°-Edward-°

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- Me gusta, Edward, es un buen nombre- sonreía él.

- si pero... qué tal Jackson como apellido?, Es imponente y..hasta cierto punto atractivo- el como tú se quedó en la punta de su lengua, era una dama, no debía ser tan fácil, pero él la hacía estremecer y eso que recién se conocían, si la viera su madre.

Él en cambio estaba realmente sonrojado, tal parecía que para ella no era tan feo, Edward Jackson, ella lo nombró y él llevaría ese nombre con honor, con orgullo.

-Tn!!!, Dónde estás?- girtaba desesperada Liliana.

- es tu hermana?- decía El joven con orejas de conejo, mirando hacia los prados.

Sin contestar su pregunta le dijo rápidamente- en este mismo lugar al anochecer- besó su mejilla y corrió como alma que se lleva el diablo.

La vió reunirse con su hermana y mientras él se tocaba la mejilla, ella deseaba verlo otra vez.

Pasaron varios días viéndose a escondidas. Ella le contó sobre su familia, lo importantes que eran y como su padre la presionaba para casarse, ya tenía 16 y ningún pretendiente, pues todos buscaban a la pequeña Liliana de 14, por qué?, Ambas eran bellas, prácticamente perfectas. Pero Tn era demasiado orgullosa y liberal para los caballeros, una mujer con carácter fuerte, hecha para mandar no para ser la sumisa de un lord. En cambio Liliana era alegre, no muy calmada, pero si sumisa ante la presencia de un hombre.

Para Edward ella era perfecta, una mujer de verdad según sus propias palabras. Sin embargo era un tanto ingenua, por eso cuando ella le mencionó una salida al pueblo con su hermana decidió seguirla, la cuidaría de cerca, para eso adoptó una forma de pooka mucho más humana, aún no se formaba como guerrero, por ende era más fácil transformarse en humano.

-dime, si te preguntan tu nombre qué dirás?- preguntaba Tn a su hermana.

- Victoria White- dijo esta sonriendo, White era el apellido del que ahora era su pretendiente más apropiado, tenía plazo hasta los 16 para escoger, por lo cual aún no se adelantaría, pero le gustaba el apellido.

-y yo seré Berenice- sonreía ella con orgullo por el nombre que escogió.

-como la tía solterona?, Qué mal gusto- río Liliana.

-oye!, Es independiente, no necesita un hombre!, Me gustaría ser como ella...pero..

No pudo terminar Liliana corrió a comprar unas bellas frambuesas, que según ella, agradarían a su padre en un dulce pastel. Edward quién escuchaba maldijo a la mocosa, al fin iba a saber si lo consideraba importante o no.

Así pasaban los meses, tenían encuentros casuales, que después se tornaron en algo más serio. Hasta que Tn decidió presentarlo a su hermana.

- Es agradable, te gustará, es muy importante para mí que tú lo aceptes como mi pretendiente- decía con emoción Tn.

-Si tiene el valor de estar contigo, debe ser un buen hombre- rió cuando su hermana le dio un golpecito en el hombro por su comentario. Entonces lo vio, un hombre alto de unos 26 años, realmente fuerte. Liliana, estaba feliz por su hermana, pero también celosa, siempre tuvo más pretendientes, pero jamás uno tan guapo, tan irreal.

-Su nombre es Edward Jackson- sonrió ella.

- Miller- ambas mujeres lo miraron- lo cambiaré a Miller.

Escuchó que Miller era más prestigioso que Jackson, si quería que el padre de Tn lo mirara de buena forma debía fingir ser de importancia.

Pero a la que realmente le llamó la atención era a Liliana, lo deseaba, guapo, importante y dulce, ella era la esposa ideal, él debía ser de ella. En ese momento paró, no podía hacerle eso a su hermana, quizá era el único que podía amarla.

Se mordió la lengua y les dio una sonrisa muy dulce- espero que su amor perdure.

Tn no esperó más y de lanzó a los brazos de Edward llenándolo de besos, está de más decir que él se sentía feliz con las atenciones.

Edward había dejado de lado su deber de pooka, seguía una vida humana "normal", de la nada creo una mini empresa, y se convirtió en un burgues cuyas ganancias iban en ascenso, ya con cierto estatus decidió pedir la mano de Tn. El padre de ella aceptó encantado y ella aún más...pero...algo ocurría sin que se dieran cuenta.

La envidia de Liliana se volvía más fuerte, eso le daba fuerza a algo más grande, algo que podría acabar pronto con el cuento de hadas.

Pasó en el baile de primavera, la familia de Tn daba uno cada año. Este era especial, Tn era el centro de atención, pues se daba a conocer que tenía un prometido, en medio del evento cuando todo era perfecto, ocurrió el desastre.
Las luces se apagaron y una masa sin forma comenzó a atacar, todos huían, creían que sería su fin.

Edward adoptó su forma de pooka y atacó al enemigo, salvando a los invitados y a la familia de su amada, está corrió a agradecerle, pero no todos pensaron igual.

-Es una bestia- dijo el padre de Tn, miraba con asco a Edward- a mi oficina.

Las miradas en la oficina eran de desafío, un padre que no cedería, y una pareja que no se separaría, la discusión fue acalorada, llegaron al acuerdo de que ellos se casarían pero Tn perdería el apellido y cualquier derecho a herencia, la única heredera era Liliana.

Pero sin saber la condenaron. El padre de las chicas no permitiría otro error, por lo tanto fue él el que escogió el hombre de su hija. Un lord de tierras lejanas, un hombre cruel y abusivo, quería un heredero, si resultaban féminas asesinaba a la madre y al resultado. Liliana odio a Tn, ella la había condenado, todo por ese conejo.

La oscuridad que provocó toda esa situación se había aliado con un reino vecino, inmediatamente comenzó una guerra sangrienta donde el reino de Tn iba perdiendo, está juntos a Edward decidieron ayudar, sin embargo todo acabó mal.

Edward necesitaba convertirse en Guerrero, para ello llevar a cabo una prueba. No dijo dónde iba ni cuánto tardaría, en ese tiempo Tn se había echo con su propia tropa, llevaban muchas victorias, hasta que un caballero con el rostro cubierto apuñaló a la líder por la espalda, una táctica baja pero efectiva. Cuando Edward término su entrenamiento ya era tarde, era demasiado tarde, de su amada solo podía ver una tumba improvisada. Cegado por el dolor peleó, con su nuevo rango lideró una tropa de pookas, fue demasiado para ellos. Poco a poco los mató, uno por uno, dejando a Edward para el final.

-Te veré en la otra vida- le dijo con una risa macabra un hombre de piel gris y negros ropajes- me conocen, como Pich black -fue lo último que escuchó antes de irse por completo de ese mundo.

-lo hiciste bien querida, ahora tienes tú libertad, otra tomará tu lugar- le hablaba el lord a el caballero que asesinó a Tn- qué harás Liliana?, Qué deseas como recompensa?

-Desde ahora seré victoria Miller, quiero una tropa, estatus, quiero ser importante- ya no tenía su dulce mirada, y es que ciertas circunstancias, convierten a las personas.

Ese día murió Liliana y nació Victoria, una mujer sin corazón, sin vida, sin piedad. Pero siempre guardaba bien todas sus memorias.

Era una historia triste a decir verdad, bastante turbia, pero si conejo supiera todo, seguramente no hubiera hecho lo que hizo con toothiana.

E. Aster Bunnymund.

B. Venus Cupid

Berenice y Edward, nombres que conservaron de su vida pasada, nombres que marcaron su vida.

Esta era su oportunidad de ser felices, pero las sombras del pasado se niegan a aceptarlo, ahora solo pueden

Resistir

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Esto se está poniendo intenso, próximo capítulo les aviso que será un "tú x Jack frost" pero así bien rico, es decir, si conejo se tiró a Tooth tenemos derecho de una aventura con la escarcha o no?

Los amo chicoooos 💞

Hello HoneyBunny!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora