Tenías que ser tú.

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Veía embobada ese monitor y aunque aún era una pequeña semilla, era un pedazo de Sasuke.

En nuestro noviazgo fugas, siempre nos cuidamos evitando concebir un hijo, ya que ambos éramos muy jóvenes, pero ahora al pasar el tiempo, me agradaba mucho tener dentro de mi algo tan importante para él, me sentía feliz, limpiaba mis lágrimas y ahora era tiempo de anunciarlo a los felices padres..

Sentía un sabor amargo, pero así eran las cosas, en unos meses este bebé sería de ellos y yo me iría lejos. Después de cambiarme y llegar hasta ellos..

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Habían pasado varios minutos y estaba impaciente por saber la respuesta. Sasuke parecía leer el periódico, pero estaba intranquilo lo conocía muy bien, aunque disimulara. Kakashi revisaba el celular y justo ahí se abría la puerta..

La doctora Ayame y Hinata llegaban muy sonrientes y..

—Muchas felicidades matrimonio Uchiha, viene un bebé en camino..

Esas palabras me alegraban, por fin podría cumplir el sueño de mi suegro, pero un nudo en mi garganta se formaba «¿Por qué no era yo quién llevaba ese niño en mi vientre?» Aunque pareciera absurdo, yo deseaba ser esa portadora..

Pero no era así, las lágrimas querían salir, pero una escena que no esperaba me dejaba anonadada ¿Qué significaba eso?

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Hinata sonreía y ahí escuchaba esas mágicas palabras, un hijo veía en camino y quién me daría ese regalo era ni más ni menos que mi Hime. La alegría me inundaba, mis pies se movían solos, llegaba hasta Hinata y la abrazaba muy fuerte, perdiéndome en su olor..

—Gracias Hinata, sabes esta noticia me hace muy feliz nena— se lo susurraba y aunque ella no fuera su madre biológica, para mí sería el mejor regalo que me podían dar en la vida y al separarme de ella, Hinata parecía sorprendida por mi acto y no solo ella todos los presentes..

—Mi corazón latía tan fuerte, no sé si era por la noticia o el abrazo, pero al saber la verdad, Kakashi me miraba sorprendido, tal vez no solo por la noticia, si no por el acto de Sasuke, que lejos de acelerar mi corazón como loco ¿Por qué me abrazaba? Acaso no sé daba cuenta que eso estaba mal, que nos ponía en evidencia a los dos, su olor me distraía, pero reaccionaba por instinto y hacía lo único que podía hacer— D-de nada señor Uchiha, felicidades a ambos... —les sonreía y..

Tenía que volver en sí, pero me estaba cansando de fingir, pero..

—Caminaba hacia Sakura, la abrazaría para que no sospechara, sé que era una tontería mía, era obvio que a esa mujer no le caía nada bien, pero tenía que salvar a Sasuke y a mí también— y al llegar con ella y acercarme..

—¿Qué te pasa? No me toques— al observar a Sasuke —ahora te toca cuidarte mucho más y seguir todos las indicaciones..

—Su acto me sorprendía, por suerte me había podido sostener de una de las sillas por "el empujón" involuntario, ¿Acaso no estaba feliz con lo que ella planeó?

—Señora Uchiha, no se preocupe, el bebé viene bien, pero para que estén más tranquilos cuando llegue lady Tsunade la revisara, cuídate mucho Hinata y no olvides tomar el medicamento que te recete..

—Agradecía a la doctora Ayame por todo ante una fría mirada de Sasuke hacia Sakura, eso no significaba nada bueno.

[...]

Volvíamos a casa muy emocionados por la feliz noticia, estaba ansiosa por contárselo a todo mundo en especial a mi suegro. Por fin podría cumplir mi papel de señora Uchiha, aunque aun así no dejaba de sentir tristeza..