Hola, de nuevo, os dejo otra de mis historias sobre Castle; la estuve escribiendo en la tablet y creo que ya es hora de compartirla con vosotros. Espero que os guste, se la dedico a mi gran amiga Rocío, fue ella la que me dio el valor para seguirla; gracias Fillionatic.
La ajetreada ciudad de Nueva York se dispone a ponerse en marcha al mismo tiempo que los primeros rayos de sol alcanzan los enormes rascacielos, unos van caminando y hablando por el teléfono, otros se han visto inmersos en el ruidoso tráfico que se forma cada día a la misma hora. Es lo que tiene trabajar fuera de casa, para mí no supone un problema ya que mi despacho se encuentra en mi lujoso loft lejos de la multitud y decorado a mi gusto.
A decir verdad, últimamente no estoy escribiendo nada, no encuentro inspiración para seguir con mis novelas por lo que he decidido tomarme un tiempo para descansar y pasar tiempo con Kyra, mi novia desde el primer año de Universidad. Somos como dos gotas de agua, nos complementamos.
Un dato, la historia es en tercera persona.
El día era caluroso, demasiado para haber comenzado la primavera, Ava ya se ha levantado y ahora mira un libro, es su favorito. Kate tomó una gran decisión al tenerla por inseminación artificial, ella eligió al donante, nueve meses después nació la pequeña Ava, con el pelo color castaño claro, ojos verdes mezclados con un color avellana y una cara muy dulce. Ahora la pequeña tiene tres añitos y es muy inteligente y espabilada.
- Mami, tengo hambre.- Kate le prepara su bol con cereales, hoy tiene que dejar a su hija en el colegio, fue una suerte encontrar uno cerca de la comisaría.
- Mami.- Ava se llena la boca de cereales, algunos se le caen a la mesa.
- Cariño, te lo digo todos los días, no te llenes tanto la boca o acabarás ahogándote.
- ¿Hoy vamos a ir al parque?- Kate vacila durante unos segundos, espera no tener mucho trabajo hoy, su pequeña quiere estar con ella y la comprende perfectamente; su abuelo Jim se ha ido de viaje.
- Intentaré terminar antes para que asínos de tiempo, ¿vale?
- Vale.- madre e hija desayunan mientras charlan, Kate prepara la mochila de su hija, se guarda la placa, la pistola, la cartera, el móvil y las llaves. La inspectora conduce sorteando los coches, consigue un buen aparcamiento, la profesora espera a los niños en la puerta.
- Pero mira quién viene, la princesita Ava.- ésta se esconde detrás de su madre.
- Cielo, si es tu profe Laura, la viste ayer.- la mujer de unos treinta años, rubia, buen físico y con los ojos azules se agacha para hablar con Ava.
- ¿Sabes Ava? Hoy tenemos una sorpresa preparada, ¿quieres verla?- La pequeña se va soltando poco a poco de su madre hasta que al final le da la mano a su profe.
- Vendré a las seis a recogerla, adiós mi vida.- Kate se despide de su hija y se marcha al trabajo. Cuando llega allí se encuentra con sus compañeros, Javier Espósito, hombre hispano con una cierta pasión por el ejercicio físico, a su lado Kevin Ryan, hombre de familia e irlandés.
- Buenos días chicos.
- Buenos días Beckett, ¿ya has dejado a la peque en el cole?
- Sí, ¿cómo vamos con el caso?- Hace unos días encontraron a un joven flotando en el lago de Central Park, afortunadamente los niños no lo vieron. La víctima había recibido tres balas en el abdomen y después arrojaron el cuerpo al agua.
- Hemos hablado con todos los testigos y nada pero mira.- Espo le da una tarjeta que encontró en la chaqueta de la víctima.
- ¿Nuestro cadáver era Gigoló?- Sus compañeros asienten.
- Y de los buenos.
En otra parte de la ciudad, unas horas más tarde...
Castle camina por el pasillo de las oficinas con una gran sonrisa, algunos le saludan y otros le ignoran. Rick llega a la puerta del despacho de Kyra, ésta mira fijamente unos papeles a la vez que revisa unos datos en el ordenador.
