Double - Camren.

Veintiuno.

—Sé que tengo veinte y que no pueden recibirme pero por favor... sólo esta noche - Un chico rubio estaba al pie de la puerta completamente empapado, su fino rostro presentaba golpes y sus ojos mostraban una profunda tristeza para la opinión de Annie —No sé a quién más acudir - El chico se estremeció.

—Entra - Lauren dijo apenas vio el estado del chico si bien, no sabían si era de confianza pero Lauren estaba segura que con todos los golpes que se mostraban en su rostro no era amenaza alguna, por lo pronto —¿Quién eres? ¿Qué ocurrió contigo? - Annie y Lauren ayudaron al chico a caminar hacia la cocina y sentarse en un banquillo.

—Mi nombre es Troye... - Lauren cubrió su rostro cuando notó cómo Troye miraba fijamente su cicatriz —Mi padre me golpeó y huí de casa - Se limitó a decir.

—Soy Lauren Jauregui y necesito que seas más especifico si quieres nuestra ayuda.

—Sé quién eres... me ocurrió esto por tu culpa y la de Camila Cabello - Lauren se tensó —Lo siento... tengo muchos problemas por que soy muy directo... - Aclaró su garganta —Les defendí frente a mi padre cuando él comenzó a decir que eran una aberración y que estaban completamente locas si creían que les apoyaría económicamente "Asquerosas lesbianas, desviaran a todos esos niños".

—Bueno nadie está obligado a aportar ayuda alguna pero, ¿Cómo se enteró tu padre de nuestra asociación? -Era irrelevante lo que ese señor pensara de ella y Camila.

—Shaun Mellet.

—¿El Juez federal? -Lauren jadeó.

No necesitaba respuesta, ese hombre se había mostrado muy incómodo cuándo le invitaron a ser partícipe del evento que se llevaría a cabo el fin de semana, no terminaba de entender cómo había sido capaz de golpear de aquella manera a su propio hijo.

—Él se enfado por que le pedí que acudiéramos al evento pero, realmente lo que lo mandó a la mierda fue que le confesé lo mucho muy gay que soy - Sonrió pero se arrepintió al instante pues había lastimado uno de los golpes —Él sólo me estaba dando "Una lección" para que se me quitara lo marica.

—¿Qué pasa aquí? - La voz somnolienta de Camila sonaba —Aún no está el sol, ¿Por qué están despiertas? - A Troye se le lleno el corazón de ternura al ver cómo Camila refregaba su ojo izquierdo, ¿Realmente su padre creía que una cosa tan tierna cómo Camila era una aberración?

—Hola soy Troye - Agitó un poco la mano.

—¿Quién te hizo daño? - El ceño de Camila estaba bastante fruncido de un segundo a otro.

—Creo que dejaremos las preguntas para el amanecer... - Annie sonrió con calidez a Troye —Ven cielo... necesitas una cama y descansar.

Una vez desaparecidos Annie y Troye, la ojiverde se giró hacia Camila quien seguía con la mirada perdida en las escaleras.

—¿Puedo dormir contigo? - Había sido Lauren la que por primera vez pedía aquello, siempre era la morena quien deseaba dormir cerca de su novia.

—Eh... - Camila movía sus dedos con nerviosismo —Me muevo mucho cuando duermo... no te dejaría descansar - Lauren achicó los ojos.

—Mentira - Ya le había dado suficiente espacio —Basta de este juego tonto Camila, deja de ignorarme, deja de evitarme.

—No te estoy...

—¡Sí lo haces! Ni siquiera puedes estar en la misma habitación que yo por más de cinco minutos, estás haciendo justo lo que Karla quería - Camila se tensó al escuchar el nombre de su gemela —Ya me cansé de repetirte que sólo fue un maldito correo el que me envió, que no hablo con ella ¿Cómo podría hablar con la persona que me hizo daño? - Lauren pasó una mano por su nuca completamente irritada —Te amo Camz... eso no lo dudes por favor.