Trabajando para un demonio (Crocodile x Reader)

Capítulo 41: Poco a poco

NARRA AUTORA

-El tiempo fue avanzando lentamente tras aquel suceso con Kurohige y muchas cosas terminaron cambiando de forma radical. Apenas llegaron al hospital, ___ y Crocodile fueron tratados de emergencia; el emperador tenía una costilla rota y otra fracturada, una bala alojada en el brazo y otra en su pulmón izquierdo... Si el proyectil hubiese pasado cinco centímetros más hacia la derecha, no habría sobrevivido. Por su parte, la Bujar estaba llena de hematomas que irían desapareciendo con el paso del tiempo, pero aún le quedaban aquellas heridas de su corazón que tardarían bastante en cerrar... Si es que llegaban a hacerlo algún día.-

Crocodile: Oye, ___.

___: Dime.

Crocodile: ¿Te gustaría que nos tomásemos la semana libre y fuésemos a la playa?

___: ¿La semana? ¿Por?

Crocodile: Para festejar tu avance en terapia.

___: Pero las compañías...

Crocodile: Estarán bien sin nosotros unos días. Además, Marco y Doffy se harán cargo de cuidarlas mientras no estemos.

___: ¿Doffy? Pero si él es nuestro mayor competidor...

Crocodile: No le hará nada a la compañía desde adentro. Además, Ace se encargará de vigilarlo junto a Luffy.

___: Creo... Que estaría bien.

-Tras las palabras de ___, Crocodile se acercó a ella y besó con cariño su frente para luego volver a su oficina. Estar trabajando les ayudaba a mantener la mente despejada de los malos recuerdos; como la Bujar aún se sentía bastante insegura y mal consigo misma, el emperador le permitió llevar a Ökami a la compañía de Baroque Works. Si bien ella seguía siendo una emperatriz de la competencia, no habían cortado lazos laborales con su pareja. Para administrar bien su tiempo, alternaba días entre ambas compañías.-

___: Ökami... ¿Qué crees que debería llevar...? Es cierto que quiero ir... Pero no quiero que vea... Bueno, ya sabes... Los moretones.

-A pesar de todo ese tiempo, ___ seguía viendo hematomas que desaparecieron hacía bastante de su piel... Pero eso ya no era algo que pudiera controlar... Después de todo, tenía constantes pesadillas sobre lo ocurrido con Teach, las cuales terminaban con Crocodile calmándola durante el resto de la noche. El can, al oír a su dueña pronunciar su nombre, levantó la cabeza y comenzó a mover su cola amistosamente.-

___: ¿Crees... que me odie por lo que pasó...?

-Sabiendo que su ama estaba por entrar en una crisis nerviosa, se levantó y caminó hacia ella para terminar apoyando su cabeza en la pierna de ___. Al tener más de dos años, ya sentía sin problemas cuando alguien necesitaba de él... Se había convertido en un hermoso Husky que transmitía seguridad a la chica de ojos ___ (c/o).-

___: Supongo que tienes razón... Croco es demasiado amable y atento...

-Con cariño, la chica fue acariciando suavemente por detrás de las orejas del can hasta sentirse más tranquila... Realmente se sentía agradecida que Crocodile le hubiera dejado adoptarlo cuando apenas tenía un mes de vida... ¿Tanto tiempo había pasado desde su primera cita? Los años pasaron tan rápido que no se había dado cuenta... Pero eso también significaba que su pareja estaba muy cerca de los cincuenta, y ella de los treinta.-

___: Nos hacemos viejos, Ökami...

-Muchos podrían sentirse tontos al pensar en que ella comenzaba a preocuparse por la vejez teniendo casi treinta... Pero aquellos contantes encuentros con la muerte provocaron que se diera cuenta que la vida era demasiado corta y fácil de perderla... Un pequeño objeto de metal es capaz de arrebatarte el futuro... Tanto como el filo de un cuchillo... Aún le costaba creer que Teach y los demás habían desaparecido tan rápida y fácilmente... Siendo que eran sus mayores enemigos.-