t r e i n t a y s e i s

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thomas evitó todo el día al noruego, no iba a hablarle.

pero por otro lado, tord si quería hacerlo, así que esperó a que terminen las clases para que puedan hablar.

al salir de clases, thomas estaba sólo a un lado de la puerta del colegio, jugando con su celular, entonces el de cuernos aprovechó para acercarse a él, llamando su atención.

hey, tom, bebé, lo siento por lo del otro día, no debí hacerlo...— le dijo en un tono desanimado, mirándolo apenado.

—no, no debiste, pero lo hiciste.— contestó el de cabello en punta sin mucho interés por la conversación.

—se que estás enojado conmigo, pero quisiera que me des otra oportunidad, juro que no lo volveré a hacer.— continuó, acercando su mano hacia la mejilla de ridgewell para acariciarlo.— vamos bebé, por favor...—

tom quedó en silencio por unos segundos, pero luego separó la mano del mayor de su mejilla.

—no soy tu bebé, ni volveré a serlo.— contestó, mirando hacia la puerta del colegio, viendo que matt salía junto con patryk.

obviamente matt se acercó con rapidez hacia el menor, tomando su mano y entrelazando sus dedos.

—ya vamos, bebé.— le dijo el pelirrojo a quien le tomaba la mano.— adiós pat, nos vemos.—

cuando el de pecas se despidió del de cabello largo, ambos menores comenzaron a caminar hacia la otra dirección de la cual estaba tord.

esto sólo había dejado aún más molesto al comunista; no podía recuperar al pequeño con sus mentiras, éste se niega a que le diga como siempre y para colmo llega el zanahoria para alejarlo mientras lo llama 'bebé'.

pero aún así, sólo pensaba que tom le pertenecía.
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you're toxic i'm slippin' under
with a taste of a poison paradise

"banana brain" - tordtomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora