|Extraña y Atrayente actitud|

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E. Aster Bunnymund era masculino, su cuerpo, a pesar de ser un conejo, no podía ser ignorado por las féminas, él se sentía seguro de si casi siempre. B. Venus Cupid también se sentía segura de sí, es decir, los griegos prácticamente la declararon la más bella de las mujeres. Sin embrago ambos tenían la misma pregunta: ¿Por qué no me siento, ni se siente atraído?

Cupido estaba confundida, creía que nunca tenía suficiente de conejo, sin embrago últimamente su físico no le atraía de esa forma, solo quería acariciar sus orejas o apretar su mejilla. Conejo al ver a Cupid sentía calidez y ternura, pero sus curvas y rostro ya no le producían el mismo efecto a su cuerpo. Ambos sabían que se amaban, pero por qué no lo sentían?

Por otro lado, Tooth siempre se sintió atraída por conejo, pero ahora era más fuerte que nunca y por sus miradas entendía que ella no le era indiferente, eso la hacía sonreír mentalmente, quizás aún había tiempo. Jack tampoco se sentía muy bien, siempre amó a Tooth, y estaba destinado según el hilo de cupido, pero cada vez que veía a cupid se sentía extraño, era linda, si, pero su personalidad, era la más atrayente.
Sentía que podía comparar lo que sentía con ella con el experimento de la llave y la cometa, había una afinidad definitivamente.

-Cariño, mira, te hice un pastel de zanahoria- le decía Cupido a conejo con entusiasmo, quizá actuar como una pareja dulce le ayude, pero se sentía extraña diciendo eso, la palabra "cariño" le parecía tan falsa.

-Que tierna eres Venus-dijo con media sonrisa el canguro sub desarrollado. Venus, ni siquiera podía decirle linda?, O alguna mierda tierna?... quizá la transformación también afectaba su personalidad y por eso estaba más sensible y menos angelical.

Y es verdad, al estar menos "Cupido" más real por así decirlo, conejo sentía que estaba con una desconocida, una muy sexy, pero desconocida al fin y al cabo.

- Ok, ya estoy harta- dejó el pastel con fuerza sobre la mesa- qué mierda te pasa?

-... qué?- quizá fue lo repentina de la pregunta o la palabra mierda, pero eso sin duda alguna lo sorprendió o por lo menos eso mostraba su rostro.

-Te haz comportado como un idiota, o acaso crees que no me doy cuenta de cómo miras a Tooth?- dijo directa, no solía ser así, pero era hora de ponerse los pantalones.

Conejo suspiró, mirando el pastel, parecía pensar bien sus palabras.

- Últimamente haz cambiado demasiado, entiendo que la transformación afecte el conjunto de lo que eres pues... -La apuntó completa- tú -La miró con cierta tristeza y tomó su mano- pero siento que no eres la chica de la que me enamoré.

Se quedó quieta, muda, lo miraba como si hubiera dicho la peor atrocidad de este mundo, lo admitía, eso dolió bastante, quitó su mano con brusquedad y comenzó a caminar fuera de la habitación.

- creo que deberíamos dejarlo por un tiempo y-no pudo terminar, un pastel de zanahoria se impactó en la cara del canguro. Al quitarlo Venus no estaba, pero si el anillo de compromiso. Conejo sonrió.

-Bueno, parece que la niña es fácil de engañar -su forma se volvió una nube negra que cambio a la forma de Cupid- ahora veamos cómo nos va con el conejito.

Más tarde nadie entendía que pasaba, pero Cupido no quería mirar a conejo, se notaba el odio en su rostro. Mientras conejo sí la miraba, pero con un profundo arrepentimiento. Solo sabían que no estaban juntos, eso por parte de tooth, quién consoló a conejo cuando le comento cómo cortó con Venus, la principal razón fue su actitud de posesiva.

Jack sin embrago no creía la versión de conejo, pues a pesar de no conocerla por tanto tiempo le agradaba la actitud relajada y dulce de Cupido, ahora solo estaba más irónico, nada realmente relevante, pero parece que el conejo realmente era un amargado.

Hello HoneyBunny!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora