la cual está guardado en mi corazón; y viviendo aquí, otra vida, otro ambiente, Yoongi quedó como mi pasado oscuro pero luminoso al mismo tiempo.

—¿P-porque? —cuestiné tratando de que mis ojos no se volvieran llorosos.

Jungkook volvió a sentarse, tratando de relajarse.

—La empresa esta hecha un desastre, se acumuló una deuda grande y tu hermano ya no puede hacer más y está buscando ayuda para poder al menos calmar el gran lío—agarró nuevamente su celular tecleando un número y llevárselo a su oreja.

—No puede ser— SaRa se levantó molesta yéndose a su habitación.

Aún seguía estática en mi lugar, sin poder creer bien volver al lugar donde pasé muchas cosas. Tal vez este dramatizando mucho pero volver allí es volver abrir heridas que estaba completamente curadas o eso creo.

A pasos lentos me encaminé a nuestro habitación, tratando de pensar. Eso significaba volver a ver a mis padres después de 18 años, volver a ver a mi hermano, tal vez volver a ver a mis antiguos amigos, volver a recordar todo una vez más.

Sin darme cuenta unas cuentas lágrimas empaparon mis mejillas, este sentimiento de dolor ya no lo recordaba, no era como ese dolor cuando discuto con Jungkook, o cuando en un momento tenso con SaRa, este dolor era de un corazón ya roto que de a poco se fue reconstruyendo, pedazo a pedazo.

El sonido de la puerta abrirse hizo que rápidamente secara mis lágrimas, sorbe por la nariz y bajé mi cabeza.

—Amor— Jungkook se agachó a mi altura y con su mano hizo que levantara mi rostro para poder mirarlo, su expresión fue tristeza pura al verme.—Sé que te duele esto, pero tienes que soportar, será unos meses hasta que la empresa esté en condiciones y volveremos de nuevo. Tranquila que estaré contigo ¿Si?— se acercó para darme un beso totalmente cariñoso.

—Ya se me pasará. Solo que la información fue repentina y no estaba preparada para afrontarlo.

—Esta bien, prometo hacerte sentir bien cuando estemos allí—Sonrió dejándome ver sus preciosos dientes.

—Esta bien— Sonreí con pocos ánimos.

—Prepara la maleta, mañana a la tarde estaremos partiendo, iré hablar con SaRa— Jungkook me dió otro beso pero corto y se marchó de la habitación.

Vaya fin de semana.

﹏♨﹏

Primer capitulo!!!  Lo que se viene 7u7

Espero que les haya gustado este comienzo... 










I Need U ||Yoongi||COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora