El Cisne y la Bestia Negra {YoonMin} [Omegaverse]

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-¿Qué haces, raro?- Taehyung entraba a la habitación de su hermano, y como casi siempre, estaba mirando a la ventana. Jimin sabía que Taehyung sabía lo que él miraba.

La casa de los Min.

Ya habían pasado dos años desde que esa familia de cambia formas pantera negra se habían mudado, y en ningún momento, en ninguna reunión, o charla, había podido sacar su curiosidad sobre esa familia, y sobre todo ese niño... YoonGi le daba una extraña sensación, como si...

-Voy a ir a estudiar con Jungkook, puedes aprovechar de venir conmigo para calmar tus ansias de YoonGi.

Jimin lo miró furioso.- ¿Mientras tú calmas tus ansias por Jungkook? No gracias.

Taehyung rió, Jimin podría tener 8 años, pero definitivamente era muy inteligente.

-Oh vamos, nunca socializas con ellos.

-Son... raros.

-Son panteras, hermanito, no tengas miedo, no van a comernos, vamos.

Jimin no tenía miedo de eso, lo contrario, le parecía muy intrigante, y eso le estaba carcomiendo el estómago. Nunca había ido por voluntad propia a casa de los Min, pero... ¿qué es lo peor que podría pasar?

-Sí, vamos.

-¡TaeTae! Y... ¿Jiminnie? Que sorpresa, ¿vienes por YoonGi?- Jungkook les abrió la puerta de forma eufórica, recibiendo como siempre a su compañero cisne para estudiar y de manera sorpresiva a su hermano menor, que Jungkook presumía les tenía algo de recelo.

¡Pero Jimin era tan bonito! Tenía la gracia propia de un cisne, y un rostro hermoso, cuando creciera estaba seguro de que sería perseguido por muchas omegas locas, si es que era Alfa, por supuesto, eso lo descubrirían cuando estuviera alcanzando la pubertad.

Así como Jungkook era un Alfa al igual que Taehyung, y ambos eran como mejores amigos, con la excepción de que hace dos años cuando se conocieron, sintieron esa burbuja asfixiante de atracción momentánea, y eso lo habían convertido en una amistosa relación.

-Hola Jungkookie, buenas tardes, ¿está YoonGi? Jiminnie vino a jugar con él.- sonrió Taehyung.

Jimin, que estaba sosteniendo su mano, la apretó, Taehyung quería reírse un poco, pareciera que su hermano menor se estaba arrepintiendo.

-Claro, entren por favor.- Los cisnes entraron a la casa de las panteras negras, Taehyung ya estaba acostumbrado al ambiente tosco pero elegante del lugar, en cambio Jimin, aún no se sentía del todo cómodo en un ambiente tan poco iluminado y de paredes oscuras, el marrón y amarillo en cerámica hacían destellar todo el lugar, no como su luminosa casa, mucho blanco y decoraciones en negro.