Valmar

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La profesora Sprout anunció que la clase había terminado, él y sus compañeros recogían sus cosas y salían del aula de herbología. Valmar no se fue hasta despedirse de la mentora con una sonrisa. Le gustaba mucho esta clase, las plantas del mundo mágico le parecían interesantes, aunque en realidad le era difícil decidir cuál clase le gustaba más. En todas era bueno y ninguna le parecía aburrida, podría decirse que era lo que mucha gente llamaba un nerd. Le encantaba estar aprendiendo cosas nuevas, su buena memoria le ayudaba a recordar hechizos complicados o recetas de pociones que aún no hubiera preparado, por todo esto su lugar favorito en el castillo era la biblioteca, ahí tenía todas las herramientas que necesitaba para convertirse en un gran mago, y era justo ahí a donde ahora se dirigía.

Después del incidente que había pasado hace más de un mes, se había dedicado de lleno a sus deberes en la escuela, cuando salía de clases iba directo a la biblioteca a hacer sus tareas y cuando terminaba buscaba un buen libro para leer, lo tomaba y se iba a alguna otra parte del castillo para poder disfrutarlo un poco más a solas y en algunos momentos usaba su varita para practicar. Quería quitar la mala imagen que se le había quedado después de aquel día.

Cuando fueron encontrados por Filch, él había llamado a los líderes de cada casa para que vieran lo que acababa de ocurrir, como había pasado desde un inicio, el los culpaba de ser los responsables del ataque a Colin y a la señora Norris, sin embargos los profesores les hicieron un interrogatorio antes de buscar una explicación. La profesora McGonagall había llevado al estudiante petrificado al hospital junto con la señora Pomfrey y el profesor Dumbledore. Mientras que ellos se habían quedado a cargo del profesor Snape y el profesor Flitwick.

Ellos les habían preguntado qué hacían deambulando por los pasillos del castillo a esas horas de la noche. Como ninguna de sus compañeras contestaba, él tuvo que ser quien salvara al grupo. Mintió al decir que se dirigían a la biblioteca a estudiar, dijo que ellas le habían pedido ayuda y él cortésmente acepto a enseñarles algunas cosas. Angelic le había ayudado a sostener su historia diciendo que últimamente se le complicaba la clase de encantamientos y necesitaba aprender todo correctamente antes de que llegaran los exámenes. Las chicas de Slytherin solo asintieron con la cabeza. Como era de esperarse el profesor Snape no les creyó, incluso amenazó con utilizar veritaserum para escuchar la verdadera razón, sin embargo, el profesor Flitwick lo convenció de que eran inocentes y estaban diciendo la verdad. Cada jefe de casa se encargó de castigar a sus alumnos. 60 puntos fueron restados para Slytherin esa noche, 30 por cada niña, 20 menos para Gryffindor y la misma cantidad para Ravenclaw.

Ahora tenía que intentar recuperar los puntos y ganar más para que al final del curso, su casa pudiera ganar la copa. Estudiaba más de lo que cualquier chico de su edad hacía, deseaba aprender todo tipo de hechizos, incluso los que fueran prohibidos. No deseaba dañar a nadie, solo quería poder conocer y manejar todo tipo de magia, y por eso había tenido la idea de visitar la sección prohibida, una leída a un libro no le habría caído nada mal, además le parecía tonto que la escuela contara con ejemplares así y nadie pudiera usarlos, ¡era un desperdicio! No obstante tenía que aguantar sus ganas y dejar ese tipo de aprendizaje otro día.

Siempre cumplia con sus tareas, le gustaba mucho pasar sus ratos libres haciéndolas, dedicaba mucho tiempo y siempre entregaba cosas de buena calidad, y especialmente ahora, aumentaron las horas que estudiaba, pues Angelic le había pedido ayuda para repasar algunas cosas y aceptó para que así los profesores pudieran creer que lo que dijeron esa noche era verdad. Daenys y Raine también se unían al club de estudio, se reunían todas las tardes en el aula abandonada del sexto piso después de la comida y ahí platicaban y estudiaban. Su relación con Raine no era muy buena, a ella le gustaba mucho molestarlo cuando hacían un comentario que demostraba su conocimiento, pero con Daenys y Angelic, se llevaba bien.

Hogwarts es más que el elegidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora