Llevaban varios minutos hablando del tema, Hanna miraba a Zen con el ceño fruncido, se encontraba cruzada de brazos.
Hanna: No me tienes que explicar nada, hablé con Leyla y me dijo todo además no sé si esperabas que con tus palabras me quedara tranquila porque eso no iba a pasar. Necesitaba escucharlo de ella Zen, y bueno ahora que lo pienso, hay algo bueno de escucharlo de ti... ¿Que clase de persona son ustedes?
Zen: Lo dices cómo si fuéramos tan malos, quizá estamos un poco desalineados pero tenemos lo nuestro Hanna y si quieres saber si tú puedes entenderlo pues... No, dudo que puedas comprender cualquier cosa pero ¡Vamos! Que eso no es novedad, desde que éramos pequeños Shiva y yo éramos malos para ti ¿No?
Hanna: ¿Que? ¿Eso que tiene que ver? Éramos unos niños y si quizá mis padres me cuidaban más de la cuenta pero eso jamás me importó a mí, nunca le tome importancia a la cantidad de problemas que metias a Shiva, no entiendo cómo a mis padres les importaba más que a los de Shiva.
Zen: Eso era porque eran tonterías de niños, cosa que tus padres no com... Sabes, eso no importa. No somos unos niños y tú mundo no es ni medianamente como el mío, incluso cuando nuestra clase social sea parecida siempre seremos diferentes. Las personas que acostumbro tiene una forma de ver la vida y es diferente a la de los demás. Creen que pueden hacer lo que quieran y ¿Sabes que es lo peor? Lo hacen. El dinero nos sale hasta por los codos y así arreglamos toda nuestra mierda a base de pasta. Ni yo, Ni nadie nos hara cambiar, no somos malos solo nuestra manera de divertirnos no es la correcta pero eso no importa. Somos un grupo de personas que apenas se encontró para seguir haciendo estupideces.
Hanna: ¿Haz obligado a hacer a una chica algo que no quiere?
Zen: No fue obligada, ni siquiera la tocó y no, nunca lo he hecho. Lo dices como si hiciéramos eso siempre.
Hanna: Pues ¿Cómo puedo saberlo? No te conozco ni a ti ni a nadie de tus amigos.
Zen: Es la primera vez que pasa algo así y fue la última, Levi no lo hará más, ya le dije que eso visto de otra manera lo meterá en problemas, Shiva no es así y Zero no se presta para eso además Seiv estaría muy drogado para obligar a alguien y yo no soy capaz.
Hanna: Bien, no me meteré más contigo y las personas a tu alrededor. Siempre creí que si me hubiera mantenido en contacto con ustedes la amistad hubiera seguido pero creo que a como eres ahora, en algún momento todo se hubiera roto así que no importa, le veo el visto bueno a eso, al menos ya no seguiré pensando en que hubiera pasado.
Zen: Piensa lo que quieras Hanna.
El peliverde se levantó del sillón y él fue por las llaves del auto, Hanna se levantó dejando la toalla sobre el sofá, ambos salieron de la casa. Ella se subió en el lugar del copiloto y Zen del piloto, comenzó a manejar sin decirle nada, la peliverde temblaba un poco de frío, sentía que le daría fiebre.
Ella se encargó de darle las indicaciones para que llegase hasta la casa de la fraternidad, una vez llegó se estacionó frente a esta.
Hanna: Gracias.
Dijo abriendo la puerta dispuesta a salir, sin embargo, Zen la tomó del brazo impiendole irse.
Zen: No sé ni porque digo esto pero busque tener contacto contigo desde que me fui, Shiva es el único que sabía esto... Tú de verdad me agradabas Hanna y supongo que más que eso pero fue hace tiempo, quería seguir hablando contigo... Si te hubiera visto en el aeropuerto me hubiera detenido por ti aunque siendo sincero incluso si te hubiese visto no te hubiera reconocido. Por eso Shiva te llevo, yo no creo que se hubiera roto, no con la Hanna que yo conocía pero... Todos cambiamos así que supongo que eso último está en duda.
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TCDR
Teen FictionEsta es una historia sacada de un rol mini historia que hice hace un tiempo, los personajes vienen acompañados de imágenes que se usaron en su momento, no soy dueña de ninguna (obviamente) además de nombres que normalmente salen en series, animes o...