- ¡Buenos días!- Kyra pega un pequeño brinco, se quita las gafas y se masajea la sien con los dedos.
- Hola Rick, ¿quéhaces aquí?- Éste se esperaba más emoción por parte de su pareja pero intuye que es porque está agotada.
- Estaba dando un paseo y te he traído un café.- Kyra se levanta, besa al escritor en la mejilla y se bebe el café casi de un trago.
- Muchas gracias, ahora tengo una reunión, ¿nos vemos en casa?
- Pero Kyra yo...- en ese momento un hombre moreno, musculoso, y una sonrisa perfecta entra al despacho.
- Kyra nos están esperando.- el hombre se da cuenta de que Rick sigue ahí.- ¿Y tú eres?
- Richard Castle.
- ¿El escritor?
- En efecto.- el hombre le estrecha la mano.
- Señor Castle yo soy Dallas Smith, un placer. Y dime, ¿qué le trae por aquí?- Kyra no les presta atención, sigue guardando los papeles en su maletín. ¿Qué le pasa? Ha estado fría con él.
- Al parecer sólo he venido a perder el tiempo.- dicho esto se marcha dando un portazo, ¿por qué Kyra le trata de esa forma? Tampoco ha dicho o hecho algo para ofenderla, Castle camina sin rumbo, algunas fans se hacen una foto con él, Rick se acaba sentando en un columpio. Algunas madres le sonríen, los niños juegan al escondite, a indios y vaqueros y más juegos; una niña pequeña intenta sentarse en el columpio de al lado.
- ¿Quieres que te ayude?- La pequeña le mira con miedo, asiente con cierta timidez, Castle la coge y la sienta.
- ¿Y tú mamá?- Ésta señala a una mujer alta, morena, lleva unos vaqueros ceñidos a su cintura, una camisa y una americana azul oscura.
- Ava, ¡Te he dicho que me esperases! ¡Ya sabes que no quiero que estés sola!- Kate ni se ha percatado del hombre que hay sentado al lado hasta que Castle decide hablar.
- A tu hija le gusta la aventura.- Beckett se fija ahora en él, ¡no puede ser! ¿Qué hace él aquí?
- Eres, eres...
- Sí, soy un hombre apuesto, inteligente, y a veces, un poco infantil.- Kate ladea la cabeza, reprime una carcajada.
- Iba a decir que eres Richard Castle, soy una gran admiradora. Me he leído todas sus novelas.
- Por favor no me trate de usted, ¿quieres algún autógrafo?- Kate no lleva ningún libro encima, los tiene todos en su apartamento.
- Desgraciadamente no llevo ningún libro ahora mismo.
- Una lástima, no me has dicho cómo te llamas.
- Cierto, me llamo Katherine Beckett, Kate para los amigos y ésta niña de aquí es Ava, mi princesa.- Castle le estrecha la mano, ambos sienten un escalofrío al tocarse; el tiempo se detiene y sus miradas se cruzan.
- Mami, mami.- Kate se despierta y observa el baile de su hija.
- ¿Te haces pipí?- Ava asiente, su apartamento les pilla un poco lejos.
- Si quieres podéis venir a mi loft, está ahí al lado.
- Gracias Richard pero acabo de conocerte, no es nada personal es por...
- Seguridad.- termina diciendo Castle.- lo entiendo, de todas formas toma mi tarjeta, para quedar y poder firmarte los libros.
- Muchas gracias, ya te llamaré. Cariño, dile adiós al Señor Castle.
- Adiós.
- Adiós renacuaja.- Rick y Kate se van alejando, caminos opuestos y sin embargo, se han encontrado.
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La fuerza del Destino
FanficCastle vive con Kyra, la quiere pero pronto descubrirá que algo no va bien entre ellos. Todo comenzará cuando el escritor ayuda a una niña a subirse al columpio, la pequeña Ava. Kate conocerá a su ídolo gracias a su hija.