Destinados

195 28 2
                                    

OMG!!! No puedo creer que el tiempo pase tan jodidamente rápido (disculpen la mala palabra) pero ya es 20 de Mayo y me sigo preguntando ¿Cómo es que casi pasó ya medio año?
Bueno, dejando de lado la crisis del tiempo, y de que terminó SVTFOE, les dejo un nuevo capítulo
--------------------------------------------------------

Tras varias horas de vuelo por fin nos encontrábamos pisando Japón, había sido un viaje turbulento, hablando metafóricamente, ya que después de que mi amigo tailandés me pidió que viajáramos a la tierra del sol naciente no pasaron ni tres horas cuando nos habíamos subido a un avión.

Esa noche subí a mi habitación, guardé mis cosas en mi maleta de forma rápida y desordenada, escribí una nota para Lilia y Yakov diciéndoles que todo estaba bien y salimos al aeropuerto.

Todo lo hice en un ataque de adrenalina, pero ahora que habíamos bajado del avión y prendía mi celular decenas de notificaciones de llamadas y mensajes comenzaron a llegar. Era hombre muerto.

Decidí no contestarle a mis tíos hasta haber pensado que decir. Así que volví a apagar el teléfono, me dirigí junto a Pichit a recoger el equipaje y después nos dirigimos al área de taxis.

Fue un viaje de alrededor 30 minutos en los cuales Pichit habló animadamente, parecía más al tailandés que conocí en Canadá, se veía de mejor humor y más animado.

Llegamos a un hotel con aguas termales que le pertenecía a la familia de Yuuri, apenas llegamos Pichit caminó a recepción donde una mujer de estatura baja, cabello castaño, pequeños ojos y cara redonda, le sonrió de forma amplia a mi amigo.

Comenzaron a hablar en japonés, sobra decir que no entendía ni una palabra, pero sonreían y se notaba su entusiasmo, en algún momento de la conversación voltearon a verme, yo sonreí, la mujer me regresó la sonrisa y me dijo en un inglés pausado.

- Bienvenido, Vícktor. Soy Hiroko Katsuki, me da mucho gusto que nos visites, te daré la mejor habitación del lugar y cualquier cosa que necesites no dudes en llamarme.

- Muchas gracias, agradezco mucho su atención- le dije agradecido, el aura de la mujer me hacía sentir cómodo y me contagiaba felicidad.

- Andando, te llevaré a tu habitación, debemos descansar, las últimas horas han sido una locura- me dijo Pichit sonriéndome, yo asentí y lo seguí por el lugar.

Caminamos un par de minutos, el lugar era más grande de lo que creía, mientras caminábamos por los pasillos pude ver a los demás huéspedes, algunos iban en familia, otros en pareja e incluso había personas que estaban solas, pero todos lucían tranquilos y relajados.

Me llamaba la atención la idea de las aguas termales pero en este momento solo quería dormir así que mi plan era tomar un baño en regadera y dormir por lo menos 12 hrs.

Llegamos a un lado del lugar que parecía más tranquilo y privado, miré con curiosidad esa sección, había fotos familiares y adornos que parecían combinar más con la señora Katsuki.

- Esta es la parte donde viven los señores Katsuki - me dijo Pichit al percibir mi curiosidad- Es más privada esta parte del lugar, te quedarás en la habitación de huéspedes.

Yo asentí mientras seguíamos caminando, después de dar una vuelta por el pasillo, por fin llegamos, el tailandés abrió la puerta y me dejó entrar. Miré el lugar era pequeño pero cómodo, había una cama junto a la ventana, esta daba a un pequeño jardín donde había flores de muchos colores y un par de árboles, a un lado de la cama esta un escritorio y al fondo un baño.

- Bien, aquí te quedarás, cualquier duda que tengas yo estaré en la habitación que está a un lado de las escaleras- me dijo Pichit sonriéndome, yo asentí- Por cierto, la habitación de enfrente solía ser de Yuuri, por si quieres curiosear un poco.

All I want is everything *COMPLETA*Where stories live. Discover now