La Segunda Oportunidad.

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se retorció sobre el frío suelo, el dolor que sentía por primera vez en la vida era fulminante, delirante e incluso grotesco. 
Se preguntó mil veces que era lo que había hecho mal, ¿por qué la había engañado de tal modo?. nunca supo si el era un tipo de Karma o algún tipo de escarmiento por haber sido tan ilusa.
El dolor que el provocaba en aquella chica no se le deseaba a nadie, ni siquiera al peor enemigo.

¿Por qué el amor es así?, no querida, el amor no es así, en realidad no es de ningún modo... La personas le damos sentido y le damos la forma que nos apetece, sí es frío, frío será, si es cálido, cálido será... Pero ambos duelen. ¿ Y cuándo dejará de doler?.
Pronto, cuando tu descubras qué el no valía la pena y tú no eras para tan poco... Pero lo amo, lo amo mas que a nada en este mundo... No, tu no lo amas mas.

...

dejó las compras en el suelo, tambaleándose un poco por sujetar bastantes bolsas con ambas manos. Se recargó un poco de la pared para retomar aire en lo que lograba descansar.
Está etapa de soltera volvía a pasar de nuevo, aunque no estaba muy acostumbrada, sentía que le hacia falta tener un descanso del agetreado mundo del amor.
Cerro los ojos un poco, había logrado olvidar el dolor cuando se mantuvo ocupada de las compras. ¿ Por qué tuvo que terminar así?, ellos habían sido mas que simples novios, había hecho ya una vida juntos y le resultaba difícil volver a lo solitario, joder, si sólo el se acordara de cuando eran felices, de cuando caminaban de la mano e iban riendo por ahí.
Sacudió la cabeza y se despegó de la pared, no era bueno para ella mantener los recuerdos porque sólo lograban lastimarle...
Cerro la puerta y volvió manos a la obra. Acomodo las compras en sus respectivos lugares y decidió comer un snak antes de preparar comida.
Se sento en el sofá, encendió la tele y la música de fondo le hizo suspirar.
Ese canal de videos populares, la canción, donde dos enamorados lucían felices y libres... Decidió cambiar de canal.
pensó en sí realmente fue feliz en la relación, quizá ella se había encaprichado solamente con él, simplemente porque había estado tanto tiempo sola o sus antiguas relaciones no habían sido lo suficientemente importantes para marcarle así.
Recordó cuando viajaron al Caribe, aquellas playas de ensueño que fueron testigo de cómo se amaron en todos lados. ¿Entonces si habían sido felices porque no estar juntos?.

— ella no me gusta tanto.
La voz sonó segura detrás de aquella puerta, aquel chico mantenía una conversacion con alguien más, hasta ahora desconocida para ella.
—¿ por qué sigues ahí entonces?.
La voz sonó en el alta voz del aparato telefónico y hubo un silencio pesado.
— no sé, quizá es porque me siento solo y ella logra distraerme, tenía miedo de pasar estas fechas solo, ya sabes, no han sido días buenos para mi y al menos ella me distrae.

Un silencio profundo hinundó el espacio dentro de aquel pequeño estudio.
Malani cerró los ojos tratando de no hacer ningún ruido para no ser descubierta.
Había logrado escabullirse a aquel sitio con la ayuda del vigilante. Le había costado trabajo porque eran accesos muy exclusivos y casi nunca dejaban entrar personas que no portaran gafete.
La empresa de automóviles del cual, la familia de Edmond era dueña y la punta en la cúspide de la tecnología automotriz.
Malani estaba ahí porque le quería dar una sorpresa a su novio, el cual, era de ensueño. Alto y una cara de dios griego. Un sueño para cualquier chica.

La silla del castaño rechinó un poco cuando se reclinó despacio hacia atrás y el chico miraba el techo, hablando relajado.
— de cualquier modo, me haré cargo de la situación terminando el mes. Ni ella ni yo merecemos estar en un lugar tan tóxico... Joder ella es tan tóxica.

Malani se llevó una mano a la boca y cerró los ojos. Aquel dolor nunca lo había experimentado de tal forma, ni siquiera un dolor de muelas se comparaba al haber escuchado aquella cosa.

ONE SHOTS || HARRY STYLES || LIBRO 2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora