capítulo VI

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Al despertar temprano esa mañana Isabella se preparó para desayunar junto a Dereck, el cual parecía estar de mejor humor esa mañana, que en lo que llevaba de semana. Así que decidida a no darle más largos fue directa y le pregunto:

- Dereck - inicio después de servirle algo de jugo en un vaso - hace días quiero preguntarte... - hizo una pausa mientras él la miraba fijamente mientras elevaba una ceja, claro signo de que continuara - ¿sería posible que visitará a mis hermanos? - hizo una pausa y tomo aire - se que firme un contrato contigo, pero en él no decía nada acerca de mi familia. También se que tenemos que mantener las apariencias pero te aseguro que nadie lo sabrá y...
- Me parece bien
- ¿Que? - le pregunto sorprendida de que hubiese aceptado tan rápido.
Dereck la volvió a mirar y repitió:
- Dije que está bien, me parece una buena idea que visites a tu familia, era algo que estaba pensando sugerirte de todas formas - hizo una pausa - puedes visitarlos cuando quieras solo ten cuidado de que nadie te vea y regresa temprano a casa, no es seguro andar de noche por las calles.
-¡Gracias! - Bella dijo emocionada mientras se lanzaba a sus brazos - gracias, gracias, gracias - y en medio de la emoción le dió un beso.

El beso fue inesperado para los dos, en ese momento Isabella penso que Dereck la apartaría de inmediato, ella ni siquiera sabía porque había hecho algo así, pero contrario a eso Dereck envolvió los brazos alrededor de su cintura y acomodándola en su regazo le devolvió el beso con una intensidad avasalladora, moviendo los labios a un ritmo único como si estuviesen bailando un baile que solo ellos conocían con sus bocas.

Para cuándo se separaron Isabella estaba completamente sonrojada y sin aliento, y cuando intento decir algo Dereck se levantó de la silla obligándola a hacer lo mismo y abandonar su regazo.

- Ya es tarde - dijo viendo la hora en su reloj de muñeca - debo de ir a la oficina, pero, hablaremos en la noche - completo para luego tomar su saco y darle un pequeño beso en los labios antes de salir por la puerta en dirección al auto dejando a Bella completamente anonadada y desconcertada.

Era cierto que ella se había lanzado a sus brazos y lo beso en un principio, pero ¿por qué él le había devuelto el beso?

No lo sabía, pero lo cierto es que le había gustado muchísimo, estaba completamente decidida, esa noche sería, esa noche hablaría con él del tema y le explicaría como se sentía respecto a él.
Quizás si lo conversaban, podría entender que era ese sentimiento que le quemaba el pecho y no la dejaba dormir en las noches por estar pensando en él.

Con esa idea fue a prepararse, Dereck había dicho que podía visitar a sus hermanos cualquier día, así que, ¿para que esperar? iría ese mismo día, los extrañaba demasiado como para aguardar un día más.
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Antes de llegar a la casa de sus hermanos había llamado a Dereck y le había dicho que iría ese mismo día a visitarlos, en cambio él le aseguro que estaba bien con eso y que debían de hablar esa noche así que debía de llegar temprano a casa, le había asegurado que la estaría esperando para cenar, así que con esa idea descendió del auto y se acercó a las escaleras que daban acceso a la pequeña casa donde ahora vivían sus hermanos.

Dereck había cumplido su palabra y no solo eso, había hecho mucho más, les había conseguido una nueva casa en un vecindario un poco más seguro en el centro de la ciudad y estaba ayudando a William a conseguir un trabajo decente y honesto que no pusiese su vida ni la de sus hermanos en peligro.

Al entrar la nueva casa se quedó completamente sorprendida, había una sala con una enorme TV, la cocina estaba equipada con todo tipo de aparatos electrodomésticos (no eran como los que había en la casa de Dereck, pero eran tal y como ella siempre había soñado) y lo que más le maravillo fue ver todos aquellos juguetes y libros para niños que se encontraba esparcidos por todo el lugar dándome color y vida a la estancia.

una Esposa para el Millonario Donde viven las historias. Descúbrelo ahora