Llovía.
Yo pensaba que era cosa sólo de películas en las que llueve cuando tu estado anímico compite con la familia Adams
Pero no.
Llovía.
Además, el cielo era de ese color gris plomizo que te hace pensar en todo y en nada.
No soportaba el silencio, pero estaba embobada mirando por la ventana mientras la lluvia lo envolvía todo con el olor a tierra mojada.
Era uno de esos dias vacíos entre el tiempo
Que parecia no tener fin y al mismo tiempo se asemejaban al aleteo de una mariposa.
Era uno de esos dias que solo invitan a un viaje a la cama